Christian Larraín: “Estamos en presencia de una cultura de la cancelación sin ninguna investigación previa de lo que se te acusa”
El exsubsecretario de Previsión Social reclama que lo destituyeron por una acusación de acoso sexual de la que no tiene información porque hasta hoy no le han explicado con quién o cuándo se habría producido la situación. Además, reconoce que había diferencias con la ministra del Trabajo por la reforma previsional. "Dejó de hablarme cuando señalé que las cuentas nocionales no tenían mayoría parlamentaria", dice.
Christian Larraín, exsubsecretario de Previsión Social, quiere dar su versión. El viernes pasado la ministra del Trabajo, Jeannette Jara (PC), le pidió la renuncia por tener una denuncia formal por acoso sexual de la que él no tenía antecedentes y que fue publicada por La Tercera PM este lunes.
El ingeniero comercial acusa que el gobierno no lo dejó defenderse.
¿Cómo se dio su renuncia?
Mire, yo voy a tratar de ser lo más apegado a los hechos y que la gente saque sus propias conclusiones, porque para mí es difícil saber por qué salí. No tengo cómo saberlo. Yo solo voy a atenerme a los hechos. El día viernes, o sea, viernes de la semana pasada, tenemos una reunión de trabajo donde participa la ministra y los equipos técnicos. Enfatizo el día viernes porque lo que leí en el diario, es que esto ya lo sabían en La Moneda el jueves. El viernes participó la ministra, yo presento, junto con los equipos, las alternativas que hemos trabajado para la reforma. Y fue una muy buena reunión. Y termina y después a los... No sé, a la media hora me llama la ministra y me dice ‘señor subsecretario, le tengo que pedir la renuncia porque tengo una denuncia de acoso sexual contra usted’. Entonces, mi reacción obvia es, bueno ministra, usted me podría decir antecedentes, estaba con su jefe de gabinete.
¿Esto fue presencial?
Fue presencial, en la oficina de la ministra. Entonces le digo: ministra usted me puede decir los antecedentes. Me dice que no se puede porque es secreto. ¿Quién está haciendo la denuncia? Pregunto yo. ¿Y cuál es el alcance? ¿Qué hice? Hay una foto en contra mía, hay, no sé, algo. Y me dicen, no, que no se puede saber porque es secreto. Entonces yo insisto, pero cómo... yo no tengo ningún problema, siempre he estado a disposición, entiendo que estos cargos están a disposición del Presidente y uno se va cuando se lo piden, no tengo cómo saber, pero por lo menos de qué se trata. Porque me pidieron la renuncia, no hay alternativa.
O sea lo despidieron.
Sí, claro.
¿Y el Presidente no lo llama?
No tuve ninguna comunicación con él. Yo me enteré por su nota que llevaron esto al comité político el jueves, ni tampoco nadie me preguntó antes qué pasaba. O sea, nada. Entonces vuelvo a insistir y ya a la tercera insistencia me da la siguiente explicación. ‘Mira te vamos a decir en términos generales, no te vamos a decir quién es, pero es por uso de lenguaje de connotación sexual, o algo así, inadecuado en público’. Subrayo en público. Eso fue lo que me dijeron. O sea, no fue uso de lenguaje sexual inadecuado dirigido a una persona.
¿Usted se imagina por qué puede haber sido?
Espérese, estoy contando los hechos. En público, eso fue. Yo no tengo ningún otro antecedente, yo leí lo que publicaron en el diario y son del mismo nivel de generalidad. No tengo idea de qué se trata, lo primero. Segundo, a mí me extraña de sobremanera por varias razones, me cuesta mucho entender esto. Te voy a decir por qué. Porque primero, la relación que yo tengo con el equipo directivo de la subsecretaría, conformado en su mayor parte por mujeres, es óptimo. Todo el equipo directivo, tengo los WhatsApp acá, cuando me voy me agradecieron por haber podido trabajar conmigo. El ambiente de trabajo en la Subsecretaría es un ambiente distendido, es un ambiente donde a las personas se les permite aportar, donde a las personas se les dan espacio. Es un ambiente muy horizontal. Todo esto lo puede validar, ¿ah? Yo trabajo con la puerta abierta. Segundo, el día jueves anterior al despido, yo por política, me reunía con la Asociación de Funcionarios. La recibí en pleno. Esto es bien importante que lo digas, porque aquí le han atribuido a la Asociación de Funcionarios cosas que no son verdad. Es bien impresionante. Me junto con la Asociación y lo único que resultó, junto con altas autoridades de la subsecretaría, que en este momento no era de interés nacional, pero para decirte que no estaba yo, y fueron puros elogios tanto a las autoridades de personal, a los encargados y a mi persona. Dijeron, nosotros la relación que tenemos con la autoridad de esta Subsecretaría es óptima.
Tercero, las encuestas del clima laboral que se hicieron meses atrás estaban en un ambiente muy bueno. Lo único que echaban de menos era que yo en ese minuto no me paseara más por todos los pisos, porque yo estaba haciendo la reforma. Entonces, yo no tengo elementos, tú comprenderás lo complejo que es para mí rebatir estas acusaciones sin ningún antecedente.
¿Pero usted niega, por ejemplo, uso de chistes incorrectos, comentarios de carácter machista o ese tipo de comentarios que puedan haber llevado a una situación así? ¿No suele hacer ese tipo de comentarios, por ejemplo?
Mira, yo te puedo garantizar: yo no tengo conocimiento de haber hecho eso. Y lo que te puedo garantizar es que jamás hice un comentario inapropiado, de ninguna naturaleza, dirigido ni a un hombre, ni a una mujer de la Subsecretaría.
¿Pero podría haberlo hecho a modo general? ¿No dirigido hacia alguien?
Pues podría haber dicho un chiste, podría haber dicho alguna cosa, no lo sé, no me acuerdo en ese minuto. Pero jamás una cosa que pueda ser interpretada como una situación dirigida a un hombre o a una mujer en particular que pudiera interpretarse ni remotamente como acoso.
¿Y usted ni siquiera sabe quién lo denunció, entonces?
¡No tengo idea!
¿Habría esperado que el Presidente le hubiese dado alguna versión o tener algún tipo de intercambio con el Presidente?
Es que mira, no sé si con el Presidente, pero si el Comité Político se entera de esto el día jueves, al menos yo hubiera esperado que me hubieran dicho qué es lo que pasa. Es lo mínimo. De lo contrario, estamos en presencia de una cultura de la cancelación sin ninguna investigación previa de lo que se te acusa. ¿Tú crees que alguien a mí me preguntó cuál era mi versión, qué ocurría?
La Tercera, antes de publicar, si le escribió para saber su versión.
Sí, me refiero en el gobierno. Entonces, yo me imagino que si alguien tuviera una foto mía, no sé, una grabación, algo, cualquier cosa... Pero lo único que me dijeron es lo que te dije: comentarios de carácter sexual inapropiados emitidos en público. O sea, en público, ni siquiera dirigidos a una persona.
¿Y qué es lo que ve acá? ¿Por qué cree que el gobierno decide su salida de forma tan acelerada y sin pedirle una versión -como usted dice-? ¿Qué hay detrás?
Yo no soy adivino, y las verdaderas razones yo no las conozco. Yo te puedo dar los hechos y cada uno sacará sus conclusiones. El 3 de mayo yo participo en un seminario en Price Waterhouse, donde planteo algunos planteamientos políticos relacionados con las cuentas nocionales. Digo que las cuentas nocionales no tienen ninguna mayoría parlamentaria, y digo que como gobierno, si queremos aprobar la reforma, estamos obligados a buscar alternativas que no renuncien a la esencia de la reforma, y que incluso había un estudio que había hecho el Centro de Estudios Públicos. De ahí la ministra deja de hablarme.
¿Pero como una ley del hielo?
Deja de hablarme.
¿Y por interno? ¿Cortaron toda comunicación?
Muy poca, mínima, ninguna reunión de trabajo, nada. Y después, el día 9 de mayo nos encontramos con la ministra en el Congreso, donde nos sentamos en la cafetería. Delante, no sé, de 30 personas. Y la ministra me empieza a llamar la atención, porque yo había hecho esas declaraciones. Ahora, déjame hacer contexto. Yo desde febrero tenía claro que como estaba la reforma no tenía ninguna posibilidad de avanzar. Modelé una nueva alternativa de reforma que subiera las pensiones, pero que se hiciera a cargo del cambio cultural que hay en Chile, que es que la gente pueda mantener la propiedad de los fondos, la heredabilidad, la libertad de elección. Me dediqué a trabajar en eso, y no solo eso, sino que me dediqué a conversarlo con parlamentarios de todo el espectro político.
¿Usted cree que hay una operación política en su contra?
Pero espéreme. Le voy a dar los hechos, usted saca sus conclusiones. ¿Ya? Entonces, lo hice nomás. Entonces el 9 la ministra me dice, “¿por qué hiciste estas declaraciones? No corresponde que las haga un subsecretario, y te tienes que quedar callado”. A lo cual mi respuesta fue: “Ministra, yo entiendo mi rol, como no solo de un técnico especialista en pensiones, sino que también político”. Porque yo tengo una visión política, que puede gustarte o no gustarte, y la voy a seguir expresando mientras tengo este cargo. Al día siguiente me llama un parlamentario de derecha -esto fue delante de 30 personas- que me dice, “Christian, hay rumores de que tienes problemas en el gobierno”. Y a los dos días un parlamentario de otro sector, del lado más del gobierno, me dice, “Christian, es vox populi que tienes problemas en el gobierno”. Yo nunca pescando, de verdad, no pensé que era así. Incluso más: hubo periodistas que llamaron preguntando para la Subsecretaría, que habían rumores de que el subsecretario y la ministra tenían diferencias políticas, y que la ministra había pedido mi destitución. Yo, transparentemente, no le di bola, jamás me imaginé que eso podía ser cierto. Eso, hasta que pasa lo que pasa. Que me llaman, intempestivamente, y me dicen, pasó esto. Esos son los hechos. Entonces, yo no sé cuáles son las razones.
¿Usted cree que había una intención? ¿Cuál es su opinión en base a esos hechos que presenta?
Yo no sé cuál es la razón. Solo el gobierno y la ministra saben por qué me echaron. Lo que sí sé, y es evidente y vox populi a esta altura, es que teníamos diferencias políticas y diferencias de estilo, y que yo estaba empujando con mucha fuerza una alternativa que le diera viabilidad a la reforma, haciéndose cargo de las críticas de la derecha respecto de la propiedad de los fondos, respecto de la heredabilidad de los fondos y respecto de la libertad de elección. Eso es evidente.
¿Qué tanto complica su salida el futuro de la Reforma?
Yo no soy el indicado para responder esa pregunta, tendrá que evaluarlo el resto.
¿Pero qué opina usted?
No puedo.
¿Y cómo ve el futuro de la reforma?
Chile necesita una reforma previsional. Los adultos mayores necesitan una reforma previsional. Y el diseño original en el que yo me esforcé mucho en trabajar y después buscar una alternativa... yo demostré que es posible tener una reforma con números que suba las pensiones lo mismo que lo sube la reforma original, pero con propiedad, con heredabilidad y con libertad de elección.
¿Y usted cree que eso le molestó a la ministra?
No lo sé. Yo demostré eso empíricamente porque estoy convencido que en el ambiente como está hoy día hay que hacerse cargo de las preferencias de las personas y hoy día claramente el tema de la propiedad de los ahorros, el tema de la heredabilidad y el tema de la libertad de elección son valores que están presentes en mucha gente. Es cosa de ver los resultados, hay que ser ciego para no ver los resultados de las dos últimas elecciones, tanto del plebiscito como de los constituyentes. Y yo me esforcé en trabajar en una alternativa de reforma que se hiciera cargo de eso.
“Hay que ser ciego para no ver los resultados de las dos últimas elecciones, tanto del plebiscito como de los constituyentes”,
dice Larraín.
¿Usted cree que no hay realismo en algunos sectores del gobierno?
Es que a mí no me gusta calificar al resto.
Pero si me dice hay que ser ciego...
O sea, yo eso digo, que hay que ser ciego para no darse cuenta de una realidad del porte de un buque nomás. Pero lo más interesante es que se puede hacer una reforma, yo lo demostré. Lo modelé junto con los equipos de la dirección de presupuestos, el Ministerio de Hacienda y de la Superintendencia en un trabajo altamente colaborativo. Eso es los otro que tengo yo que decir. El trabajo colaborativo que me tocó coordinar con la Dipres, con el Ministerio de Hacienda, con la Superintendencia de pensiones, junto con la subsecretaría, fue un trabajo técnico al más alto nivel y donde todos estaban al servicio de este buen trabajo. Y ese trabajo tuve el orgullo de coordinarlo yo, tanto al inicio como hasta el final, hasta el último día. Y ahí está.
¿Por qué cree que no lo dejaron defenderse?
No lo sé, no tengo idea. A mí me preocupa enormemente que en Chile se instale una cultura de la cancelación donde se castiga a las personas sin ninguna investigación previa y por cosas, insisto, por lo menos lo que se dijo públicamente. Yo no conozco la acusación, pero por cosas como las que se mencionaron. ¿Uso del lenguaje en público inapropiado?
“Me preocupa enormemente que en Chile se instale una cultura de la cancelación donde se castiga a las personas sin ninguna investigación previa”,
comenta el exsubsecretario.
¿Usted cree que no ameritaría en el caso de haberlo hecho, igual no ameritaría dejar su cargo por eso?
Yo no conozco los antecedentes pero, repito, lo que ameritaría de cualquier manera, yo no soy quien para pronunciarme de esto. Sobre eso, lo único que yo puedo decir es que lo mínimo es escuchar a una persona qué tiene que decir respecto a una acusación de esta naturaleza. Porque te repito, ni siquiera era la acusación. Por lo menos lo que yo leí y lo que me dijeron a mí, no fueron emitir expresiones sexuales inapropiadas destinadas a un hombre o una mujer en particular. Ni siquiera es esa la acusación.
Fueron en público.
Claro, en público. No sé si a ti te dijeron lo mismo.
¿Por qué no llamó a nadie?
Porque yo entiendo, porque ¿sabe lo que pasa? Que me faltó darte otro dato: después de la reunión con la ministra vino gente de la presidencia a la subsecretaría a preguntar por las diferencias entre la ministra y yo.
¿Y quién fue?
No, no puedo darte el nombre para no complicar a esa persona, pero es una persona del equipo de la presidencia. Y además, otra persona de la presidencia llamó a una funcionaria mía.
¿Para preguntarle si efectivamente eran verdad las acusaciones?
No, para hablar de las diferencias políticas entre la ministra y yo. No de las acusaciones, por las diferencias políticas.
Y al Presidente no quiso llamarlo para decirle, “Presidente, me están sacando”..
Yo no tengo ni el celular del Presidente.
¿Y cree que el Presidente le debería haber dicho algo?
No lo sé, yo le mandé un saludo al Presidente a través de su jefe de gabinete agradeciéndole haber tenido la oportunidad de colaborar en la reforma. Es lo que entiendo que correspondía.
Christian, igual el timing evidentemente no era el mejor. O sea, el jueves es la cuenta pública, me imagino que viene un anuncio grande en materia de pensiones. Es como bien complejo todo, ¿no?
Me imagino que el comité político hizo una evaluación rigurosa de la situación y llegó a la conclusión de que había que despedirme sin importar el costo y sin decirme nada a mí antes. Supongo, no sé, ahí no me pronuncio.
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