Elecciones 2024: oficialismo inscribe pacto con la DC y fija como tope la inscripción de 86 primarias
Aunque en un inicio las 11 colectividades anunciaron que realizarían comicios en 86 comunas del país, por la tarde advirtieron que el número es demasiado alto. Por lo mismo, al cierre de esta edición seguían reunidos para intentar despejar algunos municipios.
La tarde del martes, los timoneles de los partidos de gobierno y la Democracia Cristiana (DC) llegaron hasta las oficinas del Servicio Electoral (Servel) para inscribir el pacto “Contigo Chile Mejor”, de cara a las elecciones municipales de octubre de este año.
Tras varias semanas de negociación, las once colectividades que integran el pacto lograron concretar un acuerdo. En concreto, en principio definieron 86 comunas a lo largo del país en las que realizarían elecciones primarias.
De ellas, hoy 54 hoy están en manos de la derecha, 15 son independientes, ocho son de la DC (Peñalolén, La Granja, Molina, El Carmen, Bulnes, Lebu, Combarbalá y Penco), tres son del PPD (Cartagena, Curepto, Purén), tres son socialistas (Vallenar, Rancagua, La Ligua), dos son radicales (La Serena, Chillán Viejo), uno es del Partido Humanista (Olmué).
Hasta el momento de la inscripción del pacto, había comunas en las que la mayor parte de los partidos de la alianza se anotó para competir. Ese es el caso, por ejemplo, de Valparaíso, hoy administrada por Jorge Sharp, quien apostó por ser la carta del sector.
Allí, hasta el momento, están inscritos Aldo Cornejo (DC), Boris Kuleba (PS), Priscila Fleming (PPD), Sebastián Tobar (Partido Liberal), Alicia Zúñiga (PC), Consuelo Requena (Regionalistas Verdes) y Camila Nieto (Convergencia Social).
En el caso de Peñalolén, para competir se anotaron la concejala Ximena Llamín (DC), José Ruiz (independiente apoyado por el PPD, los liberales y la actual alcaldesa, Carolina Leitao) y Miguel Concha (Revolución Democrática).
En La Granja, por otra parte, se anotaron Edita Alarcón (DC), Juan Valdés (PS), la exdiputada Natalia Castillo (Ind.-PPD), Claudio Arriagada (Ind.-PL), César Espíndola (PC), José Luis Díaz (Regionalistas Verdes).
Estas dos últimas comunas actualmente son administradas por la Democracia Cristiana. Si bien en el partido había temor por que, al pactar con el oficialismo, se pudieran concretar primarias en sus municipios emblemáticos -como lo son Peñalolén y La Granja-, lo cierto es que también celebran que pudieron anotarse como candidatos del pacto en algunas comunas que actualmente no les pertenecen, como Algarrobo -a través de la candidatura de Katherine Salosny- y El Quisco con Natalia Carrasco.
Además, en la decé lograron ir a la reelección con sus alcaldes que están en primer o segundo período.
“Que estén once partidos por un lado y que estemos a la vez mirando 345 comunas y con dificultad para construir criterios de acuerdo a las distintas comunas, hizo que en muchos casos hiciéramos análisis caso a caso, pero finalmente logramos este pacto”, dijo el presidente de la DC, el diputado Alberto Undurraga, luego de concluir el acuerdo con los demás partidos.
Antofagasta también fue un municipio cotizado: se anotaron casi todas las colectividades del pacto excepto Comunes y Revolución Democrática.
Nueva reunión
De todas formas, las once colectividades detrás del pacto se juntaron nuevamente la tarde del miércoles. Esta vez, en la sede de la Democracia Cristiana y con el objetivo de reducir los candidatos que se presentaron en algunas comunas, e incluso disminuir la cantidad de elecciones primarias que tendrían que realizar.
En parte, quieren evitar concretar elecciones primarias por el costo económico que estas tendrían. Pero también porque como pacto pretenden que parte de su relato sea hacer ver que “el progresismo”, como dicen ellos, está unido, mientras que “las derechas” están divididas en Chile Vamos y el Partido Republicano.
Un dato: en Isla de Pascua solo se inscribió una candidata del oficialismo, la socialista Juliette Hotus. En Colchane, en tanto, no hay nombres sobre la mesa, aunque sí manifestó pretensión el Partido Socialista.
En el sector oriente de la Región Metropolitana, el oficialismo también intentará jugar sus fichas. En Vitacura se inscribió el presidente de los liberales, Juan Carlos Urzúa, como candidato a alcalde del pacto.
El caso de Las Condes y Lo Barnechea es distinto, puesto que en ambas comunas pretenden realizar primarias. En la primera, se anotaron Juan Pablo Álvarez (PPD), Sandra Beltrán (PC), Tomás Bize (Acción Humanista), la concejala Isidora Alcalde (Revolución Democrática) y la exconvencional Constanza Schönhaut (Convergencia Social). En la segunda, por otro lado, se inscribieron Felipe Vergara (Partido Liberal), Myriam Meza (Acción Humanista) y Cristóbal Rodríguez (Convergencia Social).
Cómo se despejó el camino para los emblemáticos
Santiago, Ñuñoa, Maipú, Viña del Mar, Quinta Normal y Pudahuel fueron solo algunas de las comunas con mayor cantidad de habitantes dentro del país que hoy están bajo dominio oficialista y que, en algún momento de la negociación, estuvieron bajo fuego amigo.
El caso de Santiago fue el más emblemático dentro de la discusión, ya que fue el primer municipio que quedó bajo amenaza aliada, con la pretensión electoral del socialista Ismael Calderón, quien ganó importantes adeptos en el PS en su cruzada por romper la tesis de “el que tiene, mantiene” -que un jefe comunal pueda optar por la reelección sin que se le levante competencia- contra la alcaldesa Irací Hassler (PC).
El pasado 4 de abril, en medio de conversaciones entre el PC y el PS, el equipo negociador de esta última tienda (Camilo Escalona, Eduardo Bermúdez y Hernán García) decidió declinar la idea de competir contra la actual jefa comunal.
Lo mismo hicieron los socialistas en Maipú, con el alcalde Tomás Vodanovic (Revolución Democrática) y los Regionalistas Verdes en Viña del Mar, contra la también militante RD Macarena Ripamonti. Este último bastión del Frente Amplio solo se pudo despejar este miércoles, luego de que los Regionalistas Verdes desistiera de competir en la Ciudad Jardín en el marco del cierre de las negociaciones.
En Pudahuel, en tanto, ocurrió algo distinto, ya que el PC y el PS negociaron bajar candidaturas en las que toparon sus intereses, en beneficio del bienestar de ambas tiendas. La moneda de cambio utilizada en este caso fue Copiapó, comuna cuyo alcalde es socialista y en la que los comunistas intentaron competir con Rosa Ahumada.
El trato fue que el PC dejara de pretender dicho bastión electoral histórico para el PS, al mismo tiempo que estos últimos bajaban a Johnny Carrasco como opción para competir en la alcaldía de Pudahuel contra el jefe comunal vigente, Ítalo Bravo (independiente respaldado por el PC).
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.