Fue este martes cuando en la sede de la UDI se volvieron a encontrar los secretarios generales de Chile Vamos para retomar la negociación para las elecciones municipales y de gobernadores de octubre de este año. Hasta Suecia 286 llegaron Andrea Balladares (RN) y Juan Carlos González (Evópoli) para reunirse con María José Hoffmann (UDI), luego de que todos los partidos estuvieran, hasta pasadas la medianoche, el 10 de abril, para inscribir las primarias en las que competirán como pacto.

Pero ahora el desafío es otro, pues las tiendas tienen hasta julio para anotar a los candidatos que finalmente estarán en la papeleta de octubre. En esa línea, hay nudos que asoman como complejos especialmente porque todavía no se han encontrado candidatos o porque hay más de un postulante interesado y se deberá zanjar o a través de encuestas, o por medio de negociaciones entre los partidos.

Si bien se ha hablado de que hay nudos como Providencia, Maipú, Puente Alto, Ñuñoa, Valparaíso, Viña del Mar, Recoleta y Peñalolén, lo cierto es que al retomar las conversaciones en las colectividades se llegó al consenso de que el principal problema radica en Santiago, donde la derecha busca quitarle el sillón municipal a la comunista Irací Hassler.

Hasta el momento es complicado para Chile Vamos debido a que el candidato que más les interesaba -el exministro Sebastián Sichel- ha transmitido que solo está disponible si es el candidato de unidad, pero la irrupción del abogado Aldo Duque -quien es apoyado por el Partido Social Cristiano- complica el panorama.

Esto último, debido a que el jurista está dispuesto a correr por fuera en calidad de independiente, lo que provocaría dispersión de votos en la comuna. Por lo mismo, en el sector quieren buscar la fórmula para destrabar la negociación y se evalúan opciones, como conversar con el propio Duque.

En el encuentro del martes se transmitió que Santiago es uno de los nudos complicados que se deben trabajar. En esa línea es que durante los últimos días también han generado preocupación en el sector los resultados de la encuesta Panel Ciudadano de la UDD, que arrojaron que Sichel quedaría muy cerca de Hassler en un empate técnico en caso de que Duque vaya a la papeleta. Así, por ejemplo, el exministro sacaría un 32%, la alcaldesa un 30% y Duque un 12%, lo que implicaría que la dispersión de votos complicaría al sector.

Adicionalmente, en la derecha algunos reconocen que ante la negativa de Duque a bajarse, se hace difícil cumplir con las condiciones que el propio Sichel ha puesto sobre la mesa para competir. A lo que se suma además una latente tensión que hay en el Partido Republicano para apoyar al exministro, pues este tuvo resistencia a apoyar a José Antonio Kast tras perder en la primera vuelta presidencial, a lo que además se sumó que la campaña estuvo marcada por críticas de Sichel hacia Kast.

De todas formas, Kast, en entrevista con La Tercera, indicó -ante la consulta de si los republicanos apoyarán al exministro en caso de que sea la carta por Santiago- que “nosotros trabajamos mirando el bien del país. No nos perdemos ni un segundo en combatir las malas ideas de la izquierda”.

En este escenario, durante los últimos días ha reflotado la opción del exministro Mario Desbordes (RN), quien siempre ha manifestado su interés en competir. Tras la irrupción de Sichel, Desbordes había considerado la opción de disputar como gobernador en la Región Metropolitana, pero tras el alejamiento de Sichel, en su partido le pidieron nuevamente evaluar la posibilidad de ir por Santiago.

En RN comentan que él tiene la ventaja de que al haber sido carabinero puede impulsar el tema de la seguridad, en una comuna donde es uno de los principales problemas. Incluso, quienes conocen la encuesta que RN encargó hace dos semanas por la comuna, comentan que en un escenario de Desbordes contra Hassler la alcaldesa logra menor adhesión que la que saca contra Sichel.

Lo cierto es que en esa comuna el partido aún debe resolver qué hará con otro interesado, el actual concejal Juan Mena, para lo cual RN ya encargó un sondeo que lo mide con Sichel y definir quién finalmente será la opción que apoyarán.

Santiago es una comuna clave para la derecha, pues será el símbolo de las municipales y una imagen fuerte que marcará la carrera a La Moneda en 2025.

Fuentes de la UDI señalan que en la reunión del martes también se vio la zona norte del país. En ese sentido, agregan las mismas fuentes, se definió que en las comunas de Arica y La Serena el candidato será zanjado a través de encuestas.

Por otro lado, en Antofagasta quedó definido que Sascha Razmilic (Evópoli) será el candidato de Chile Vamos; en Iquique la carta será la concejala Ximena Naranjo (UDI); y en Copiapó se definió al excore de Atacama Maximiliano Barrionuevo (RN). Todas las cartas zanjadas, aseguran quienes conocieron de los diálogos, fueron medidos en la etapa de negociación.

Además de los candidatos a las alcaldías, en la reunión se fijó al postulante de la coalición a la gobernación regional de Atacama. Se trata del exdiputado por la zona Nicolás Noman (UDI).

Se espera que los diálogos continúen y que eso se extienda a otros partidos como Amarillos, Demócratas y el Partido Republicano. De hecho, el presidente de RN, el senador Rodrigo Galilea, dijo este martes que “este va a ser un trabajo intenso, tenemos que ponernos de acuerdo dentro de Chile Vamos y después buscar coordinaciones con Amarillos y Demócratas, como asimismo con los socialcristianos y republicanos”.

La postulante independiente por Las Condes, Marcela Cubillos, en tanto, siguió sumando apoyos de los partidos para su postulación. Si primero se reunió con la UDI tras su regreso de España -luego de que el partido anunciara que la alcaldesa Daniela Peñaloza no irá a la reelección-, hizo lo propio este miércoles con el Partido Republicano y el jueves con RN.

Con republicanos se juntó con su directiva y el excandidato presidencial José Antonio Kast, mientras que llegó hasta la sede de RN este jueves para reunirse con la mesa. La idea de Cubillos, en todo caso, sigue sido juntar firmas para competir como independiente y no al alero de las colectividades.