El pastor que dio la sorpresa en Concepción

No era el favorito, lo que queda confirmado por el estrecho margen con el que ganó la elección (2007 votos al cierre de esta edición). Héctor Muñoz, del Partido Social Cristiano, se adjudicó ayer la alcaldía de Concepción, en medio de un ambiente político altamente fracturado en la capital del Bío Bío.

De hecho, Muñoz es el único de los candidatos que participó de una primaria, aunque sólo dentro de su mismo partido (la que ganó con un 80% de los votos). Más allá de eso, ni la izquierda ni la derecha fueron capaces de levantar primarias en sus respectivos sectores. Por eso Muñoz, ex militante RN, competía en su mismo sector con James Argo (Republicanos) y Valentina Pavez Van Rysselberghe (Chile Vamos).

A pesar de que tanto en la UDI como en el PSC había intenciones de elegir un candidato único a través de sondeos, los republicanos se negaron. Incluso Chile Vamos se abrió a ceder la alcaldía de Concepción a cambio de que el Partido Republicano bajara su candidatura al gobierno regional.

Con el triunfo de Muñoz, un pastor evangélico de 45 años, el Partido Social Cristiano -nacido en 2023, Rojo Edwards y que tiene presencia solo en las regiones de O’Higgins, Ñuble, Biobío, Araucanía y Los Ríos- logra su primer escaño municipal, que se suma a la presencia que ya tienen en la Cámara de Diputados con Francesca Muñoz y Roberto Arroyo y en el Senado con Juan Castro y Rojo Edwards.

El triunfo de Muñoz termina con 12 años de dominio oficialista -específicamente de la DC- en el municipio penquista. La continuidad del actual alcalde, Álvaro Ortiz, era el candidato del pacto Contigo Chile mejor, Aldo Mardones que obtuvo el segundo lugar con XX% de las preferencias.

La fragmentación en la centro izquierda se reflejó en que Mardones no fue el único candidato tras el que se cuadraron los apoyos del progresismo. Desde el Frente Amplio dieron su apoyo al independiente Camilo Riffo, quien había sido segunda mayoría en las elecciones municipales de 2021 e intentó participar en primarias para definir al representante de la centroizquierda. En esta ocasión se quedó en cuarto lugar, con un 19,1% de las preferencias.

A pesar de presentarse como candidato independiente fuera de pacto, durante su etapa universitaria Riffo militó en la Izquierda Autónoma, movimiento que fue la cuna ideológica del presidente Gabriel Boric. De allí que contara con el respaldo oficialista del FA para inscribir su candidatura. Cuando el diputado de Convergencia Social, Diego Ibáñez, entregó todo su apoyo a Riffo, Aldo Mardones calificó su actuar como “desleal y falta de compromiso”.

Tan solo en la primera jornada de elecciones el Servel cifró en más de siete millones las personas que acudieron a votar, es decir un 46,86% del padrón total, y la Región del Biobío destacó con el cuarto lugar de participación a nivel país.

Los candidatos valoraron la alta participación, aunque expresaron su preocupación por lo poco expedita de la votación. Ninguno se atrevió a hacer proyecciones, conscientes de lo ajustada que sería la elección. “Es difícil tener una proyección, pero yo espero que podamos tener un cierre de jornada en donde esa necesidad y esas ganas de cambio se logren expresar”, comentó Camilo Riffo.

La continuidad del actual alcalde, Aldo Mardones, apostó la experticia acuñada en 12 años de gestión municipal: “Creemos que Concepción y nuestro país no están para lo que es ensayo y error, hay que contar con equipos de excelencia que conozcan el territorio y las necesidades de las personas, y ese equipo está con nosotros”

Por su parte James Argo, de Republicanos, reconoció que podrían haber estado “más holgados y tranquilos” si se hubiera definido un candidato único de la derecha, pero agregó que “más allá de la dispersión, creemos que la mayoría de los penquistas de oposición entienden que la única manera de ganar es uniéndose”.

El finalmente ganador de la jornada, Héctor Muñoz, valoró el éxito de su partido, con apenas dos años de vida. “La dificultad fue hacer un partido nuevo, muchas veces nos confundían con una candidatura de izquierda por el nombre ‘social’, pero esta es una candidatura de centroderecha, del mundo cristiano, que tiene una mirada social”, afirmó el alcalde electo.

Héctor Muñoz (45) fundó y lideró el movimiento evangélico “Águilas de Jesús”, en 2001, del que es pastor hasta el día de hoy, mientras estudiaba Química y Farmacia en la Universidad de Concepción. En 2004, alcanzó la presidencia de la Federación de Estudiantes de esa casa de estudios, marcando un hito al ser la primera agrupación de derecha en liderar la FEC.

“El Partido Social Cristiano tiene una fuerte presencia y actividad en la región del Biobío. Es un partido con interés de proyectarse a la política nacional, aprovechando la plataforma territorial de los municipios. En este contexto, el municipio de Concepción resulta emblemático”, explica Violeta Monster, doctora en Sociología y profesora del Departamento de Administración Pública y Ciencia Política de la Universidad de Concepción.

Muñoz también fue concejal de Concepción durante dos periodos: de 2012 a 2015 y de 2016 a 2018. Ese último año dejó el cargo para asumir como seremi de Salud del Biobío.

El 2 de octubre de 2021, el gobierno de Sebastián Piñera solicitó su renuncia, cuando era militante de Renovación Nacional. La decisión se produjo tras el voto de su pareja, la diputada Francesca Muñoz (actualmente en el PSC), a favor del cuarto retiro del 10% de las AFP. En su momento, se atribuyó la remoción a la falta de alineación política.

La salida de Muñoz fue criticada por su propio sector, ya que su gestión como seremi de Salud en plena pandemia había sido bien valorada. Además, generó sorpresa en gremios de la región, como el Colegio Médico y Fenats.

Para Violeta Montero, académica del Departamento de Administración Pública y Ciencia Política de la Universidad de Concepción, su figura resulta interesante por su trabajo durante la pandemia de Covid19, “fue el seremi de Salud en un momento importante y es probable que la evaluación positiva de ese rol haya tenido impacto, aunque no era un nombre que sonara entre las primeras opciones”.

El pasado 21 de octubre, un hijo de Muñoz de 26 años, llamado Héctor como él, fue detenido por portar una pistola adaptada y 18 gramos de marihuana. El ahora alcalde electo señaló que su hijo enfrentaba problemas de salud mental y se pensó que el hecho afectaría la candidatura del pastor, algo que finalmente no ocurrió.

La elección de Muñoz representa el retorno de la derecha a la alcaldía tras más de una década de liderazgo oficialista. Desde que Jacqueline van Rysselberghe dejó el cargo en 2012, la derecha no había logrado recuperar el sillón municipal. En esa elección, Álvaro Ortiz se consolidó como alcalde al ser electo con el 55,15% de los votos, superando al candidato de la UDI, Emilio Armstrong, quien obtuvo el 37,25%.

“Ya no podemos decir que la región del Biobío mantiene una orientación hacia la izquierda”, afirma Violeta Montero.

Montero explica que muchas de estas personas no estaban politizadas antes del estallido social, pero a partir de entonces comenzaron a disputar un espacio en el ámbito público “Hay que interpretar la emergencia de estas derechas porque son derechas distintas. Hay una derecha tradicional ligada al mundo militar o que aún valora la herencia de Augusto Pinochet, pero están estas otras derechas que aluden más bien a elementos valóricos cristianos”.

Concepción parece entonces, no solo alejarse de la centro izquierda, si no que inclinarse activamente a una derecha más conservadora, que se notó en las sentidas palabras de Muñoz tras ganar la elección:“Agradecimiento al Señor. Dios estuvo con nosotros y también los vecinos de Concepción”.