Ad portas del 8M: Congreso aprueba y despacha Ley Integral contra la violencia hacia las mujeres

Este miércoles, en la antesala de una nueva conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó el proyecto de ley sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, también conocido como Ley integral contra la violencia hacia las mujeres.

La iniciativa, ingresada en 2017 por el gobierno de la expresidenta Michelle Bachelet, fue visada con 120 votos a favor, 13 en contra y 11 abstenciones. Con ello, y tras ser aprobada ayer martes también por el Senado, fue despachada para ser ley.

La normativa busca prevenir, sancionar y erradicar la violencia en contra de las mujeres con razón de género. Al mismo tiempo, aporta la definición de conceptos, como también principios y reglas de interpretación de la ley, permitiendo ampliar definiciones de posibles víctimas.

Por otro lado, habilita la creación de un sistema integrado de información sobre la violencia de género, con el objetivo de mejorar la respuesta del Estado y las políticas públicas. Además, permite modificar otras normas legales, generando cambios para enfrentar la violencia de género -a través, por ejemplo, de la intensificación de la vigilancia de las medidas cautelares- y establece la protección de los datos que permiten resguardar la confidencialidad de las víctimas, entre otras disposiciones.

Con este visto bueno por parte de los diputados, la iniciativa ya está lista para ser ley y queda a la espera de la firma del Presidente Gabriel Boric y su posterior publicación en el Diario Oficial.

El proyecto contó con el voto en contra de la bancada republicana (Cristián Araya, Chiara Barchiesi, Juan Irarrázaval, José Carlos Meza, Benjamín Moreno, Agustín Romero, Luis Sánchez, Cristóbal Urruticoechea, Mauricio Ojeda y Stephan Schubert), además de Catalina del Real (RN), Francesca Muñoz (Partido Social Cristiano) y Leonidas Romero (ind.-RN).

Durante su intervención antes de la votación en el hemiciclo, la ministra de la Mujer y de Equidad de Género, Antonia Orellana, respondió a las acusaciones de algunos legisladores de oposición respecto a que el gobierno tenía intenciones de atribuirse la aprobación del proyecto, de cara al 8 de marzo.

“No se trata de que esto fuera planificado para que estuviera el 8 de marzo, que más me habría gustado a mi tener esta ley antes, porque fue la primera urgencia que ingresamos como gobierno, pero recién el 29 de enero pasado logramos despacharla del Senado. Insisto, después de siete años de discusión, siete de ellas en el Senado, una larga discusión que algunas parlamentarias todavía recuerdan porque estaban en esa legislatura; nos parece que es hora”, aseguró.

La secretaria de Estado relevó que “acá hay una mejora concreta, recomendada por la Corte Suprema en su informe al Senado, respecto de la supervisión de las medidas cautelares, que es uno de los grandes reclamos que escuchamos transversalmente cuando un parlamentario o parlamentaria nos transmite su preocupación respecto a algún caso”.

Además, destacó que la iniciativa -que ahora será ley- “fortalece la posibilidad de representación jurídica del Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (SernamEG) en casos de femicidio frustrado (...), una medida que también es valorada positivamente no por mí -que entiendo que mi opinión pueda no ser de relevancia para ciertos sectores-, pero sí por la Corte Suprema, sí por las expertas que fueron durante la tramitación de la ley, sí por las abogadas que representan y litigan en casos de violencia”.

Luego, una vez concluida la sesión, la titular de la Mujer dio un punto de prensa y dijo que tanto desde la cartera como del Ejecutivo están “muy felices” con la aprobación del proyecto. “Su trámite lo llevaron ministras a quienes quiero reconocer: por supuesto, la primera ministra de la Mujer, hoy senadora, Claudia Pascual. También la ministra Isabel Plá, que lo sacó de la Cámara el 2019. La ministra Mónica Zalaquett, quien ingresó indicaciones el año 2021, cuyo sentido mantuvimos. Y quien les habla, que dimos la primera urgencia legislativa de este gobierno, que fue este proyecto de ley”, enumeró.

“Estamos muy contentas de que la votación haya sido transversal, tanto en la Cámara como en el Senado, porque eso nos muestra que la violencia contra las mujeres es una prioridad que debe ser de Estado y que no está circunscrita tan solo a un sector, sino que podemos enfrentarla a través de acuerdos amplios como los que significa este proyecto”, subrayó.