Rojo Edwards y triunfo del En Contra: “ Los problemas de Chile no son constitucionales; esta mentira hoy quedó enterrada”
El senador, quien renunció al Partido Republicano y se opuso al proyecto del Consejo Constitucional, celebró el fin de los intentos de cambiar la Carta Magna, "cuatro años que nos empobrecieron y trajeron una crisis de seguridad de proporciones", dijo. Este cierre, agregó, sepulta "el estado socialista de derecho propuesto por la izquierda y algunos perdidos de derecha".
Animo de euforia y celebración. Abrazos, gritos, banderas chilenas. El senador Rojo Edwards, quien renunció al Partido Republicano y se decantó por el En Contra, celebró los resultados del plebiscito. Acompañado del diputado Gonzalo De la Carrera y rodeado de un grupo de partidarios, el parlamentario identificó el cierre del proceso con el “entierro del Estado socialista de derecho propuesto por la izquierda y ciertos perdidos de la derecha”.
“Con el entierro del segundo proceso constituyente, el descarte del Estado socialista de derecho y la creación de grupos privilegiados, con la derrota definitiva del octubrismo y del Presidente (Gabriel) Boric, vuelve la luz a nuestro país”, dijo Edwards.
El parlamentario estuvo acompañado de otros legisladores y recalcó que “los problemas de Chile no son constitucionales. Esta mentira hoy quedó enterrada con un resonante rechazo a todos esos líderes de izquierda y derecha que obligaron a los chilenos a estos penosos procesos”.
“Ojalá podamos reflexionar cómo estos cuatro años de procesos constituyentes tan innecesarios como dañinos nos empobrecieron y trajeron una crisis de seguridad de proporciones”, agregó.
Así, “con el cierre de este proceso una nueva esperanza de libertad, seguridad y progreso renacen”, aseguró y llamó a trabajar por las urgencias de la ciudadanía. También insistió en la creación de un frente libertario.
Agradeció a quienes siendo de oposición, asumieron la alternativa del En Contra, entre ellos Iván Poduje. Y cerró: “No se triunfa con ideas prestadas, ni cambiándose a medio camino, se gana con convicción, integridad y consecuencia. La libertad tiene un precio y es su eterna vigilancia, no solo de quienes la restringen por la izquierda, sino también de aquellos líderes que la transan por la derecha”. “La seguridad, la familia, la igualdad ante la ley y la chilenidad tampoco se transan”, agregó.
Finalizó recordando a Jaime Guzmán, autor de la Constitución, según su parecer, “más ratificada del mundo”.
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