Reforma al sistema político y pacto por el desarrollo sostenible: las propuestas del PPD para el último año de gobierno

“Crecer de manera sostenible es posible y necesario, el PPD invita a volver a creer y a colaborar para lograrlo”. Así se denomina el informe “Volver a creer, volver a crecer”, que este lunes y de manera reservada los asistentes a la comisión política del Partido Por la Democracia hicieron circular.

El documento es una iniciativa que busca plantear propuestas que contribuyan a reactivar el crecimiento económico del país a través de los ejes de crecimiento, seguridad, salud, pensiones y educación. Esto, de cara a ciertos desafíos que en la colectividad identifican, como “fortalecer la seguridad integral, mejorar significativamente nuestra educación y la capacitación laboral y hacer más eficiente la operación del Estado”. Entre otros internacionales, como la “asunción del Presidente Trump y su disputa con China”.

Originalmente había sido planteado como insumo para una eventual candidatura del partido a la presidencia, pero terminó por ser una propuesta para el último año de gobierno del presidente Gabriel Boric. El texto señala que las sugerencias de política pública presentes en él deberían implementarse “en el curso del presente año”.

Pese a ello, la entrega de este archivo se da en el marco de la última comisión política del PPD, en la que miembros históricos de la tienda, como Guido Girardi o Francisco Vidal, y la directiva encabezada por el senador Jaime Quintana, ratificaron a la ministra del Interior, Carolina Tohá, como la carta presidencial de la colectividad.

La elaboración de “Volver a creer, volver a crecer” había sido anunciada en diciembre por la mesa de la tienda, adelantando que involucraría diálogos con la militancia y que estaría a cargo de la comisión Proyecto país, conformada por el exministro Álvaro García, el exsubsecretario Víctor Barrueto, el exalcalde Gonzalo Navarrete y la vicepresidenta de la Mujer Daniela Barrera.

Para lograr su cometido, el informe plantea dos iniciativas centrales.

La primera es “reformar el sistema político para fortalecer la capacidad de alcanzar acuerdos” políticos, lo que involucra la aprobación del umbral de 5% de los votos para la existencia de partidos y evitar el “transfuguismo” de los parlamentarios, así “restaurando la confianza ciudadana en las instituciones y promoviendo la cohesión social”.

La segunda corresponde a “lograr un Pacto por el Desarrollo Sostenible” por medio de la creación de un consejo con ese propósito, el cual coordine el diálogo entre los principales actores nacionales, convenga las acciones a realizar, supervise su avance, sugiera correcciones y mantenga el rumbo a través de los ciclos políticos.

“Invitamos al gobierno a impulsar ya esta iniciativa, indispensable para recuperar el crecimiento y asegurar su sostenibilidad”, enfatiza el escrito.

Este pacto por el desarrollo se desmenuza en cuatro acuerdos:

El primero refiere a fortalecer la seguridad humana, “esto es enfrentar el crimen y atender con eficacia y responsabilidad las necesidades básicas de la población”.

El segundo pide aumentar la inversión para más y mejores empleos, a través de la rebaja al impuesto a las empresas, reduciendo al menos a la mitad los tiempos de trámite de proyectos estratégicos, esto sin incumplir la normativa vigente, y fortaleciendo la colaboración público-privada para asegurar coherencia en proyectos de inversión en minería, energía e hidrogeno verde.

“Mayor inversión y colaboración público-privada le abre a Chile la oportunidad de ser un país desarrollado de manera sostenible”, consigna el documento.

El tercer acuerdo busca mejorar las capacidades de chilenos y chilenas en educación y formación laboral, aumentando la calidad de la educación básica y también reformulando el “ineficiente sistema de capacitación laboral”.

Por último, el cuarto punto plantea generar un Estado más eficiente, responsable, transparente y probo, involucrando cambios en el estatuto administrativo; en el diseño, ejecución, evaluación y eventual discontinuidad de políticas públicas; y, por último, asegurando un balance estructural como muestra del compromiso con la responsabilidad fiscal.