“Hay un problema”: Servel advierte errores en reforma política de senadores

COMISION MIXTA
El presidente del Servel, Andrés Tagle (sentado), junto a senadores y el ministro Elizalde.

En la Comisión de Constitución, el presidente del Servel, Andrés Tagle, advirtió inconvenientes de la redacción. Entre los puntos más delicados, el directivo calificó como “poco presentable” que los votos logrados por un partido -que no alcanzó el umbral de existencia- sean asignados a una colectividad del mismo pacto que sí logró sobrevevir a la elección.


Por segunda sesión consecutiva, la reforma política, impulsada por un grupo de senadores que busca combatir la fragmentación del Congreso, no pasó la revisión técnica.

En lo esencial, la iniciativa -coordinada por el presidente de la Comisión de Constitución, Alfonso de Urresti (PS), y adherida por los senadores Rodrigo Galilea (presidente de RN), Luz Ebensperger (UDI), Ricardo Lagos Weber (PPD), Gastón Saavedra (PS) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli)- fija un umbral en la asignación de escaños en el Congreso y establece el cese del cargo a los legisladores que renuncien a sus colectividades.

Ya el lunes pasado, el ministro secretario general de la Presidencia, Álvaro Elizalde (PS), ya había señalado que la norma que fija el umbral generaba un conflicto con la Cámara, ya que los requisitos de porcentaje de votos o de un mínimo de legisladores solo se aplicaban para la elección de diputados, pero no para quienes se postulaban al Senado.

Al exponer este miércoles ante la Comisión de Constitución, el presidente del Consejo Directivo del Servel, Andrés Tagle, advirtió ese mismo punto, pero también otros inconvenientes de la redacción.

Entre los puntos más delicados, el directivo calificó como “poco presentable” que los votos logrados por un partido -que no alcanzó el umbral de existencia- sean asignados a una colectividad del mismo pacto que sí logró sobrevivir a la elección.

“Hay un problema con la frase final... Aquí se está haciendo una asignación de votos y lo que hay que hacer es una asignación de los escaños de aquellos partidos que por esta norma quedan fuera de la capacidad de elegir a los candidatos. Consideramos poco presentable asignar los votos a los demás partidos cuando en realidad el problema es asignar los escaños de los partidos que no alcanzaron el umbral”, dijo Tagle.

“Esto podría traer problemas en los aportes reembolsables por gasto por votos, porque si se asignan los votos, el tribunal (Tricel) va a asignar los votos y eso va a afectar las cuentas de gasto, los reembolsos y una serie de efectos posteriores que no son el propósito que tiene la norma”, añadió, explicando que el traspaso de votos también implica asignación de más dineros fiscales.

Además, el presidente del Servel señaló que “hay un problema adicional, porque dice, se le asignan a los otros partidos del pacto, pero un partido puede ir sin pacto. En ese caso, ¿a quién se le asigna? Eso podría producir eventualmente que la cámara quedara con menos o más escaños”.

También comentó que “como está la norma, puede ser muy interpretable por el tribunal, en términos que el tribunal diga, yo asigno los votos, pero no asigno los escaños, y la cámara queda con menos (diputados)”.

Qué dice el texto

La norma propuesta de los senadores considera que cesarán en el cargo los diputados y senadores que renuncien al partido por el que fueron elegidos o bien al comité de esa colectividad, cuando se trate de independientes. Esa medida al menos tiene un apoyo transversal desde el PC al Partido Republicano.

No obstante en el punto más polémico señala que “solo los partidos políticos que alcancen al menos el cinco por ciento de los votos válidamente emitidos a nivel nacional, en la elección de los miembros de la Cámara de Diputados, tendrán derecho a participar en la atribución de escaños en dicha Cámara”, dice la norma, que -al estar redactar de esa forma, en singular- excluiría a la Cámara Alta de estas condiciones especiales para asignar cupos de senadores.

La disposición agrega que “esta regla no se aplicará al partido que tenga escaños suficientes para sumar como mínimo ocho parlamentarios en el Congreso Nacional, entre los eventualmente elegidos en dicha elección parlamentaria y los senadores que continúan en ejercicio hasta la siguiente elección”. Es decir, si esa colectividad en riesgo, al tener pocos votos, suma al menos ocho senadores o diputados, podría igualmente acceder a su representación en la Cámara Baja.

“Los votos obtenidos por los partidos políticos que no obtengan escaños, conforme a las reglas anteriores, se asignarán a los partidos políticos del pacto que sí cumplan con los requisitos para integrar la Cámara de Diputados, de manera proporcional al número de votos obtenidos por ellos en el respectivo distrito electoral”, agrega el artículo, punto que fue uno de los elementos cuestionados por Tagle.

“A los independientes que integren una lista de un partido se les aplicarán las reglas del inciso anterior... El cálculo de los porcentajes señalados se hará según el escrutinio general practicado por el Tribunal Calificador de Elecciones”, concluye esa disposición.

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