A tres semanas de asumir en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren marcó sus primeras diferencias respecto al liderazgo anterior que existió en la Cancillería de mano de la renunciada Antonia Urrejola y aseguró que el ex Presidente de Perú sí intentó un golpe de Estado.

El secretario de Estado, en entrevista con Tolerancia Cero de CNN Chile, fue consultado sobre la continuidad y cambios dentro de la cartera con su llegada como ministro. Como ejemplo se dieron las declaraciones de la excanciller Urrejola, en diciembre pasado, cuando aseguró que “para Chile, Pedro Castillo no es un golpista, pero no cumplió con las normas constitucionales”, esto tras pretender cerrar el Congreso y gobernar mediante decretos.

Sin embargo, el actual ministro van Klaveren, dio un giro respecto a la postura del país y aseguró que “a nosotros nos parece que sí. Sí claro, absolutamente (intentó un autogolpe) y creo que, además, en el caso del Perú, la institucionalidad ha operado y es por eso que tenemos relaciones normales con Perú”.

Asimismo, el canciller respondió sobre si Dina Boluarte -quien quedó en la presidencia del país vecino tras la destitución de Castillo por el Congreso y que ocupaba el cargo de vicepresidenta- es la legítima autoridad del país vecino: “Es la Presidenta, sí en estos momentos esa es la situación”.

Durante la conversación también fue consultado respecto a la calificación a los regímenes que gobiernan en otros países, como es el caso de Venezuela y si es una “democracia plena”.

“Yo no quiero estar opinando, eso se lo dejo a los analistas”, aseguró, a quien se le cuestionó por no fijar posición frente a Venezuela, Cuba o China. “Son sistemas distintos, son situaciones diferentes y además de eso, sobre todo en el caso de Venezuela, hoy por hoy tenemos un interés muy concreto en nuestra relación con Venezuela y ese interés tiene que ver también con el tratamiento de los flujos migratorios. Hay que combinar distintos intereses en la política exterior”, aseguró el secretario de Estado.

En la misma línea, la autoridad, que lleva menos de un mes en el cargo tras un bullado cambio de gabinete del Presidente Gabriel Boric, fue consultado por sus definiciones respecto a las relaciones comerciales que se establecen con diferentes países, entre ellos, China y, sobre todo, luego de las declaraciones del embajador chileno en Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés. Este último planteó el 28 de marzo pasado, durante un panel de la cumbre SAFe 2023, respecto a la industria del litio que “tenemos una excelente relación comercial con China, que es un nuestro principal socio comercial, pero queremos que nuestros minerales estratégicos y nuestro desarrollo estratégico estén asociados a países con los que compartimos valores y una larga historia juntos”.

Al respecto, Van Klaveren aseguró que “en términos de las relaciones con el mundo, tendemos a la diversificación, a nosotros es eso lo que nos interesa. El embajador Valdés estaba promoviendo a nuestro país frente a inversores y académicos”, precisando que se reunió este domingo con el diplomático donde profundizó -según el secretario de Estado- en el contexto de sus palabras.

“Nosotros con China tenemos intereses comunes que son muy importantes. También tenemos valores comunes. China es un actor muy importante. China tiene posiciones multilaterales y en algunas coincidimos con ellas, en otras no. Lo mismo con Estados Unidos, lo mismo con Europa”, explicó.

“En general Chile no es partidario de señalar con el dedo a países en materia de derechos humanos, como política general, salvo algunas excepciones que lo hemos visto, como Nicaragua, que es un caso bastante emblemático por las circunstancias en que se producen”, afirmó el titular de Relaciones Exteriores, quien se negó a contestar si en China se violan los derechos humanos.

Emplazado por la postura del gobierno en torno a Nicaragua y la diferencia con el tratamiento de las mismas vulneraciones a los derechos humanos con el gigante asiático, el canciller arguyó que “nosotros tenemos que tomar en cuenta todos los intereses que están en juego y eso el país lo entiende. Hay muchos intereses que están en juego en la relación con China, en la relación con otros países”.

Sin embargo, y tras ser abordado reiteradamente por el panel, ante las disímiles posturas del gobierno respecto a los intereses con ambos países, van Klaveren cerró el tema sentenciando que “al canciller no le corresponde estar señalando con el dedo a determinados países”.