A medida que los sectores políticos empiezan a tomar definiciones de cara al próximo desafío electoral del 16 de noviembre, las diferencias también comienzan a marcarse con mayor nitidez.

Luego de que, como se esperaba, el Partido Republicano proclamara a su fundador, José Antonio Kast, como su candidato presidencial y Renovación Nacional hiciera lo propio con la exalcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, el fuego cruzado entre republicanos y el conglomerado Chile Vamos no se hizo esperar. Aunque las distancias ya venían haciéndose publicas un poco antes.

La última de las duras confrontaciones tuvo como eje a la reforma del sistema de pensiones, pero anteriormente fue la estrategia republicana de ir a primera vuelta presidencial; las medidas en materia de migración propuestas por Matthei; y las negociaciones de cara a las pasadas elecciones municipales y regionales, las que han ido marcando un tono que parece no parar de subir.

Fue el 8 de enero cuando las instancias partidistas de los republicanos confirmaron que el exdiputado José Antonio Kast sería su abanderado, enfrentando de esta manera su tercera aventura presidencial. Ese día también se confirmó algo que se esperaba: llegarán directo a primera vuelta y no enfrentarán una primaria con sectores de la derecha. Una situación que ha generado críticas desde Chile Vamos apuntando a que esto beneficiaría al oficialismo.

“Ellos ya decidieron que no participarán en primarias y no tienen buenas razones para justificar esta división que solamente termina beneficiando a la izquierda”, señaló, por ejemplo, en entrevista con el diario La Tercera, el presidente de la UDI, Guillermo Ramírez.

Y los diputados de Chile Vamos, Diego Schalper (RN), Juan Antonio Coloma (UDI) y Francisco Undurraga (Evópoli), en diciembre pasado también apuntaron a la opción de restarse de primarias por parte del Partido Republicano “¿Es eso lo que necesita nuestro país, cuando resulta evidente que urge pavimentar un cambio de rumbo el año que viene? ¿No se aprendió la lección de la equivocada pretensión que impulsó el Partido Republicano de llegar con más de un candidato a la primera vuelta de los gobernadores regionales? ¿No es el momento de postergar ambiciones y mezquindades, en pos del bien común de Chile?”.

Fue el propio Kast quien respondió a los cuestionamientos asegurando que “en primera vuelva no va a ganar nadie. A pesar de lo que decían, por ejemplo, el 2017 (…) decían ‘si tú te bajas, Piñera gana en primera vuelta’ y el resultado de Sebastián Piñera fue un 36%, una mala votación”.

En una puesta en escena “presidenciable” el pasado 6 de enero, Evelyn Matthei (UDI) presentó -junto a parlamentarios de Chile Vamos- un plan para abordar la crisis migratoria en la zona norte del país, con medidas orientadas a endurecer los controles en pasos fronterizos y evitar el ingreso de “criminales realmente peligrosos”.

Para muchos con este gesto adoptó una de las agendas del líder y candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, al asegurar que trabaja con expertos para frenar entradas y salidas ilegales en la frontera y presentando medidas como el uso de drones, cámaras y sensores para detectar personas en pasos no habilitados e instalar obstáculos físicos en los pasos fronterizos como zanjas, muros, alambre de púas e incluso áreas dinamitadas.

Tras la propuesta fue el propio Kast quien salió a enfrentar al asegurar que la exalcaldesa “le copia”. “Es cosa de ver lo que plantea en la frontera en Arica y decir, oye se parece harto a lo que han hablado -desde hace bastantes años- los republicanos”, dijo en el exdiputado en entrevista con Mesa Central.

Además, profundizó sus críticas a la candidatura de la exministra señalando: “Por qué no hicieron todo esto durante el gobierno de Sebastián Piñera, entonces yo creo, que llegan algo tarde y vuelvo a insistir hay una película “los mismos de siempre” no van a cambiar (…) no van a ser capaces de hacer lo que ya no hicieron”.

Las pasadas elecciones municipales y de gobernadores regionales, que se realizaron el 26 y 27 de octubre, también hicieron aflorar diferencias entre el Partido Republicano y el conglomerado Chile Vamos. Las negociaciones fueron tensas y a pesar que intentaron acordar pactos por omisión en los comicios de alcalde y así evitar la división de votos, finalmente los esfuerzos fracasaron y terminaron midiéndose en cerca de 40 comunas y sin unidad en la elección de gobernadores regionales.

En ese entonces, la secretaria general del Partido Republicano, Ruth Hurtado, fue presentada como una de las perjudicadas de las negociaciones al tener que bajar su candidatura por Recoleta. “Quienes hagan perder esas elecciones y entregarle esas comunas a la izquierda tendrán que dar explicaciones a la ciudadanía, porque ellos pretenden gobernar haciéndole zancadillas al de al lado, al que puede ser un aliado en una próxima presidencial”, dijo entonces.

“Somos proyectos distintos. Podemos tener bases comunes para enfrentar temas de seguridad, de educación, económicos, pero no necesariamente el mejor resultado se obtiene buscando una alianza a cualquier costo”, destacó Kast.

El último de los episodios de diferencias se dio en el marco del acuerdo entre el gobierno y los senadores de Chile Vamos por la reforma previsional. Aunque la guerra de declaraciones había desatado un poco antes por este mismo tema.

El mismo miércoles 15 de enero, día que se suscribió el pacto, uno de los primeros en reaccionar fue José Antonio Kast quien sostuvo que es “un acuerdo hecho a escondidas de los chilenos, que quieren aprobar a la rápida, sin discusión ni transparencia. Tener coraje es oponerse a este mal acuerdo. Y espero que los senadores y diputados que se dicen de derecha, voten en contra. Si no lo hacen, en noviembre los chilenos se la van a cobrar”. Mientras que el presidente de la colectividad, Arturo Squella, habló de un “manotazo histórico”.

El debate se trasladó a las redes sociales donde hubo un fuerte enfrentamiento entre parlamentarios republicanos y el diputado Diego Schalper (RN). El jefe de bancada del Partido Republicano, Luis Fernando Sánchez, sostuvo que “los senadores de Evelyn Matthei le dieron su voto a la ministra comunista (Jeannette) Jara para pegarle un manotazo a los fondos de pensiones”. Ante lo cual el legislador de Chile Vamos escribió: “¿Hasta cuándo miente? (...) ¿Cuándo harán alguna propuesta en el tema y saldrán de las fake news?”.

Luego, otro diputado republicano, Benjamín Moreno, escribió: “Aprende a sumar, Diego Schalper (...) Ustedes son cómplices de un encubrimiento de deuda! IRRESPONSABLE!” a lo que el parlamentario RN , lanzó nuevos dardos haciendo alusión al alza en las encuestas de Johannes Kaiser (Partido Nacional Libertario) como opción presidencial: “Entiendo que estén ansiosos porque se les apareció K (por Kaiser) y que no estés acostumbrado a argumentar. Pero Chile se cansó de las pachotadas, del inmovilismo y la superioridad moral. Además, dejen de oponerse a que sesionemos! Saludos”.

Hace un mes atrás Squella, por este mismo tema, sostuvo que “el actual estado de paralización y retroceso de Chile tiene su origen, en buena parte, en esta conducta permanente de la centroderecha de desviarse del rumbo”. Las declaraciones del timonel republicano fueron refutadas por los diputados de Chile Vamos Diego Schalper (RN), Juan Antonio Coloma (UDI) y Francisco Undurraga (Evópoli), quienes recalcaron que “su escrito parece responder al temor de perder adhesión en algunos públicos a partir de la irrupción de Johannes Kaiser en las encuestas”.