Artículo publicado originalmente el 23 de marzo pero actualizado el 13 de mayo de 2020.

En 2004, cuando no estaba preocupada de luchar contra la peor pandemia de los últimos cien años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un reporte nutricional. A partir de la evidencia de decenas de estudios, y para prevenir cánceres y enfermedades cardiovasculares, le recomendaba al mundo comer 400 gramos diarios de frutas y verduras. O sea, cinco porciones al día.

Si cumplir esa meta ya era difícil viviendo la libre vida moderna, con poco tiempo para comprar y menos aún para cocinar, en este momento distópico, donde solo se recomienda salir de casa para asomarse al balcón y aplaudir a los trabajadores de la salud por las noches, conseguir y comerse un plátano se hace toda una odisea.

La feria nunca fue el lugar más limpio del mundo, pero ahora con solo imaginarse a un casero salpicando saliva al gritar sus ofertas, o a una señora palpando las paltas y los melones, a uno ya empieza a sentir los síntomas del covid-19. Y el supermercado se ha convertido en una despiadada carrera para conseguir los últimos paquetes de fideos y papel higiénico. Por eso, el delivery dejó de ser la opción de los flojos para transformarse en lo mejor que podemos hacer por nosotros mismos y el resto de la sociedad.

A continuación, Práctico buscó 3 buenos datos a los cuales acudir si necesitas frutas y verduras:

1. La Vega Delivery

La Vega Delivery viene hace cinco años repartiendo frutas y verduras a domicilio en Santiago. Al comienzo iban literalmente a La Vega a comprar los pedidos, que eran en su mayoría para familiares y amigos, pero el emprendimiento creció tanto que hoy tienen su propia bodega con alimentos que obtienen directamente desde el productor.

Catalina Farías, una de las socias del proyecto, dice que la demanda durante estos días de coronavirus ha aumentado muchísimo, pero que siguen funcionando a toda máquina. Sus repartidores, que llegan a Lo Barnechea, Vitacura, Santiago Centro, Las Condes, La Reina, Ñuñoa, Providencia y un sector de Huechuraba, lo hacen con mascarilla, guantes y cargados de alcohol gel. Su protocolo de entrega también se adecuó a la emergencia, y solo dejan los pedidos en las conserjerías o entradas de las casas. La compra se hace en la web y los despachos son de lunes a viernes.

“Aparte del brócoli, que ha subido más de lo normal, hemos mantenido los precios”, cuenta Catalina, intentando mantener la calma de los clientes, que por miedo a la falta de abastecimiento, muchos de ellos piden más productos de lo normal. “Alimentos no van a faltar”, dice, y recomienda no acaparar frutas y verduras: al menos que se congelen, se dejen en conserva o se engullan ansiosamente, en unos pocos días se descompondrán.

2. Santiago Nativo

“Ayer contesté todos los correos y hoy al mediodía ya tengo 329 mails sin leer”, dice Mackarena Cornejo, la persona detrás de Santiago Nativo, un proyecto que lleva tres años despachando alimentos orgánicos. “En una semana normal tengo entre treinta y cuarenta, pero solo la pasada tuve noventa”.

La alta demanda y las limitaciones de movimiento le han dificultado un poco el trabajo. “Traemos todo desde San Felipe”, cuenta, “y trasladarse se está complicando, pero nos arreglamos igual”. Dice que subió la demanda de ajos y jengibres —”muy buenos para el sistema inmunológico”— y sugiere no pedir plátanos, mangos, piñas ni frutas importadas: “Están llegando menos”. Ya no ofrece, eso sí, las canastas que tenía a fines de marzo: “con ellas el stock de productos se me acababa muy rápido, así que desde ahora cada cliente se arma su propia canasta con los productos que prefiera”.

Debido a las limitaciones de movimiento por la cuarentena, los despachos se hacen martes y jueves, y los pedidos, que se realizan a través de la página web, se deben efectuar entre domingo y miércoles, para productos convencionales, y entre jueves y sábado para productos orgánicos. Su área de despacho incluye las comunas de Quilicura, Huechuraba, Lo Barnechea, Las Condes, Vitacura, Providencia, Ñuñoa, La Reina, Peñalolén, Macul y Santiago Centro. “Queremos agregar pronto La Florida, ya que hay mucha gente de ahí que nos está preguntando”, dice Makarena.

3. De la Feria a la Casa (solo Región de Valparaíso)

De la Feria a la Casa no discrimina por comunas. “Le hemos entregado a Raquel Argandoña y a la señora Jessica de Playa Ancha”, dice el emprendedor Sebastián Ballesteros. Entregan los lunes y jueves en la Región de Valparaíso —”desde el Puerto hasta Concón, desde La Cruz a Viña, pasando por Limache, Quilpué, Villa Alemana y Reñaca”— y dejaron de hacerlo en Santiago, forzados por las aduanas sanitarias.

“Las rutas se arman según los pedidos, da lo mismo de dónde vengan”, explica Sebastián, cuya demanda se duplicó en una sola semana. Especialmente su promoción “De todo un poco”, en la que por 15 mil pesos entrega una lista de indispensables que, para una familia de cuatro personas, puede durar unos quince días. “Esa promo es el 90 por ciento de mis pedidos ahora”.

Y hablando de porcentajes, el 70 por ciento de los productos que entrega De la Feria a la Casa los obtiene directamente del campo, y el otro 30 —que son hortalizas frescas como la albahaca o el cilantro— proviene de ferias mayoristas de la Quinta Región. Además, le hacen un descuento de dos mil pesos por pedido si el cliente es de la tercera edad o trabajador de la salud.

“Lo único que nos ha complicado es la incertidumbre”, cuenta Ballesteros, “no saber si mañana podremos seguir despachando. Pero por ahora les garantizamos a todos que las frutas y verduras estarán en sus casas”. A dos metros de distancia, eso sí.

4. La Verdulería Rodante

Cuando comenzaron las cuarentenas, a mediados de marzo, Ivonne Vásquez tuvo que cerrar su cafetería, ubicada en un edificio de oficinas en Las Condes, y desde entonces no la volvió a abrir. “Para no quedarme de brazos cruzados”, dice al teléfono, “comencé a realizar pedidos de frutas y verduras”. Asociada con su hermana Verónica, que tiene una pequeña empresa de transportes, lanzó La Verdulería Rodante, con la que recibe pedidos durante el día, los computa en la noche, compra a la mañana siguiente en La Vega y los reparte durante la tarde. “Si pides hoy, te llega mañana”, promete.

Tiene los salvoconductos necesarios para comprar y operar durante la cuarentena total y su cobertura de despacho es la Región Metropolitana completa. “Hemos ido hasta Malloco”, cuenta. Los pedidos, que se entregan entre martes y viernes, se solicitan por WhatsApp, desde donde se le compartirá al cliente una lista con los productos y los precios. “Compramos desde manzanas y plátanos hasta frutos secos y pickles”.

5. Verdulivery

Ante la cuarentena total, Verdulivery ofrece cobertura total. Envían a cada una de las comunas de Santiago, sin excepción, y cuentan con todos los permisos y salvoconductos para hacerlo. Solo el día de ayer, por ejemplo, entregaron mercadería a clientes en el centro, Recoleta, Ñuñoa, San Bernardo y Lo Prado. Las únicas excepciones son las comunas y sectores más alejados del Gran Santiago: Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, Padre Hurtado, Lampa y Chicureo.

Prometen un despacho en 24 horas y su catálogo no se queda solo en frutas y verduras: también tienen chocolates, dulces, snacks, frutos secos, abarrotes, detergentes y artículos de limpieza. Los pedidos se pueden realizar a través de su sitio web (www.verdulivery.cl) o también por WhatsApp, donde responden con mucha rapidez.