La Unión Europea encendió ayer las alarmas: si no se adoptan drásticas medidas para detener los contagios de covid-19, habrá un “dramático” aumento en el número de hospitalizaciones y muertes, sobre todo por las fiestas de fin de año. La situación ya está siendo compleja, incluso en regiones con altas tasas de vacunación. Algunos países de Europa registran más contagios diarios que nunca antes en la pandemia, lo que se explica por la fuerte presencia de la variante delta. En Alemania, República Checa, Eslovaquia y Hungría el número de enfermos se ha disparado a pocas semanas de la llegada oficial del invierno. En el Reino Unido, las últimas cifras hablan de unos 43.000 contagios nuevos y 150 muertes en una sola jornada.

A la preocupación por los efectos propios del virus se ha agregado un problema que ha crecido en protagonismo. Las protestas ante las restricciones impuestas por los diferentes gobiernos ya no son sólo de grupos antivacunas marginales, y amenaza con convertirse en un obstáculo fundamental en la lucha contra la enfermedad. El domingo pasado, una manifestación de decenas de miles de personas en Bruselas se tornó violenta; el viernes en la noche había ocurrido algo similar en Países Bajos, en una protesta que terminó incluso con disparos por parte de la policía. Austria, Irlanda del Norte, Suiza, Italia y Croacia también han visto manifestaciones violentas.

Aun así, los gobiernos del continente persisten en sus estrategias de vacunación y de implementación de estímulos y restricciones en base a pases de movilidad. Ayer, la agencia pública de Salud de la Unión Europea recomendó oficialmente a los países miembros administrar la dosis de refuerzo a todos los adultos, priorizando a los mayores de 40 años. Esa tercera dosis no es norma común en Europa, donde sólo España y Portugal superan el 80% de la población inmunizada con las dos dosis básicas.

En este panorama, el invierno y las inminentes concentraciones de personas con motivo de la Navidad preocupan aún más a las autoridades. La pesadilla del Covid 19, que ya ha matado a más de 5 millones de personas en todo el mundo, está lejos de terminar. Y, como ha ocurrido durante toda la pandemia, lo que ocurre en Europa sirve como advertencia de lo que podría ocurrir en nuestra región.

Desde Roma, la periodista chilena Mariana Díaz nos cuenta hoy cómo se vive en Europa esta nueva ola de Covid 19.