Las consecuencias de la guerra en Ucrania en la economía global han sido inmediatas y evidentes y la incertidumbre sobre su desarrollo y duración sólo agravan el panorama. Uno de los aspectos más sensibles es el relacionado con el alza de los precios de los alimentos. En un mundo que aún asume el costo de los años más duros de la pandemia, la guerra llegó como un severo segundo golpe que se siente incluso a miles de kilómetros de distancia, como por ejemplo en los bolsillos y en la mesa de cada chileno.

La guerra en Ucrania, sin embargo, fue una gota que rebalsó un vaso que se venía llenando hace tiempo. Eso es lo que plantea nuestro entrevistado de hoy, quien apunta a una tendencia al alza en los precios de los alimentos que se arrastra desde hace años. Rodrigo Wagner, académico de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez, también sugiere caminos de salida, políticas públicas que el estado podría adoptar para paliar un problema tan grave como este.