Desde el Palacio de La Moneda fue la presentación pública oficial del nuevo ministro de Justicia, Luis Cordero.

Fue el Presidente Gabriel Boric el encargado de presentar al abogado. Y, tras una breve declaración del Mandatario, el ahora secretario de Estado dio paso a su primera vocería.

La trama de los indultos -que provocó su llegada al gobierno, tras la renuncia de Marcela Ríos- fue el eje principal de las consultas.

La primera pregunta de la prensa fue sobre la posibilidad de revocar los indultos que otorgó el jefe de Estado y la legalidad de los decretos, ante la ausencia de información en los antecedentes penales de los beneficiados. Un hecho que le valió cuestionamientos al gobierno, y por el cual sectores del mundo político solicitaron que se retrotraigan los indultos.

“Fíjese que no me había imaginado esa pregunta... pero, en estricto rigor yo vengo de un viaje de 24 horas, escala incluida. Mi primer arribo es a La Moneda, todavía no llego al Ministerio de Justica, quiero llegar al Ministerio de Justicia, conocer a todo el mundo, y una vez que tenga todos los antecedentes podré responder a cada una de las preguntas”, declaró Cordero.

Ante la insistencia de profundizar en su respuesta, expresó: “Voy a responder como un viejo profesor de la práctica profesional y de la Corporación de Asistencia Judicial: papelitos primero, miramos los papeles y luego puedo responder”.

Y aunque evitó referirse en detalle a los beneficios otorgados, aseguró que “todos esos decretos están fundados, una cosa distinta es si uno comparte o no comparte los fundamentos, pero esa es una discusión que yo prefiero tener con detención más adelante”.

El nuevo ministro de Justicia, eso sí, reconoció que históricamente los indultos en Chile “desde su aplicación en la década de los 90 hasta hoy, habitualmente han sido conflictivos respecto del ejercicio, cómo se ejercen, la fundamentación”,

“Lo que quiero decir en términos simples, es que no es una situación simplemente contingente”, puntualizó y precisó que “la figura de los indultos es una figura en el sistema constitucional chileno de hace muchísimos años, de décadas, siglos”.

Además, descartó que la ejecución de esta facultad presidencial signifique una intromisión en el ejercicio de otros poderes del Estado.

“La potestad de indultar en ningún caso es intromisión en otro poder del Estado”, recalcó.

Y sobre la posibilidad de abrir o no un sumario administrativo una vez que se instale en las oficinas del Ministerio de Justicia, debido a las “desprolijidades” en la ejecución de los indultos otorgados por Boric, respondió que “quisiera ver bien los antecedentes”.

En su presentación, el secretario de Estado hizo una breve reflexión sobre su llegada al Ministerio de Justicia, una cartera que ha estado en el debate político durante los últimos días, a propósito de los indultos.

“Es difícil cuando le levanta el Presidente un llamado -reconoció-. Este es un sector que yo conozco, me parece que es un sector desafiante, es un sector que es mucho más que indulto y nombramiento de fiscal nacional, es donde están en juego una cantidad importante de servicios públicos que son claves para los ciudadanos de este país”

“Asumo como ministro de justicia del Presidente Boric, es cierto, pero asumo un Ministerio de Justicia que tiene 186 años”, agregó.

Además, junto con recordar que este 2023 se conmemoran 50 años desde el Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, aseguró que “hay muchas razones simbólicas, hay muchas razones relevantes que me parecen que hacen para mí significar un honor que el Presidente me hubiese convocado”.