La Haya: el contraataque de Evo Morales
Mandatario boliviano acusó al tribunal internacional de caer en contradicciones en su fallo y de haber actuado de manera parcial. Anunció el envío de cartas de protesta a la CIJ y a la ONU. Sobre Chile, afirmó que "no es posible que (la Corte) beneficie a los invasores".
Unos quince minutos antes de lo anunciado, a las 06.30 hora local, el mandatario boliviano Evo Morales llegó este martes a la base aérea de El Alto desde La Haya. En las afueras del hangar presidencial, pese al frío y la hora, lo esperaban una cincuentena de dirigentes sociales afines a su gobierno, quienes lo recibieron con una guirnalda de flores blancas y vítores, todo en una cuidadosa puesta en escena frente a los medios de comunicación para mitigar las críticas y cuestionamientos que han surgido de los propios bolivianos para que explicara la derrota sufrida en la Corte internacional de Justicia.
En el interior del hangar se encontraban la mayoría de los miembros del gabinete, el vicepresidente Álvaro García Linera, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general Yamil Borda y el general en jefe de la Policía, Fausto Mendoza, con los que procedió a realizar en el mismo lugar una reunión extraordinaria de gabinete que se prolongó por más de una hora y media, en los que analizó la situación interna boliviana y el impacto del fallo.
Según lo anunciado la noche anterior por el Ministerio de Comunicación, Morales daría una conferencia de prensa en el mismo hangar para dar a conocer los pasos que daría Bolivia. Pero en vez de eso, abordó el helicóptero presidencial y se dirigió hasta el edificio de gobierno. Allí volvería a reunirse con algunos de sus ministros y principales asesores por varias horas más. Todo lo cual daba cuenta de la dificultad del gobierno para dar cuenta de lo que había ocurrido.
El silencio gubernamental, agudizó las diferencias que ya se están manifestando entre los bolivianos, los que, pese no asimilar aún del todo el golpe, comenzaron a pasar la cuenta al mandatario por la derrota.
Recién a las 13 horas, Evo Morales habló. Lo hizo en el piso 14 de la nueva sede de gobierno, con una declaración en la que evitó expresamente mencionar las palabras fallo o sentencia judicial. Para Morales se trata simplemente del "informe" de los jueces a los que acusó de caer en contradicciones y de "parcializarse" (sic) en favor de algún grupo. "Quiero decir a la CIJ, duele mucho a un pueblo, si la Corte Internacional de Justicia es para los pueblos o para otros sectores", dijo al anunciar que "había decido personalmente" enviar una carta al presidente de la Corte y a la ONU para denunciar una supuesta imparcialidad en el actuar de los magistrados y demostrar "las contradicciones de las parte considerativas y su decisión de no acompañar, de hacer justicia a Bolivia", dijo el mandatario en una inesperada arremetida contra la Corte.
El mandatario boliviano no explicó cuando enviaría estas misivas, iniciativa que fue criticada de inmediato por dirigentes políticos y expertos en derecho internacional bolivianos, entre ellas la abogada y master en derecho penal internacional Karen Longaric (ver entrevista).
Aunque Morales afirmó que respetaban, pero no compartían el fallo, insistió en que estaba "sorprendido por el informe de la corte, porque tiene muchas contradicciones".
Para justificar sus dichos, leyó algunos párrafos del dictamen de la corte e 2015 por las objeciones preliminares, en los que se reconoce que Bolivia tenía costa y que el tema del acceso soberano al mar no estaba resuelto, comparándolos con el dictamen del lunes pasado, en el cual los magistrados por mayoría de 12 contra tres, rechazaron todos y cada uno de los argumentos esgrimidos por Bolivia, sin explicar que se trataba de casos distintos. "Si eso dicen en los antecedentes y por qué falla todo lo contrario. O la Corte ha fallado de verdad, se ha equivocado", señaló. "Es una sorpresa que una Corte Internacional de Justicia no haga respetar derechos ni haga justicia con los pueblos", remarcó.
Morales criticó también a los jueces de la CIJ por señalar que el fallo no era un obstáculo para seguir adelante con el diálogo, pero no "acompañe ese dialogo". Lejos de flexibilizar algunas actitudes que había mostrado en el pasado frente a Chile, el mandatario boliviano volvió a endurecer el tono al anunciar que había ordenado a la Diremar investigar el costo económico que había significado el enclaustramiento de Bolivia desde 1879 hasta ahora. Además, también en alusión a Chile, afirmó que "no es posible que (la Corte) beneficie a los invasores".
En contraste con esta estrategia de Morales, la que fue calificada por sectores de la oposición como un intento de victimación por parte de mandatario, para eludir las críticas internas por la derrota, el ex presidente y ex vocero de la demanda marítima, Carlos Mesa, planteó que "con el espíritu templado, Bolivia respeta el fallo".
Complejo panorama interno
El clima político interno en bolivia se ha ido polarizando tras el fallo.
En Plaza Murillo, frente a la sede del Congreso, parlamentarios de oposición y abogados internacionalistas exigían a Morales dar una explicación. "El Presidente debe dar una explicación, debe pedir perdón, porque el derrotado es Evo Morales, pues el manejó este tema como parte de su campaña política. Él debe asumir el costo político de esta derrota y debe pedir disculpas", manifestaba el experto constitucionalista Williams Báscope. "Debemos conocer todos los antecedentes del caso, porque cuando fueron los alegatos la transmisión oficial cortó la exposición de los argumentos chilenos y no pudimos prever que se nos venía esto", añadió.
Para el senador Yerko Núñez "el pueblo boliviano está pidiendo una explicación del gobierno de Morales. El gobierno debe redireccionar las cosas. Debe dejar de hacer política interna con esto y buscar las vías diplomáticas para encontrar un acercamiento con Chile, creo que el mensaje del lunes en la noche del presidente Piñera abre el camino para buscar un diálogo, porque los bolivianos no vamos a descansar en el tema marítimo".
Antes de que Morales hablara, quien se pronunció fue el ex presidente Jaime Paz Zamora, quien viajó dese Tarija a La Paz especialmente para dar una conferencia de prensa. "Con Chile de mar basta", indicó. "Hemos disparado mal, hemos quemado mal nuestro último cartucho", dijo. Recordó que el lunes 17 de octubre, en la última reunión antes del fallo de los ex presidentes y ex cancilleres con Morales, le advirtió de esta derrota. "Le dije que debíamos cambiar de rumbo (…) Le dije que La Haya debía ser un punto de acercamiento con Chile y todo lo contrario como ocurrió. Le dije Presidente usted es el primer culpable, porque usted fue el que llevó este tema a la confrontación. Que mostrábamos debilidad ante la corte cuando se infringen los referéndum, cuando el litigio ante La Haya se lleva al lado de un proceso de división interna, cuando se electoraliza La Haya".
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.