Ministro Cordero: enmienda republicana en favor de presos por causas de DD.HH. afecta tratados internacionales

“Las personas mayores de 75 años o que padezcan enfermedades terminales, debidamente calificadas, cumplirán la prisión preventiva, presidio o reclusión en su domicilio. Esta disposición solo será aplicable a aquellos casos en que la conducta sancionada no represente un peligro actual para la sociedad”, dice una de las casi 400 enmiendas ingresadas por la bancada republicana del Consejo Constitucional, para modificar el anteproyecto elaborado por el Comisión Experta.

En concreto, los representantes del partido fundado por José Antonio Kast ingresaron una indicación que modifica la forma de cumplir las penas efectivas para quienes tengan más de 75 años o estén gravemente enfermos.

El ministro de Justicia, Luis Cordero, abordó desde el Congreso dicha indicación, asegurando que, en su mayoría, beneficiaría a personas condenadas por causas de derechos humanos, lo que atentaría contra tratados internacionales.

Según detalló el secretario de Estado, de las 50.000 personas privadas de libertad en el país, 265 corresponden a mayores de 75 años, y de este número, 145 cumplen condena por violaciones a los derechos humanos.

Consultado acerca de si la enmienda ingresada por los republicanos tiene como fin beneficiar a este tipo de personas privadas de libertad, Cordero dijo: “Yo creo que esa cifra lo dice todo”.

“Si se analiza solo la relación proporcional de los datos, en que 265 personas son mayores de 75 años, y de ellas 145 o 146 están privadas de libertad por violaciones a los derechos humanos, la respuesta es bastante obvia”, agregó.

Luego se le preguntó si esta modificación permitiría que personas que cometieron delitos graves “salgan en libertad”, es referencia a que se propone que el cumplimiento sea domiciliario.

“El detalle específico uno tendría que analizarlo en casos concretos, pero más o menos el orden de magnitud de las personas mayores de 75 años en general en el sistema y cuántas de ellas son condenados por violaciones a los derechos humanos dice bastante de los efectos que tiene esa enmienda en el sistema”, recalcó el ministro.

En ese sentido, el jefe de la cartera de Justicia planteó que “en opinión del Ejecutivo -de hecho, esta es una doctrina que se aplica también en indultos- los indultos en crímenes de lesa humanidad son inamnistiables y además tienen restricciones adicionales al otorgamiento de los beneficios”.

Finalmente, Cordero señaló que a su parecer “cada uno se debe hacer responsable de las enmiendas que genera, el efecto que esto tiene, el efecto general que tiene para los condenados”.

Horas antes, el ministro ya se había referido al ingreso de enmiendas por parte de las diferentes fuerzas políticas -en total superaron el millar-, asegurando que “varias reabren discusiones de principios de los 80′”.

“Yo diría que el elemento común es que se han abierto una cantidad de discusiones que nos ubica en un debate legal similar al que podíamos tener al principio de la década de los 80′”, dijo Cordero en entrevista con Radio Universo.