Carlos Maldonado tras elecciones en el Partido Radical: "No hay ninguna situación que amerite poner en duda el resultado"
El ex ministro, quien superó en el recuento de votos al actual presidente de la colectividad, Ernesto Velasco, dijo que más allá de potenciales reclamaciones de la lista opositora, para él está claro su triunfo.
Los resultados entregados esta tarde dejaron a Carlos Maldonado ad portas de ser el nuevo presidente del Partido Radical. En las elecciones internas celebradas el domingo, el ex ministro, de acuerdo al recuento oficial, superó por cerca de 500 votos a su rival y actual timonel del partido, Ernesto Velasco. Y aunque éste ya anunció que presentará una reclamación por el resultado, Maldonado está convencido de su triunfo. Así, en esta entrevista con La Tercera llama a Velasco a reconocer la derrota y fija sus primeras líneas de lo que sería su gestión al frente de los radicales.
La Junta Electoral Nacional (JEN) del Partido Radical dio a conocer resultados que muestran una tendencia, dándolo a usted ganador por sobre Ernesto Velasco.
La verdad es que más que tendencia diría yo, son bastante definitorios. Obviamente lo que corresponde es que esperemos la proclamación oficial que tiene que hacer el Tribunal Supremo. Pero sí, objetivamente, de acuerdo a los datos tanto que dio a conocer la Junta Electoral Nacional como a los datos del resto de las comunas que no estaban incluidas ahí pero que todos conocemos, porque sabemos cuál fue la votación, es claro que el resultado es irreversible y que tuvimos un triunfo que nos enorgullece mucho y nos compromete a trabajar en los compromisos que hicimos con la militancia a lo largo del país.
Un triunfo que al parecer va a demorar un tiempo, porque la candidatura de Velasco anunció que pedirán revisiones, y hablan de irregularidades en el proceso. ¿Cómo responde usted a eso, considerando que el actual presidente no se ha reconocido la derrota?
Lo lamento, la verdad, yo creo que la tendencia es muy clara, todo el partido lo ha reconocido, incluso exintegrantes de la misma mesa de él ya me han hablado para reconocer el triunfo. Entonces espero que pronto él reconozca que este es un resultado claro, no hay ninguna situación que amerite poner en duda el resultado, esa es mi visión. Sin perjuicio de ello, cada quien que tenga alguna reclamación que hacer tendrá derecho y las instancias correspondientes lo analizarán. Pero no vemos ningún motivo para que realmente el resultado pueda ser cuestionado.
Con los resultados hasta ahora, los candidatos de su lista van a la cabeza en todos los cargos. ¿Cómo lee eso? ¿En qué fracasó el proyecto de Velasco considerando esa derrota?
Efectivamente la lista que yo encabecé, que se llama Cambio Radical, estaría obteniendo los siete cargos de la mesa ejecutiva en un hecho inédito desde que se elige cargo a cargo. Y yo creo que tiene que ver con que interpretamos bien el momento del partido. Yo creo que la militancia tenía ansias de cambio, de que hubiera descentralización del poder, de los recursos y también volver a soñar en un partido más grande, más conectado con la ciudadanía. Creo que interpretamos bien quizás una sensación desde hace más tiempo, no solo de la directiva que está terminando su mandato. En los radicales anida el deseo de volver a ser grandes.
¿Cuánto puede haber pesado la fallida candidatura presidencial de Alejandro Guillier, considerando la desafección que se generó luego con los radicales?
Leí en alguna parte esa interpretación, la verdad es que yo no la comparto. Creo que el tema de Guillier no fue factor en esta elección interna. Él mismo declaró que no iba a jugar ningún rol, porque no es militante del partido, y la verdad es que no me parece, recorriendo Chile, que ese fuera un factor que fuera parte de la decisión que tomó la militancia.
Los lunes se reúnen acá en la sede del PR los presidentes de la exNueva Mayoría, a excepción de la DC. ¿Busca mantener esas reuniones?
Bueno, cuando asuma digamos, porque en este momento es claro que hemos tenido el respaldo de la militancia pero todavía no soy presidente del partido, el presidente del partido sigue siendo el actual y, por lo tanto, cuando asuma obviamente corresponderá en algunas cosas asumir el relevo y en algunas cosas hacer cosas distintas. Habrá que ver en cada tema.
Antes de la elección usted señaló, respecto a la centroizquierda, que primero hay que hablar de contenidos y luego de alianzas. En esa línea, ¿cómo se van a plantear frente a la DC, considerando que el PR viene desarrollando una suerte de alianza con ellos?
Es que a mí me parece clave que volvamos a tener como centroizquierda, porque creo que sí lo tuvimos, en los tiempos iniciales especialmente de la Concertación, un diagnóstico claro del país, que entendamos bien al Chile actual y, segundo, que levantemos propuestas concretas para este Chile, que tiene problemas en materias importantes como en distribución del ingreso, salud, pensiones, seguridad pública, y otros muchos temas. Y eso es lo que creo tenemos que construir nuevamente, un proyecto de país y un relato que comunicarle a la ciudadanía de manera convincente y clara de aquí al 2021. Tenemos que construir primero ese proyecto y luego además comunicarlo. Ya en las municipales sería un muy buen momento para que mostremos que estamos con la capacidad de volver a interpretar a Chile mayoritariamente, después de lo que nos pasó el 2017.
¿Cómo ve usted la política de alianzas y cómo debe pararse la ex Nueva Mayoría de cara a los comicios que vienen?
No puedo darles recetas a los demás partidos. Lo que yo puedo decir es que desde el punto del Partido Radical nuestra prioridad va a ser trabajar los contenidos. Obviamente vamos a tener las mejores relaciones con los partidos con los que hemos hecho un largo camino juntos, desde la lucha por la recuperación de la democracia hasta después en democracia. Claramente ese es nuestro marco natural de referencia, pero insisto, en este momento en Chile la clave son los contenidos, las alianzas, las candidaturas, los pactos, yo creo que son cosas que hay que verlas después. Primero veamos si tenemos la misma visión del país en que estamos viviendo hoy, si tenemos el mismo diagnóstico, y después ponernos de acuerdo en cuáles son las propuestas que podemos hacer y ahí ya naturalmente se hablará de alianzas y coaliciones.
¿Es su interés reunirse más adelante con cada directiva de la ex Nueva Mayoría e ir conociendo esos intereses?
Sin duda. Cuando corresponda, en su minuto, vamos a reunirnos con todos ellos, también escucharlos, cómo ven ellos a Chile, los desafíos políticos en el corto y mediano plazo y también me interesa mucho privilegiar, abrir una nueva dimensión de la labor política, que es abrirnos mucho al mundo independiente. Creo que en Chile hay un gran segmento de un mundo independiente que se define a sí mismo como gente de centroizquierda pero que no milita en ningún partido y que yo creo que puede ser un aporte muy relevante a este desafío de diagnosticar bien el país y de construir propuestas para el Chile de hoy. Queremos abrirnos mucho al mundo independiente, creemos que ahí podemos marcar una diferencia importante, ofrecer un espacio de participación y colaboración a gente muy preparada que tiene ideas y de pronto no encuentra un cauce para hacer su aporte. Como partido queremos abrirnos mucho al mundo independiente.
¿Cómo va a ser el diálogo con el Frente Amplio?
Es que el Frente Amplio es un conjunto de distintos partidos y movimientos, obviamente estamos dispuestos a dialogar con todas las fuerzas políticas pero creo que esa es una tercera etapa. Primero hablemos de contenidos, después hablaremos con nuestros aliados naturales y después veremos qué coincidencias puede haber con el Frente Amplio, que obviamente tiene una mirada progresista, que tiene algunas propuestas innovadoras, que logró captar un porcentaje importante de adhesión y de interés especialmente a nivel juvenil, pero insisto, vamos por parte.
Con estos resultados, usted se trasformaría en el tercer presidente de la ex Nueva Mayoría que fue ministro de Michelle Bachelet. ¿Cómo lo lee eso?
Van a hablar del semillero de Bachelet (se ríe).
¿Buen ojo habrá tenido la expresidenta?
Sí, creo que aparentemente tuvo buen ojo. Creo que somos personas que hemos estado dedicadas a la política pero también a las políticas públicas. Eso creo que es una ventaja en los desafíos que vienen porque Chile hoy en día necesita que le hablemos de propuestas concretas y de pronto la experiencia gubernamental te da esa visión, más de aterrizar los ideales y visiones país en propuestas más concretas de políticas públicas y eso es importante que lo hagamos.
Velasco dijo en su minuto que no era el rol de los partidos defender el legado de Bachelet. ¿Cuál es su postura frente al legado?
Siento que la figura de la Presidenta Bachelet es muy querida por los chilenos y además una Presidenta que de verdad se comprometió muy fuertemente con avances sociales, con hacer de Chile una sociedad más justa. Creo que en ese sentido su legado es muy grande. En el sentido político, creo que su segundo gobierno tuvo problemas, algunas falencias que también influyeron en el resultado electoral, tanto presidencial como parlamentario del 2017. Me quedo con la parte buena, con el legado de vocación social.
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