Con cerca del 50% de los hogares chilenos en cuarentena, los niños están pasando mucho más tiempo del habitual en la casa. Así, las posibilidades de un accidente casero crecen exponencialmente. Más aún si muchas veces los adultos estamos concentrados en el trabajo a distancia.
Bastan solo unos segundos de distracción para que puedan ocurrir caídas, intoxicaciones, quemaduras o incluso asfixias. Estando 24/7 en la casa, los niños inevitablemente buscarán nuevas posibilidades de “entretención" o “exploración", lo que puede convertir objetos o ciertos lugares inofensivos del hogar en potenciales fuentes de accidentes.
Para prevenir y minimizar estas opciones, acá les damos una serie de consejos elaborados por el Hospital del Trabajador de la ACHS.
Menos caídas
-Mantener el suelo libre de obstáculos. Sabemos que no es fácil, pero intenta mantener el piso libre de juguetes, libros y objetos pequeños con los cuales es muy fácil resbalar o caer.
-Superficies secas y limpias. La cocina ha tomado un lugar importante en los días de encierro. Durante estos menesteres, intenta limpiar cada vez que se derrame algo o se ensucie el piso.
-Muebles lejos de las ventanas. Sillas, mesas o cajas son potenciales escaleras para que los niños se asomen peligrosamente por las ventanas y terrazas.
-Malla de seguridad: Si vives en departamento, recuerda que la malla de seguridad vence y se debe renovar cada dos años, dependiendo de la orientación de la vivienda. Nunca está de más chequearla.
Ojo con lo caliente
-Disposición de ollas. Cuando utilices tu cocina, procura mantener los mangos de cacerolas y sartenes hacia dentro, además de privilegiar los quemadores posteriores. Una gran solución son estos protectores de perillas Dreambaby, que impiden que los niños abran el gas de la cocina.
-Noción del agua caliente. Es importante enseñarles a los niños a utilizar el agua fría y caliente, explicándoles sus peligros.
-Niños alejados. Sabemos que no siempre es fácil, pero intenta mantener a los niños alejados de la zona de planchado y cocina. Una buena opción es marcar con cinta en el suelo una zona de seguridad, para graficar y delimitar hasta dónde pueden llegar.
Menos heridas y golpes
-Objetos cortantes. Cuchillos, tijeras o cualquier elemento con filo siempre deben estar guardados en lugares seguros. Repisas altas o cajones con sistema de bloqueo son las mejores opciones.
-Proteger las esquinas: Muchas mesas o incluso sillas tienes esquinas que pueden generar heridas o golpes. Busca protecciones de silicona para ellas, como estas Safety 1st. En caso de que no tengas, se pueden envolver en cartón y cinta adhesiva para hacerlas inofensivas.
-Remedios en su lugar: Al igual que los objetos cortantes, los remedios pueden generar más que curar un dolor de cabeza. Guárdalos en gabinetes con seguros o llave, no olvidando dejarlos en su lugar después de utilizarlos. Los mismo con los elementos de limpieza, que muchas veces contienen ingredientes tóxicos.