“Muchas gracias estimados colegas, ha sido un honor”. Entre aplausos, el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, Raúl Soto (PPD) agradeció a la Sala la aceptación de la renuncia de la mesa directiva.

La dimisión de la testera de la corporación, compuesta también por los vicepresidentes Alexis Sepúlveda (PR) y Claudia Mix (Comunes), fue aprobada por 131 votos a favor, 6 en contra y una abstención, en medio de las dudas sobre el cumplimiento del pacto administrativo suscrito en marzo.

Al inicio de la sesión, de hecho, se había solicitado la unanimidad para aceptar la renuncia, pero esta no fue respaldada, por lo que debió procederse a la votación individual.

Los diputados Carlos Bianchi (independiente-PPD), Felipe Camaño (independiente-DC), Sara Concha (RN), Jorge Durán (RN), Marta González (independiente-PPD) y Francesca Muñoz (RN) rechazaron la solicitud, mientras que la abstención provino de Marlene Pérez (independiente-UDI).

“Solo agradecerles por estos ocho meses que nos han permitido junto a Claudia y Alexis dirigir esta corporación. Y confiar en ustedes el futuro de la Cámara de Diputadas y Diputados, para mantener una conducción seria, responsable y ecuánime”, continuó diciendo Soto, quien presentó su renuncia individual el 21 de octubre.

El proceso de renovación de gobernabilidad que fue acordado en marzo por las bancadas oficialistas, la Democracia Cristiana (DC), el Partido Ecologista (PEV), el Partido de la Gente (PDG) e independientes, estableció fraccionar en seis períodos de siete y ocho meses los cuatro años de la presidencia de la Cámara, junto con una rotación de autoridades en la testera de la corporación y la distribución de cupos y presidencias en comisiones legislativas.

El pacto, no obstante, ha estado en la cuerda floja. Según el acuerdo, la diputada Karol Cariola (PC) debería ser la sucesora directa de Soto y ser elegida el lunes 7 de noviembre, en las elecciones para votar a la nueva directiva.

Sin embargo, algunos parlamentarios como Pamela Jiles, Andrés Jouannet y Bianchi, y los comités del PDG y la DC -que fueron incluidos en el pacto de marzo- se han descolgado de dicha definición.

La principal razón que esbozan es que el triunfo del Rechazo, en el plebiscito del 4 de septiembre, provocó un nuevo escenario político, tal como se preveía hace meses, lo que se cruza con el rol que asumió Cariola como coordinadora de la derrotada campaña del Apruebo.

Desde la DC, en tanto, condicionaron su apoyo a Cariola a la espera de que el PC tome distancia de las querellas presentadas en contra el exdirector del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Sergio Micco (exmilitante DC).

El martes, en esa línea, el diputado falangista, Eric Aedo afirmó que desde su sector no están los apoyos para que un militante del PC dirija la testera de la corporación.

Ese mismo día, el PDG, el diputado René Alinco (independiente-PPD) y la derecha dieron el primer golpe al oficialismo, en lo que podría ser el primer apronte de un golpe blanco que ha estado planificando la oposición para bloquear la elección de Cariola.

La comisión de Agricultura de la Cámara aprobó la moción de censura para destituir a la presidenta de la instancia, Consuelo Veloso (RD), presentada por el diputado Juan Antonio Coloma (UDI).