A las 14.45 de este domingo aterrizó en el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini -conocido como Ezeiza- el avión de la Fuerza Aérea de Chile (Fach) que trasladó al Presidente Gabriel Boric y su comitiva a la ciudad de Buenos Aires.

Recibido con honores militares por el canciller argentino Antonio Cafiero y su próxima embajadora en esa nación, Bárbara Figueroa, el Mandatario dio así inicio a su primera visita de Estado en Argentina, país en el que este lunes y martes sostendrá una serie de actividades con su par Alberto Fernández y otras autoridades trasandinas.

Horas antes el Jefe de Estado había llegado hasta el Grupo 10 de la Fach en Santiago, desde donde despegó junto a una amplia comitiva que lo acompañará durante la gira: el embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa; el presidente de la Corte Suprema, Juan Eduardo Fuentes; el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, y los ministros Antonia Urrejola (Canciller), Claudio Huepe (Energía), Maya Fernández (Defensa), Antonia Orellana (Mujer y Equidad de Género), Julieta Brodsky (Cultura), además del subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, José Miguel Ahumada, y sus asesores del Segundo Piso Lucía Dammert y Carlos Figueroa.

“La historia nos hermana indiscutiblemente con el pueblo argentino. Enfrentaremos juntos los desafíos del futuro, poniendo por delante los intereses comunes de nuestras naciones”, escribió Boric en Twitter antes de viajar.

En la antesala de su viaje, en el que se le vio distendido e incluso se dio tiempo para conversar con la prensa acreditada, el Presidente Boric concedió entrevistas a medios trasandinos como El Clarín y Página 12, donde abordó varios temas que marcarán su agenda en el país vecino.

El Mandatario, por ejemplo, se hizo cargo de las excusas que previamente dio la ministra del Interior, Izkia Siches -quien quedó como vicepresidenta y hoy dirigirá el comité político en La Moneda- por la utilización del concepto “wallmapu”, lo que había generado molestia de autoridades trasandinas por ser un territorio que también comprende a provincias de Argentina.

“Sobre la polémica, mi actitud y mi invitación es que en América Latina tenemos que repensar la relación que hay entre los Estados Nacionales con los pueblos originarios, con los indígenas. Y eso es lo que nosotros estamos trabajando en Chile. No soy quién para decir a ningún presidente cómo tiene que hacer las cosas en su territorio. Es lo que nosotros vamos a seguir en Chile y si le podemos colaborar y también aprender de otras experiencias bienvenido sea. (...) Coordinación para buscar soluciones y para enfrentar esto de manera pacífica… Pero no quiero dejar ningún espacio de duda, nosotros respetamos íntegramente la soberanía territorial argentina. Eso no es un asunto que esté en discusión de parte nuestra”, sostuvo Boric en El Clarín, a la vez que reiteró su respaldo a la demanda por la reivindicación de las Islas Malvinas.

Quienes han conversado el asunto con el Mandatario aseguran que considera que el tema está más que aclarado y que la discusión de fondo no tiene que ver con una polémica “semántica”, sino que en cómo se enfrenta el conflicto que existe entre el Estado de Chile y el pueblo nación mapuche.

En la misma línea se manifestaron ayer los presidentes de ambas cámaras del Congreso, quienes calificaron la polémica de “artificial”.

Asimismo, el Mandatario dio señales sobre lo que será la agenda económica -uno de los ejes fundamentales de su visita- que abordará con su par trasandino. “Decidí viajar a la Argentina con una delegación que incluye a ministros, autoridades de Estado, del Poder Judicial, del Parlamento, el presidente de la Corte Suprema. Una delegación de artistas, porque queremos incentivar el desarrollo y el vínculo cultural entre nuestros dos países, y una delegación de empresarios que es diversa, hasta empresarios de cooperativas o empresas de emprendimientos de startups, entre otros”, afirmó.

Y agregó: “Nos interesa promover una mayor inversión y una mayor colaboración desde la perspectiva privada también (...). Tenemos que recuperar una relación que quedó golpeada en su momento, producto de las diferencias que tuvimos respecto al gas en los inicios de los 2000 (en realidad fueron bajo la administración de Ricardo Lagos y Néstor Kirchner) y creo que hoy día tenemos grandes posibilidades de realizar intercambios en materia energética que nos permitan avanzar hacia la descarbonización que es parte importante de nuestro programa. Pero en eso vamos a entrar después, me interesa mucho conversar de cómo recuperamos el liderazgo de América Latina en los foros internacionales”.

En ese marco, el Mandatario encabezará el martes un desayuno junto al Comité de Comercio Argentina-Chile, el que contará con la presencia de cerca de 50 empresarios de ambos países.

Para este lunes, además, el Presidente Boric tiene contemplado reunirse con las autoridades del poder judicial y legislativo argentinos. Sin embargo, no está previsto que se reúna con la vicepresidenta, Cristina Fernández -cuyo “divorcio” político de Fernández ha marcado la contingencia argentina en los últimos meses-, dado que -dicen en el gobierno- se encontraría fuera de la capital por la conmemoración de los 40 años de la guerra por las Malvinas. Así, tendrá que ser recibido por la vicepresidenta de la Cámara Alta, Claudia Ledezma.

Al final de la jornada, en tanto, el Mandatario participará de una cena de Estado ofrecida en su honor.

La noche de este domingo el Presidente Boric no tenía contempladas actividades públicas. Poco después de llegar al Tower Hotel, donde alojará con su comitiva, el Mandatario salió a comprar algunos libros.

En medio del arribo del Presidente a Argentina, desde el gobierno informaron que Chile decidió suspender su participación en el foro Prosur, impulsado por el expresidente Sebastián Piñera y otros gobernantes de centroderecha de la región en 2018 (ver nota en página 6).

La determinación fue comunicada por la Cancillería la semana pasada a la Secretaría Ejecutiva del organismo y responde a una de las prioridades de la política exterior de la nueva administración. “No podemos seguir teniendo grupos solamente en función de la afinidad ideológica temporal de los gobernantes de turno. Y a mí lo que me interesa es fortalecer, institucionalmente, la voz de América Latina en los foros internacionales”, dijo Boric a la prensa trasandina, apelando a fortalecer espacios como la Celac, Alianza del Pacífico y el Mercosur.

Un tema que marcará la visita de Boric a Argentina es al petición de la UDI y RN para que aborde con su par argentino la situación de Galvarino Apablaza, exlíder del FPMR acusado de ser uno de los autores intelectuales del asesinato de Jaime Guzmán, quien se encuentra en ese país desde hace más de veinte años.

“Vamos a aprovechar esta tarde para plantearle a la canciller, también al Presidente, que así como lo hizo la Presidenta Bachelet y también lo hizo el Presidente Piñera, en las reuniones bilaterales que tengan con el Presidente Fernández, planteen el tema de Galvarino Apablaza (...). La Corte Suprema chilena por unanimidad, dio la extradición de Galvarino Apablaza, la Corte Suprema argentina por unanimidad la otorgó y fue el gobierno argentino, el que a través de un decreto, dio una especie de refugio político que ha impedido que Galvarino Apablaza venga a cumplir condena por el crimen de Jaime Guzmán”, aseguró el diputado Guillermo Ramírez (UDI), quien viajó junto al Presidente frenteamplista.

En el gobierno, sin embargo, si bien aseguran que Boric está dispuesto a escuchar la petición de la centroderecha -a la que también se suma la senadora Paulina Núñez, quien también es parte de la delegación-, considera que si el tema está radicado en la justicia argentina no hay mucho que su administración pueda hacer para intervenir.