El DC Ricardo Cifuentes asume presidencia de la Cámara con la tarea de recuperar el diálogo a semanas de los 50 años del Golpe
El diputado, representante de la Región de Coquimbo, es ahijado político del fallecido exsenador y expresidente falangista, Renán Fuentealba, quien integró el Grupo de los 13 democratacristianos que en 1973 condenaron el derrocamiento de Salvador Allende.
Reuniones en las sedes del Congreso en Santiago y Valparaíso se realizaron este lunes casi simultáneamente para afinar los últimos detalles del nuevo pacto de gobernabilidad de la Cámara de Diputados.
En todo caso, ya en la mañana estaba resuelto el principal nudo de las negociaciones, en vista de que la DC y el PC tenían aspiraciones para liderar esta rama del Congreso en el presente período.
Finalmente se acordó que la Democracia Cristiana encabezará la Cámara desde el 24 de julio al 12 de marzo, para luego ceder el principal cargo de la testera a un representante de la bancada del Partido Comunista, que se mantendrá hasta octubre de 2024.
Ese acuerdo, que se plasmó en un documento, también se reflejó en la votación. El diputado DC Ricardo Cifuentes fue elegido por una mayoría de 83 votos, mientras que la legisladora comunista Carmen Hertz se quedó con la primera vicepresidencia, con 81 respaldos. En la segunda vicepresidencia de la corporación salió elegida la socialista Daniella Cicardini, con 83 sufragios.
El resultado trajo alivio para La Moneda, que podrá retener el control de la Cámara y, con ello, manejar los ritmos de la agenda legislativa.
No obstante, las tratativas para resolver los cupos en vicepresidencias y cómo seguirán los turnos en la presidencia (después del PC) se prolongaron hasta la misma sesión. Incluso, antes de proceder a la votación en la que salió elegido Cifuentes, se vio al diputado y presidente de la DC, Alberto Undurraga, conversar en medio de la sala con el ministro secretario general de la Presidencia, Álvaro Elizalde (PS), y con la subsecretaria de esa cartera, Macarena Lobos, quienes inmediatamente se trasladaron al sector de la bancada PC para transmitir los recados entre negociadores.
En su primer discurso como presidente de la Cámara, Cifuentes solicitó a sus pares “poner orden en nuestras conductas y formas de tratarnos” y, al referirse a la próxima conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado, propuso seguir la guía del fallecido expresidente Patricio Aylwin: “Chile es uno solo... Recuperar el diálogo es recuperar el alma de Chile y por eso este 11 de septiembre nos encontrará conviviendo en paz los que pensamos distinto, pero amamos por igual a nuestra patria. Ese será nuestro mejor homenaje a los caídos”.
.“Seremos una mesa que dará ecuanimidad y garantías a todos los sectores representados en la Cámara. Los 50 años del Golpe, que no es un evento sino que un hecho histórico que fracturó de manera brutal y feroz a la sociedad chilena y que destrozó el tejido y cohesión social, en ese marco, tanto el poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial tenemos la obligación que nos impone la comunidad internacional civilizada de hacer memoria, dar a conocer la verdad colectiva y, de esa manera, entregar garantías de no repetición”, aseguró la diputada PC y nueva vicepresidenta, Carmen Hertz.
Ahijado político
Exintendente del primer gobierno de Michelle Bachelet y exsubsecretario de Desarrollo Regional en la segunda administración de la expresidenta, Cifuentes pertenecía a la antigua corriente “chascona” de la DC. Su padrino político fue el fallecido exsenador y expresidente falangista, Renán Fuentealba Moena, quien fue uno de los firmantes de la carta del “Grupo de los 13″, integrado por dirigentes democratacristianos que condenaron el Golpe en 1973.
Aquella declaración, que posteriormente la DC reivindicó como la postura oficial que debió haber asumido el partido en 1973, tiene una connotación especial este año debido a los 50 años de la intervención militar.
Tras regresar en 1990 de Bélgica, donde cursó estudios en la Universidad Católica de Lovaina, Cifuentes fue convocado por Fuentealba Moena, quien entonces era intendente de Coquimbo, para trabajar en la Secretaría Regional de Planificación y Coordinación (hoy la seremía de Desarrollo Social). Trabajó durante siete años con el histórico dirigente, fallecido en octubre de 2021.
En 2020, cuando su padrino político cumplió 103 años, Cifuentes escribió: “Don Renán parece inmortal. Lo es por sus ideas, por la actualidad de su pensamiento político, por su completo compromiso con la democracia y su tremendo amor por su país y su gente. Feliz cumpleaños, Don Renán, un honor y un orgullo haber trabajado junto a usted”.
Aunque el actual período en la presidencia de la Cámara, entre julio de 2023 y marzo de 2024, es más breve, tiene un alto valor simbólico, debido a las actividades conmemorativas del próximo 11 de septiembre.
Precisamente el factor de los 50 años del Golpe era un tema de doble filo para la Democracia Cristiana.
A favor de la DC jugaba el hecho de que una presidencia de un comunista para las actividades conmemorativas podría ser un aliciente para que la derecha endureciera su discurso y elevara la crispación del Congreso, afectando la discusión de reformas sensibles para La Moneda, por ejemplo, la previsional. Pero, por otro lado, también pesaba en contra que el aniversario del Golpe aumentaba la sensibilidad en la izquierda por el rol que desempeñaron los legisladores democratacristianos hace 50 años.
El 22 de agosto de 1973, la corporación entonces presidida por el fallecido exdiputado Luis Pareto (DC), emitió la controvertida resolución que durante la dictadura fue usada como sustento jurídico para justificar el derrocamiento del Presidente Salvador Allende.
Si bien en el acuerdo de de este lunes quedó resuelto que después de la presidencia de Cifuentes, asumiría un diputado(a) comunista -designación que podría recaer en Luis Cuello, Alejandra Placencia o Karol Cariola-, no quedó claro qué bancada tomaría la posta luego del PC.
Originalmente el turno siguiente supuestamente iba a ser asignado a la bancada del PDG, pero ayer los miembros de este comité, que votaron a favor de Cifuentes, reclamaron que en vez del PC, a ellos les correspondía asumir la presidencia de la corporación en marzo de 2024.
Incluso, el diputado PDG, Rubén Oyarzo acusó al ministro Elizalde de usar el “cuento del tío” y de darles una “puñalada por la espalda”. “No seremos más una caja de resonancia del gobierno”, dijo el legislador.
Si bien los votos del PDG eran importantes para el gobierno para retener el control de la Cámara, no son completamente decisivos. Incluso, el oficialismo incluyó dentro del nuevo pacto administrativo a los diputados del Partido Demócratas, quienes podrían asumir una de las dos presidencias de la Cámara después del turno de los comunistas, a partir de octubre de 2024.
Los siguientes turnos para presidir la Cámara van entre octubre de 2024 y junio de 2025; y entre julio de 2025 al 10 de marzo de 2026.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.