"Sin expectativas" y con agenda que incluye endeudamiento universitario y violencia de género: así llega el Frente Amplio a la cita con Piñera

Reformas tributaria y de pensiones, educación -lo que incluye fin al endeudamiento universitario y educación no sexista- diálogo entre naciones y violencia de género. Estos son algunos de los temas que el Frente Amplio pondrá sobre lo mesa durante el encuentro que pasado el mediodía de este miércoles sostendrá con el Presidente Sebastián Piñera en La Moneda.

La invitación para "tomarse un café" con el Jefe de Estado llegó a los correos electrónicos de los líderes del bloque durante la semana pasada, en medio de las reuniones que el Mandatario estaba sosteniendo con los timoneles de la oposición con el objetivo de acercar posturas en los proyectos que se encuentra impulsando el Ejecutivo como la reforma tributaria o el control preventivo de identidad que incluye a menores de edad desde los 14 años.

Pese a que en un principio solo fueron convocados los dirigentes de los partidos del Frente Amplio legalmente constituidos, con el paso de los días la invitación también se extendió a los movimientos políticos que cuentan con representación parlamentaria y que en un primer momento habían quedado excluidos.

Con la invitación en mano, el Frente Amplio acordó "dar libertad de acción" a cada colectividad para que decidieran de manera interna si querrían concurrir a la reunión con el Mandatario. Revolución Democrática, los partido Humanista, Liberal y Ecologista Verde, Comunes, y el Movimiento Autonomista confirmaron su asistencia.

La coalición preparó un documento donde definieron los temas anteriormente mencionados que expondrán al Mandatario y que, según explicaron, incluyen "materias de alto interés ciudadano que actualmente ocupan un lugar central en la agenda pública".

"En cada una de estas materias, proponemos mínimos para frenar abusos y avanzar en mayor protección social. A pesar de nuestras diferencias con el Gobierno, tenemos la convicción de que los puntos planteados a continuación constituyen urgencias que no pueden seguir desatendidas y que todos los sectores políticos debieran apoyar", se lee en el texto al que tuvo acceso La Tercera.

Hasta el momento no existe claridad respecto a cuánto durará la reunión ni su modalidad. Esto, porque a diferencia de lo que ocurrió con los otros líderes de la ex Nueva Mayoría, el Frente Amplio fue convocado "en bloque" -y no por separado- al encuentro.

Por eso, desde la coalición explican que llegan "sin expectativas" y algunos hasta escépticos respecto a los acuerdos que podrían alcanzar tras la cita con Piñera, pero que decidieron asistir para mostrar su postura "abierta al diálogo".

La decisión de aceptar esta invitación incluso fue reconocida por el gobierno. Hoy el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Gonzalo Blumel, dijo que lo encontraba "valioso" porque, a su juicio, la coalición "se había enclaustrado en su posición más dura".

En el conglomerado reconocen que el clima que se vive a horas del encuentro varía al interior de cada colectividad. Mientras que la vicepresidenta del Partido Ecologista Verde, Katherine Quiroz dijo a La Tercera que "no esperan mucho de la reunión" porque "por más que dialoguemos el Presidente continuará haciendo lo que tiene en su agenda", desde Comunes su dirigenta nacional, Javiera Toro, explica que pese a las "diferencias irreconciliables" con el Ejecutivo esperan que en temas como el endeudamiento estudiantil o la violencia de género se pueda "llegar a acuerdos". "No queremos participar de esta reunión solo para la foto", agregó.

En el Partido Humanista -última colectividad en aceptar la invitación con Piñera- explicaron que se sumarán al encuentro porque "no quieren que se les acuse de no querer conversar" y reconocen que han preferido no formarse expectativas de la cita. "Inevitablemente sea quien sea quién esté a cargo, vamos a asistir a la casa de la República", comentó la timonel Catalina Valenzuela a este medio, quien agregó que ser convocados significa "que se les está viendo como una fuerza política interesante".

Desde el Movimiento Autonomista -que fue invitado hace unos días a esta reunión en La Moneda- manifestaron su disposición al "diálogo democrático con el gobierno". "Nuestra prioridad siempre va a ser buscar mejorar las condiciones de vida de las personas y avanzar en las posiciones planteadas desde el movimiento social. No venimos con la intención de replicar las cocinas políticas de las últimas décadas, por eso vamos a transparentar lo que se discuta en esta reunión", aseguró Stephanie Peñaloza, vocera nacional del movimiento y del Frente Amplio.

El Frente Amplio pretende dialogar con el Presidente temas como las reformas tributaria y de pensiones, educación -lo que incluye fin al endeudamiento universitario y educación no sexista- diálogo entre naciones y violencia de género. Estos quedaron consignados en un documento elaborada la jornada del lunes.

En cuanto a la reforma previsional, el Frente Amplio plantea una ley corta para el aumento del pilar básico solidario, la construcción de un sistema de seguridad social, y el reconocimiento del trabajo doméstico y de cuidados no reumunerados.

Otro de los temas que esperan abordar con el Mandatario se relaciona a una "educación pública y no sexista". Esto incluye "frenar los abusos del endeudamiento estudiantil", avanzar hacia una "educación no sexista", y poner fin "a la violencia de género". Esto último, dando urgencia a proyectos como la "Ley Gabriela", o al que garantiza el "Derecho de la mujer a una vida libre de violencia". También proponen la "aprobación del protocolo facultativo de la Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer".

Respecto al "diálogo entre naciones", el Frente Amplio planteará la "desmilitarización del Wallampu", "el reconocimiento de que existen propiedades adquiridas por personas no mapuche que carecen de legitimidad y legalidad", la necesidad de una comisión de esclarecimiento histórico, derecho a la libre determinación y cobertura total a la asignatura de lengua indígena.

En materia de reforma tributaria, la coalición reconoce que "tenemos un diagnóstico compartido con el resto de la oposición y es que la Reforma Tributaria propuesta no se hace cargo de las necesidades de gasto público que hoy tiene el Estado para financiar bienestar para la gran mayoría de chilenos".

En este sentido plantean que "no es razonable disminuir la recaudación fiscal actual, ni compensar una rebaja a las grandes empresas con un aumento de eficiencia en recaudación de IVA", mostraron su desacuerdo en la "regresividad" del sistema tributario, plantearon que la reforma "no debe retroceder en el combate de la elusión y la evasión", proponen mejoras al "régimen tributario de las PYMES", también "cambios para fomentar el crecimiento de largo plazo" y propusieron la creación de "nuevos instrumentos tributarios en materia regional".