Boric abre controversia tras valorar rol de exjuez Garzón y llega a Bruselas para la Celac-UE
Desde la derecha calificaron como un "bochorno" que el Mandatario hiciera un homenaje al exmagistrado que dictó la detención de Augusto Pinochet en 1998. En medio de esa controversia, el Jefe de Estado llegó ayer a Bruselas para participar en la Cumbre Celac-UE. Para el gobierno, el Presidente se juega alzarse como un interlocutor relevante en América Latina, diferenciándose de otros líderes progresistas en temas como la defensa de la democracia y los derechos humanos.
Tres días estuvo en Madrid el Presidente Gabriel Boric. Su paso por la capital española estuvo marcado por los gestos que hizo a su par Pedro Sánchez -a solo días de los comicios en que el socialista buscará la reelección- y, asimismo, por sus reflexiones sobre la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado. Este sábado el Mandatario llamó a los partidos a acordar dos principios de cara al 11 de septiembre y, por otro lado, valoró “la esperanza” que -a su juicio- entregó a Chile el exjuez Baltasar Garzón tras ordenar la detención del general Augusto Pinochet en Londres.
“No hemos encontrado todavía toda la justicia, pero lo que hizo usted les dio una esperanza no solamente a los chilenos, sino a todo el mundo, y que fue que puede haber justicia y vale la pena siempre seguir luchando por ella. Así es que en agradecimiento del pueblo chileno a usted por la lucha eterna por la justicia, muchas gracias, Baltasar”, dijo el Jefe de Estado en un evento de conmemoración en Casa de América, ocasión en que, además, entregó una placa de regalo al exmagistrado.
Su homenaje a Garzón y también la posibilidad de generar un acuerdo transversal con todo el arco político no fueron bien recibidos por la oposición en Chile, desde donde lo acusaron de querer legitimar visiones sesgadas respecto del Golpe de Estado, sus causas y consecuencias. Asimismo, desde Chile Vamos cuestionaron que el Mandatario reconociera la figura de Garzón, quien fue inhabilitado por 11 años en su país para ejercer como juez y, además, apoyó la defensa de Bolivia por la demanda marítima con nuestro país.
Figuras de la UDI como el diputado Jorge Alessandri calificaron el hecho de que el Presidente haya entregado una placa en reconocimiento a Garzón a nombre de Chile como un verdadero “bochorno”.
“Primero, sabemos que Garzón ha estado en contra de Chile y en favor de Bolivia en los diferendos en los que hemos litigado. Segundo, el propio Alberto van Klaveren, hoy canciller de nuestro país y quien lideró la defensa de Chile, ha expresado muchas veces que la tesis de Garzón no se basaba en el Derecho Internacional. Tercero, Garzón fue sacado del Poder Judicial por actos de corrupción. Cuarto, una vez que llegas al Estado… no es un botín para tu partido político, económico, y tampoco es un botín ideológico. Cuando el Jefe de Estado entrega premios lo hace en nombre de todo Chile. Empecemos a manejar las relaciones internacionales con mayor responsabilidad”, afirmó el parlamentario.
El senador Iván Moreira (UDI), integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta, comentó que “cuando el Jefe de Estado tiene reuniones y homenajea a personas que representan visiones sesgadas, pone en duda el rol de su investidura”.
Lo mismo piensan en RN y calificaron el gesto a Garzón como “una provocación”. “El gobierno sigue en su agenda de dividir a los chilenos por motivo de los 50 años del pronunciamiento militar. El Presidente Boric se encuentra en una gira por Europa que claramente no tiene como finalidad atraer inversión (...) no está a la altura de lo que debería hacer un Jefe de Estado”, aseguró la diputada Marcia Raphael (RN).
Ante las críticas, ayer el canciller Van Klaveren explicó los dichos del Mandatario y descartó contradicciones entre la volaración de Garzón y la posición oficial del Estado chileno, el que defendió su soberanía jurisdiccional en el 98 para juzgar a Pinochet.
En conversación con Estado Nacional, el ministro de Relaciones Exteriores señaló que “el tema que estuvo en juego en esa época fue el tema de la jurisdicción y nosotros siempre reivindicamos la jurisdicción de Chile para juzgar los crímenes que se cometieron, ese es el argumento central. Pero el Estado chileno nunca defendió la impunidad del general Pinochet”.
El ministro recalcó que lejos de una inconsistencia, lo que hubo en las palabras del Presidente Boric fue un reconocimiento al efecto que tuvo esa orden de detención para la justicia en Chile. “Lo que veo es un cambio que se observó en el Poder Judicial chileno (...) en el sentido de justamente empezar a juzgar los crímenes que se habían cometido en nuestro territorio”, dijo Van Klaveren.
Lo que se juega Boric en la Celac-UE
En medio de esa controversia fue que el Presidente llegó ayer a Bélgica. Pasadas las 12.34 de España, el Mandatario despegó de la base militar Torrejón de Ardoz desde Madrid para arribar a las 14.36 a Bruselas, ciudad que este lunes y martes alojará una nueva versión del la Cumbre Celac-UE. La instancia, que reúne a países de América Latina y la Unión Europea, no se reunía desde 2015.
El espacio intercontinental será el debut del Jefe de Estado en ese foro. En la comitiva chilena señalan que si Boric aprovecha bien la oportunidad podría alzarse como un interlocutor relevante de la región, diferenciándose de otros líderes progresistas, destacando sus valores compartidos con los países de la UE en temas como el respeto a la democracia y la defensa de los derechos humanos.
Lo anterior, sobre todo, porque la cumbre también contará con la presencia de figuras como Inácio Lula da Silva (Brasil) y Gustavo Petro (Colombia), con quienes Boric ha disentido, por ejemplo, respecto de regímenes como Venezuela.
Según las mismas fuentes diplomáticas, será clave para el Jefe de Estado destacar su condena permanente a la invasión de Rusia a Ucrania, como ya lo hizo en su paso por España y su intervención ante el pleno que está programada para el martes.
Otro elemento significativo que se juega el Presidente y su comitiva en la cumbre es -como lo han reiterado desde la delegación- atraer inversión europea a Chile y sostener conversaciones ad portas del cierre del acuerdo marco entre nuestro país y la Unión Europea que debería ratificarse a fines de este año.
En ese contexto, los temas que marcarán la cumbre -como el cambio climático y la ciencia- serán una buena oportunidad para que Chile muestre sus potencialidades en materias como litio e hidrógeno verde.
“Tengo la convicción de que va a ser un espacio para reforzar nuestro compromiso con el diálogo birregional, con el multilateralismo, en momentos en que este se encuentra amenazado a nivel mundial”, dijo el sábado el Presidente Boric sobre la Celac-UE.
Para este lunes y martes, además de las actividades propias de la cumbre, el Jefe de Estado tiene en agenda una serie de bilaterales en el Hotel Warwick. Entre ellas, con la Región Valona de Bélgica y países como Haití, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Alemania, Países Bajos, Austria, Lituania, Grecia, entre otros. Asimismo, tendrá audiencia con el Rey Felipe de Bélgica, con el alto comisionado para los DD.HH. de Naciones Unidas, Volker Turk, y con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Ilan Goldfajn.
En la noche del lunes, además, participará en una cena ofrecida por los organizadores de la Celac-UE, la que tendrá lugar en el edificio Justus Lipsius, el que solía ser la sede del Consejo de la Unión Europea. En su primer día en Bélgica el Mandatario no tuvo actividades oficiales. Según explicaron desde la comitiva, el Presidente aprovechó su tarde para descansar y recorrer la capital belga.
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