Hoy fue el turno del Presidente Sebastian Piñera para exponer frente a la Asamblea General de las Naciones Unidas. Sus otros pares habían abordado la crisis que atraviesa Venezuela y no fue la excepción en el caso del Mandatario.

En un comienzo abordó la crisis migratoria mundial."Hoy en día estamos llamados a enfrentar como nunca antes en nuestra historia uno de los mayores desafíos surgidos como son las migraciones masivas que hoy están ocurriendo en nuestro mundo", aseguró el jefe de Estado.

"Estas migraciones masivas son un enorme desafío para la comunidad internacional y sabemos su causas: terrorismos, guerras, hambre y regímenes totalitarios, han generado en los últimos tiempo el mayor desplazamiento de personas en la historia y humanidad", agregó.

Es en ese marco que habló sobre la política migratoria que ha puesto en marcha durante su gobierno, como la entrega de visa de responsabilidad democrática para venezolanos.

Y luego de abordar los desafíos para lograr el desarrollo y el deterioro ambiental, Piñera se enfocó para finalizar su intervención en la crisis venezolana.

Con un duro tono contra el gobierno de Nicolás Maduro -quien sorpresivamente apareció ayer en la Asamblea y reiteró la supuesta implicancia de funcionarios chilenos en su presunto atentado ocurrido en agosto pasado- el Presidente indicó que el país petrolero "está viviendo una tragedia".

"Quiero traer a esta Asamblea la voz del pueblo venezolano que el régimen del Presidente Maduro ha enmudecido", comenzó Piñera, asegurando que la administración chavista no respeta ninguno de los principios democráticos ni libertades, además de insistir que el país caribeño atraviesa una crisis política, económica, social y humanitaria.

"Muchos están perdiendo literalmente sus vidas por falta de alimentos y medicamentos, y el Presidente Maduro negando esta situación, no abre las puertas a la ayuda humanitaria que muchos países estamos dispuestos a entregar", denunció el Presidente, estando el canciller venezolano presente.

"¿Cómo puede ser un presidente tan ambicioso, tan insensible que está dispuesto a causar ese grado de dolor y sufrimiento a su propio pueblo con tal de aferrarse al poder?", preguntó Piñera en referencia a Maduro.

Con todo, el Mandatario expresó su deseo de que la ONU "se modernice" para actuar de forma "mas rápida y más eficiente", en el camino para "reducir el sufrimiento humano" y así pidió, como otros líderes latinoamericanos, evitar el derecho de veto, "basado en los propios intereses, o los de sus aliados, que en su deber de perseverar la paz y la seguridad en todos los rincones de nuestro planeta".

Este tema ya lo había abordado ayer Piñera tras su llegada a Nueva York. El presidente sostuvo que una "opción militar es una mala opción" en Venezuela, momentos después que el mandatario estadounidense, Donald Trump asegurara que "todas las opciones están en la mesa" en el caso venezolano.

El jefe de Estado aclaró que su postura, eso sí, no implica que no tenga un firme compromiso con la crisis que enfrenta el país caribeño. "Eso no significa que no tengamos un firme compromiso los países que conformamos el Grupo de Lima y Chile, en forma muy especial, por hacer todo lo que esté a nuestro alcance dentro del marco del derecho internacional para que el pueblo venezolano pueda recuperar lo que un grupo de personas le ha usurpado: su libertad, su democracia, su Estado de Derecho, el respeto a los derechos humanos", indicó en la oportunidad.

La jornada de ayer, de hecho, estuvo marcada por la entrega de seis países -incluyendo Chile- de una carta a la fiscal de la Corte Penal Internacional pidiendo que se investigue al gobierno venezolano por crímenes de lesa humanidad.