Quién es quién en las negociaciones de la izquierda y la derecha por las elecciones municipales
En el oficialismo más la DC, han pasado al menos 43 personas por la mesa negociadora de unidad, pero son pocos quienes han marcado las tratativas. En la oposición, en tanto, han velado por la cautela de sus conversaciones, las que han debido coordinar a Chile Vamos, al Partido Republicano y a Demócratas con Amarillos por separado.
A contra reloj se encuentran los partidos políticos de cara a la inscripción de primarias del próximo 10 de abril.
Para destrabar los nudos, las distintas colectividades han intensificado sus conversaciones, considerando que el tiempo les juega en contra y buscando los mayores acuerdos con miras a conseguir su objetivo de obtener la mayor cantidad de alcaldías y gobernaciones regionales el próximo 27 de octubre.
Los imprescindibles del oficialismo
En la sede del Partido Socialista o la Democracia Cristiana. Esas son las dos bases de operaciones que el oficialismo ha destinado para realizar sus negociaciones por las elecciones municipales de octubre de este año. Dichas conversaciones empezaron el pasado 25 de enero y, desde ese momento, son al menos 43 los dirigentes que se han sentado en la mesa a discutir los criterios con los que los 10 partidos del oficialismo, más la DC, pretenden llegar a la “unidad”.
El esquema oficialista es claro. Si bien hoy son los 11 presidentes de partido quienes tienen la última palabra, lo cierto es que para llegar a ese momento las tiendas del sector han debido pasar por tediosas jornadas de conversación, en las que participan los secretarios generales y los expertos electorales de cada colectividad.
Estos últimos son quienes han tomado protagonismo estas semanas, ya que son los que proyectan las pretensiones de las colectividades, sacan los cálculos de electividad y se transforman en los principales orejeros de los timoneles y secretarios generales de cada partido.
Los expertos electorales son fieles convidados a los encuentros en el PS o en la DC. Entre ellos, de hecho, se encuentra Hernán García (PS), quien administra el Excel en el que los 11 partidos inscribieron sus pretensiones electorales en las 345 municipalidades del país, desde Arica a Magallanes.
Si bien todos los negociadores tienen acceso a ese Excel, lo cierto es que sin la venia de García no se pueden aplicar modificaciones a la hoja de cálculo, las que el socialista se encarga de avisar a todos los partidos. De hecho, sin su presencia, el martes pasado las colectividades no pudieron avanzar, por temas técnicos.
En el PS, Hernán García sucedió en la denominación de “experto electoral” a figuras como Mahmud Aleuy y Andrés Santander, dos históricos del socialismo en aquella posición clave.
Otro personero con influencia dentro de la mesa es Pablo Monje, encargado de la comisión electoral del Partido Comunista desde el 2009 y uno de los defensores de la premisa de campaña “vota confiado, vota comunista”, que viene desde los 70 y que se puso a prueba con la consejera constitucional y segunda mayoría en 2023, Karen Araya. Ese eslogan, estos años, le ha traído réditos a su partido en el rendimiento en las urnas.
Sindicado como un hombre del “aparato” comunista, Monje fue muy cercano al difunto timonel PC, Guillermo Teillier, y hoy trabaja codo a codo con Lautaro Carmona, Bárbara Figueroa y Juan Andrés Lagos, quienes han acudido a las reuniones.
Monje es también uno de los responsables de que el PC decidiera competir por un poco más de 80 municipios y las gobernaciones regionales del país, en donde apuntan principalmente a la RM y a Coquimbo. Esto, a contrapelo de las zonas por las que han apostado en el FA (más de 160 alcaldías), PS (140) o el PPD (170).
En Convergencia Social -la colectividad del Presidente Gabriel Boric-, quien se ha encargado del equipo electoral es la cientista política Magda Cottet. A dicho espacio llegó en las pasadas elecciones de consejeros constitucionales, en las que CS eligió cuatro de 50 escaños y logró la tercera mayoría nacional mediante Yerko Ljubetic.
En esa pasada, la tienda jugó sus cartas en línea con representar la marca del Presidente Boric, algo que han buscado dejar de depender para estas municipales, con el objetivo de lograr su ansiado crecimiento a nivel local.
Cottet, también asesora legislativa de Convergencia, ha jugado un rol en esto, asistiendo a los encuentros junto a Ximena Peralta o Lorena Meneses. Del equipo que lidera la cientista política -quien pertenece al bloque interno “De Cordillera a Mar”, de Diego Ibáñez-, también ha tenido presencia Catalina Trincado, hija del hoy renunciado exasesor del Ministerio de Vivienda, Ricardo Trincado.
En representación de los intereses del partido del Presidente Boric también ha asumido un papel, sobre todo en conversaciones bilaterales, el jefe del departamento de Análisis y Estadísticas de la Subsecretaría del Interior, Matías Delgado.
Otras figuras que también han resaltado dentro de las conversaciones son Nicolás Valenzuela (RD), junto a Tatiana Urrutia y Javiera López; el expresidente del Partido Liberal, Patricio Morales; o el histórico PPD, René Jofré.
A las convocatorias del oficialismo también han acudido como expertos electorales Lilet Rosas y Juan Carlos Paillalef, por el Partido Radical; Joaquín Orellana y Pedro Concha, por la DC; Rodrigo Cerda y Patricio Neira, por la FRVS; Óscar Oyarzo, por Acción Humanista; o Carolina García, por Comunes.
Más allá de los expertos electorales de cada partido, también han asumido un rol activo en las reuniones secretarios generales como Alejandra Krauss (DC), Bárbara Figueroa (PC), José Toro (PPD) -quien ha discutido con el Frente Amplio- o Camilo Escalona (PS). Este último, en particular, ha protagonizado diversos cruces con negociadores de otros partidos, como la vez en la que apuntó contra los comunistas por Pudahuel o contra los liberales por Arica.
Reservados negociadores de la derecha
Esta semana se reunieron, del lunes al jueves, María José Hoffmann, Andrea Balladares y Juan Carlos González, secretarios generales de la UDI, RN y Evópoli, respectivamente. Y es que, de momento, ellos son los protagonistas de las negociaciones que llevan a cabo los partidos de la coalición.
Hasta el momento, el diseño es que los presidentes de partido -Javier Macaya (UDI), Rodrigo Galilea (RN) y Gloria Hutt (Evópoli)- se involucren cuando haya que destrabar nudos complejos de comunas emblemáticas. De todas maneras, los timoneles también han estado pendientes, conociendo en todo momento en qué van las tratativas.
Pero debajo de los secretarios generales existen equipos alternativos por cada partido. Algunos los llaman el “equipo B” en jerga futbolística, pues son funcionarios de las colectividades que se juntan para negociar con los otros partidos y ver comuna por comuna. Pero la función de ellos corre cuando los secretarios no están disponibles o cuando se trata de comunas con menor dificultad para resolver.
En ese grupo, por ejemplo, está Jaime Coloma, por parte de la UDI; el prosecretario de RN Gerardo Castillo; y por Evópoli están el senador Felipe Kast, la extimonel Luz Poblete y el exencargado de campañas José Ignacio Moreno.
Otras fuentes de la derecha sostienen que, además, han intervenido algunas figuras que están por sobre la coalición, como el exsubsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla (RN), quien suele medir escenarios electorales desde Libertad y Desarrollo, aunque otros le restan incidencia a su rol.
La dinámica de negociación ha convertido a Chile Vamos en un puente con el resto de las colectividades de oposición. Así, por ejemplo, esa coalición se ha reunido con Demócratas, con el PDG y con Amarillos, y, en otras instancias, lo hacen con el Partido Republicano. Sin embargo, todavía no ha habido una “gran” reunión entre todos, pues hay reticencia en republicanos y en las fuerzas de centro a aparecer juntos en una misma mesa.
En el sector le restan importancia a que sus tratativas no sean tan públicas como las del oficialismo, las cuales tienen -por lo general- presencia de la prensa. “Es un trabajo silencioso y menos público”, reconoce una fuente, mientras que otra plantea que en la vereda de enfrente lo hacen “para la foto”, ya que de todas formas se levantan candidatos entre ellos.
Lo más probable es que habrá primarias en algunas comunas, pero estas solo abarcarán a Chile Vamos y no al Partido Republicano, pues ellos irán en un pacto distinto. De todas maneras, habrá pactos por omisión en las elecciones de alcaldes entre ambos.
Además, hasta el minuto, cada partido de Chile Vamos iría solo en la lista de concejales -que utilizan el sistema proporcional diferente al método electoral con se elige a los alcaldes- mientras que en gobernadores se espera que haya competencia entre Chile Vamos y el Partido Republicano, pues dichos comicios implican una segunda vuelta, lo que desdramatiza la dispersión de votos.
Con todo, los negociadores han estado trabajando en base a los nombres que han surgido de cada partido desde las directivas regionales, como desde los comités electorales internos.
En la UDI recalcan que tienen un diseño que contempla tres áreas: comités de búsqueda regional, comité electoral y mesa negociadora. El departamento electoral del partido lo conforman Jaime Coloma, Jorge Manzano y Eduardo Cretton, exconvencional de la tienda del primer proceso constitucional.
RN tiene un comité electoral que funciona todos los jueves en el que participa la directiva, jefes de bancada del Congreso Nacional e integrantes de la comisión política.
En Evópoli, por su parte, primero hubo un trabajo del comité electoral y ahora es Felipe Kast quien lidera las negociaciones con el resto de los partidos.
Hasta ahora, la negociación en Chile Vamos ha estado tensionada por discusiones en comunas como Las Condes, por la irrupción de Marcela Cubillos, y Lo Barnechea, donde este miércoles el Partido Republicano anunció a Pedro Lea-Plaza como candidato, y también porque aún no se definen nombres en comunas importantes como Maipú, Santiago, Ñuñoa o Valparaíso.
Por otro lado, desde el Partido Republicano las negociaciones con Chile Vamos las lleva adelante el timonel, Arturo Squella, y la secretaria general, Ruth Hurtado, quien también es la carta del partido en Recoleta.
Además de esa comuna y Lo Barnechea, esta semana los republicanos golpearon el tablero y anunciaron que llevarán candidatos a alcaldes en Maipú, Peñalolén, Conchalí, San Bernardo, El Bosque, Cerrillos y El Monte.
Por su parte, el jefe de campaña del partido, Martín Arrau, es el que busca a los candidatos. Por ahora, el foco del partido está en posicionar a la mayor cantidad de concejales y cores, de forma que en el futuro estos puedan posicionarse como posibles cartas al Congreso.
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