Por segunda vez, este miércoles, fracasó un intento por exhumar los restos de Pablo Andrés Marchant Gutiérrez, miembro de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), quien murió durante un enfrentamiento con Carabineros en Carahue y fue enterrado ilegalmente en el predio Pidenco de Lumaco.

Encapuchados armados atacaron en el lugar a la comitiva de Carabineros, la Policía de Investigaciones y el Ejército, en una diligencia que según la fiscalía se había planificado durante varios meses, esto tras un primer ataque sufrido en septiembre del año pasado.

Pero, ¿Qué es lo que hace inexpugnable el predio para las policías? ¿A quién pertenece el fundo Pidenco?

El martes 13 de julio de 2021 se realizaba en Pidenco el funeral de Pablo Marchant, llamaba la atención la gran cantidad de encapuchados armados y también, entre los discursos, el del líder de la CAM, Héctor Llaitul.

Pero el nombre de ese fundo había aparecido mucho antes en las crónicas policiales. En junio de 1999 ya se mencionaba en la prensa al predio –”ubicado a 140 kilómetros de Lumaco”- por un ataque incendiario.

En entonces se hablaba de un hecho ocurrido durante la noche de un sábado donde un “grupo de mapuches” incendiaron un excampamento forestal, ubicado en el lugar, dejando destruidas cinco casetas de madera que en su momento sirvieron de dormitorios a los obreros contratados por la empresa Bosques Arauco, propietaria del predio. Ese mismo grupo habría sido autor en 1997 de la quema de tres camiones cargados con madera.

En junio de 2012, Soytemuco informaba de que comunidades mapuche ocupaban las tierras del fundo Pidenco “ubicado a 4 kilómetros del camino que une a Lumaco con Capitán Pastene, pertenecientes a la Forestal Arauco”

El terreno comenzó a ser ocupado por dirigentes mapuche de las comunidades Reiman Punolef, Jose Luis Paillali y la comunidad Pililmapu con cerca de 200 personas.

El lugar de propiedad de la Forestal Arauco, tiene más de 2 mil hectáreas, tiene conexión con comunas de La Araucanía y Biobío y según se informó en su momento por parlamentarios de la zona, fue un recinto donde vivió el líder de la CAM, Héctor Llaitul.

Tras el funeral de Marchant en 2021, varios salieron a cuestionar el hecho de que el predio fuera un reducto intransitable para el Estado de Chile.

“La cantidad de armas y de personas portándolas, que vimos en fotografías y videos del funeral, hablan de un inmenso poder de fuego”, señaló en su momento la senadora Carmen Gloria Aravena (Partido Republicano).

A su vez, el senador Felipe Kast sostuvo que “las similitudes entre Pidenco y Temucuicui son una información que deben tener los organismos de inteligencia, pero no cabe duda de que la expansión de estos grupos dedicados al crimen organizado y la violencia va mucho más allá”.

El viernes 10 de junio de 2022, Llaitul, durante el lanzamiento de la versión ampliada del libro con los fundamentos de la CAM en Peñalolén se hizo acompañar por la vocera del lof Pidenco Lumaco, Orfelina Alcamán, quien recordó a una figura de Marchant y explicó que: “este trabajo que hemos ido desarrollando permitió ir reconstruyendo ciertos espacios específicos como los menokos (sitios sagrados) que ahí están, el mismo eltún (cementerio) que tenemos ahí donde está nuestro lamien Toño hoy día, donde está Pablo Marchant”.

Asimismo, la mujer sostuvo, según recogió ExAnte, que “siempre se nos dice que nosotros rompemos reglas, que estamos fuera de (la) ley, pero sin embargo esos territorios siempre estuvieron ahí. Ahí dejaron los cementerios nuestros kuifikeche (antepasados). Y Pablo hoy día está ahí”.

Alcamán habló esa jornada en Peñalolén, incumpliendo su arresto domiciliario total por una causa por porte ilegal de municiones ya que había fijado su domicilio en La Araucanía.

Respecto del incidente particular ocurrido este miércoles, se trataba de una diligencia solicitada por la madre de Marchant, Miriam Gutiérrez. La mujer rechazó los peritajes realizados por Servicio Médico Legal (SML) que sostuvieron que el joven estudiante de antropología, de 28 años, murió en un enfrentamiento con Carabineros en el marco de un procedimiento policial realizado en el fundo Santa Ana Tres Palos, de la Forestal Mininco, el 9 de julio de 2021.

Las primeras informaciones respecto a la jornada en que falleció el integrante de la CAM daban cuenta de la muerte de Ernesto Llaitul Pezoa, hijo del líder de la organización, Héctor Llaitul. En el fundo había personal policial cumpliendo una medida de protección. Cerca de las 18.00 horas de ese viernes 9 de julio de 2021, siete personas encapuchadas irrumpieron en la faena de Forestal Mininco y atacaron a trabajadores. Uno de los carabineros que venía a relevar a los uniformados de punto fijo abrió fuego e impactó en la cabeza a uno de los encapuchados.

El resto de los asaltantes se dio a la fuga y escapó hacia un terreno boscoso. A metros del lugar, el trabajador forestal Ceferino Alberto González estaba gravemente herido y tres maquinarias habían sido incendiadas. Junto al cuerpo del comunero abatido había un fusil M-16.