En la era pre-coronavirus, los puestos de teletrabajo, o trabajo remoto, se veían en muy raras ocasiones, solo en empresas u organizaciones más experimentales, pero en un santiamén, como efecto de la pandemia, pasaron a ser la realidad de muchos empleados en todo el mundo.

Incluso, hay quienes han comenzado en nuevos puestos laborales sin siquiera conocer presencialmente a sus equipos, y mientras bajan los índices de contagio también hay otras empresas que han adaptado un sistema híbrido, que mezcla la modalidad presencial con el home office.

Desafortunadamente, hay otras personas que a raíz de la pandemia han perdido sus trabajos: este virus, además de cobrar la vida de miles, ha afectado a muchos sectores de la economía, causando recesión y pérdidas de millones de empleos a nivel global. Un reciente estudio en el Reino Unido afirma que las perspectivas de trabajo para los más jóvenes han empeorado desde el inicio de la pandemia, afectando su bienestar. La investigación afirma que el 86% de los jóvenes de 22 a 26 años consideran que sus futuras carreras se han visto afectadas negativamente debido a las sucesivas cuarentenas, que les han frenado oportunidades.

Un 54% de los jóvenes encuestados expresó que la mayoría de los trabajos que les interesaban eran temporales o con contrato definido. Algo que coincide con el panorama chileno: Pulso reportó en julio que, si bien había un aumento de la oferta laboral en el sector privado, aún no se han podido llenar las vacantes creadas por la pandemia. ¿Será que las personas no se están luciendo lo suficiente en las entrevistas? ¿No hay match entre los profesionales y los cargos? Conversamos con tres especialistas en el rubro de la empleabilidad, quienes dieron sus consejos para tener una buena entrevista de trabajo por videollamada.

1. Lo básico

Jesús Atalaya es psicólogo organizacional, especialista en gestión humana y creador de contenido al respecto en LinkedIn, donde tiene más de 93 mil seguidores. A través de esta plataforma entrega consejos para quienes estén en búsqueda de empleo, los que suelen tener una alta tasa de compartidos.

La primera recomendación que hace es tener bien actualizado el curriculum vitae (CV). “Trabajar bien las últimas tres experiencias laborales en base a principales funciones, logros y alinearlos a las palabras clave del área en la que se está buscando trabajo”, sugiere.

Ya teniendo tu CV en orden, puedes seguir al siguiente nivel y llevarlo a otras plataformas laborales, como la misma Linkedin. “Dependiendo de si está orientado a prácticas, cargos medios o gerenciales, en las diferentes plataformas hay que mantener la misma información y alineada a lo que buscamos”, apunta.

2. Hacerse las preguntas esenciales

“La pandemia vino a derribar muchos paradigmas”, dice Javiera Palma, cofundadora de la consultora Fibra. Uno de ellos “es que profesionales muy bien valorados perdieron sus puestos y se vieron forzados a salir a buscar trabajo o incluso a reinventarse”.

“Hay muchas personas talentosas buscando trabajo, y muchas de ellas hoy han decidido salir voluntariamente de sus trabajos”, dice. Ya sea forzados por las circunstancias como también porque la pandemia puso a prueba ciertos principios y valores de las organizaciones —como la flexibilidad o solidaridad con sus empleados—, “algo que algunos no estaban dispuestos a transar”, agrega.

En este nuevo escenario, para ella es importante que antes de postular a un trabajo se respondan las siguientes preguntas: ¿Para qué soy bueno?, ¿Qué quiero hacer? y ¿Dónde o cómo tiene que ser ese espacio de trabajo? “Esos serán los drivers que guiarán la búsqueda y asegurarán que llegues al lugar adecuado”, afirma. De esta forma, “postularás a los trabajos que realmente te hagan sentido y por lo tanto darás mejores entrevistas”.

Cuando postulas por default, “pierdes el norte” y te ofreces a cosas que muchas veces no están en sintonía con lo que buscas, generando falsas expectativas y cometiendo errores con las elecciones”, advierte.

3. Ordena tus ideas

Para Palma, cuando uno se enfrenta a una entrevista de trabajo a distancia es muy importante disponerse y prepararse emocional y cognitivamente para responder con atención a lo que preguntan. “El hecho de que la realices en el mismo espacio donde llevas a cabo tus actividades cotidianas te obliga a hacer una mayor preparación para la entrevista”.

Siguiendo con las preguntas, ella sugiere hacerse las siguientes inquietudes antes de una entrevista: ¿por qué estoy aquí?, ¿qué dudas tengo respecto al proceso?, ¿qué puedo ofrecer yo en la posición a la cual postulo?, ¿cuál es la experiencia relevante que tengo?. “Es importante que clarifiques cuáles han sido tus logros previos y las historias que dan cuenta de ellos”, dice. Así es más fácil responder con seguridad y confianza, dejando menos espacio a la improvisación y los errores.

4. Conversación amena

Matías Palacios, director ejecutivo de smartplacement.net, enfatiza que es importante el ritmo con el que se desarrolla la entrevista. Para eso hay que “prepararse súper bien, estudiar la empresa, llevar preguntas inteligentes preparadas y un discurso solido”.

Un consejo que suele darle a sus clientes es que, para las entrevistas en videollamada, puedan fijar la vista “no en la pantalla sino en el puntito verde o rojo de la cámara, porque así estaremos mirando a los ojos a nuestro entrevistador”.

Cuando estés en esta instancia de conversación, es importante silenciar o poner en modo avión el teléfono, para que la comunicación no se interrumpa. “Si convives con otras personas, pedirle a los demás integrantes de la casa que no entren a pedirte nada, que no griten y que tampoco jueguen videojuegos mientras dure la entrevista, ya que consumen mucho internet y puede afectar la fluidez de la videollamada”.

5. Prepara el espacio

Antes de una entrevista, no solo hay que preocuparse de lo que se va a hablar sino que también del ambiente en el que esta va a suceder. “Evita el ruido ambiente, asegura una buena conexión a internet y considera la luz”, dice Palma, porque la persona que está entrevistando no quiere ver una silueta. “Tu cuerpo también habla, incluso a través de la pantalla”, agrega.

La importancia de no ser interrumpido es fundamental, porque “cualquier intermisión podrá desconcentrarte de la entrevista, y como el entrevistador no está en el mismo espacio, perderá información relevante o sacará conclusiones equivocadas”, añade la cofundadora de Fibra.

“Hay que tratar de estar lo más presente y conectado posible con el entrevistador, gestionando la mayor cantidad de variables para asegurar que la conversación sea fluida”, puntualiza.

6. Prioriza outfits básicos

Dicen que “menos es más”, y en cuanto al atuendo que selecciones para esta videollamada importante, Palacios sugiere preferir prendas básicas del busto hacia arriba. “Usar todo lo que calce bien, preferir colores lisos y evitar las camisas con rayas, porque estas vibran en la pantalla”, comenta.

“Nuestra marca personal o imagen es la que puede hacer la diferencia muchas veces en la toma de una decisión”, complementa Atalaya.


7. Actitud positiva y ensayos

Jesús Atalaya ha visto durante estos meses que muchos reclutadores no prenden la cámara, “lo que desde el otro lado puede generar nerviosismo en el postulante”, cuenta el psicólogo organizacional. Frente a este tipo de situaciones, sugiere estar un paso adelante, por lo que “pueden practicar con el espejo o con el mismo celular, ya que muchos evalúan la conducta no verbal y es importante que el mensaje y la kinésica coincidan”, detalla.

Según él, a una entrevista hay que entrar siempre con una actitud positiva, sabiendo escuchar pero también dando nuestra opinión. “Conviene preguntar, por ejemplo, cuáles son los retos de la organización y mostrar una predisposición a ser parte de esta familia organizacional”, sugiere.

8. Conectarse con el computador y no con el teléfono

Es vital “asegurarse de tener buena señal de internet, idealmente con el computador conectado por cable al módem, para así tener una mayor estabilidad de señal. Si no se puede, no es mala idea compartir la señal del celular”, analiza Palacios. Jamás, eso sí, conectarse a la llamada a través del smartphone.

“Si se usa el teléfono, podríamos estar en medio de la entrevista y de la nada nos fallan los datos o se ingresa a una llamada y se corta la conversación”, añade Atalaya.

Otros consejos asociados a búsqueda de empleo

-Lleva un control de tus postulaciones

Atalaya sugiere a todo postulante mantener un registro de todas las solicitudes. “Al enviar una postulación, siempre recomiendo llevar un control de ellas, ojalá en una planilla de datos, detallando el día que hemos postulado, el nombre de la empresa, el cargo y el salario, además de los beneficios”, comenta. También sugiere hacer una captura de pantalla de las ofertas, porque “muchos reclutadores después eliminan esta información y es bueno tenerlo a la mano si es que eres contactado”.

-Investigar

El psicólogo organizacional también propone “alinear la preparación de la entrevista a las funciones que busca el cargo: es decir, leer la misión, visión y valores de la empresa, además de cuáles han sido sus avances o políticas en este periodo de pandemia”. Si manejamos esa información, podremos “sorprender al reclutador”.

-Sobre el reclutador

En oportunidades, el primer filtro de entrevista lo realiza el reclutador, que puede ser tanto de recursos humanos de la misma empresa o puede ser una persona externa que le brinde estos servicios. “Aconsejo revisar el perfil de la persona que te va a entrevistar, ojalá el de LinkedIn”, dice Atalaya. Esta información puede ser valiosa si están buscando “puntos en común que se pueden tocar en la entrevista, y así tener una más rápida familiarización”.

-Prepara la pregunta pandémica

Probablemente, unas de las preguntas que se abarque en la entrevista sea: ¿cómo has afrontado la pandemia y el confinamiento? ¿Cómo has afrontado el estrés o el hecho de estar lejos de familiares y amigos? Tener esta respuesta preparada puede servir para reducir la incertidumbre.

-Baraja la opción del outplacement

Además de los portales de empleabilidad o de redes como LinkedIn, puedes optar por asesorarte con empresas expertas en outplacement, donde es posible ahorrarse tiempo y además aumentan muchísimo las probabilidades de encontrar algo más parecido a lo que se pretende.

“Un programa personalizado siempre es lo más recomendable si quieres tener éxito”, comentaba Christopher Niedbalski, director de outplacement & job hunting en Coworking People, en otro artículo sobre empleabilidad. “Ahí se trabajan y refuerzan aspectos trascendentales de tu perfil profesional que no podrían tratarse en otras instancias”.

-Potencia tu LinkedIn

“La plataforma que abre hartas puertas es LinkedIn, donde figuran varias vacantes tanto a nivel país como a nivel internacional”, dice Atalaya, quien en este periodo ha tenido candidatos que, estando en Perú, Colombia o Chile, están hoy trabajando de manera remota para clientes en Canadá, Estados Unidos o Suiza, entre otros países.

“Las oportunidades se están dando”, expresa el psicólogo, y por lo mismo recomienda “ver fuera de la caja, fuera de nuestro país, porque si nos quedamos en buscar empleo en las bolsas tradicionales, nos estaríamos perdiendo muchas chances”. En el caso de Atalaya, esta ventana le ha permitido encontrar nuevos clientes, además de dictar talleres en Perú, Argentina y España.

Al momento de crear una cuenta de LinkedIn, él sugiere “crear un perfil de impacto, con foto profesional, además de agregar a nuestro entorno más cercano, como a la comunidad universitaria o a los contactos de las organizaciones, empresas o firmas en las que hayas trabajado”.

“En base a esta información, LinkedIn te va a dar opciones para seguir ampliando tu red”, cuenta. Por eso, él siempre recomienda agregar a profesionales con similitud en cargos, además de empresas. “Uno debe trabajar en el perfil, pero de igual manera es importante crear esta red de contactos —también en parte por el algoritmo de la plataforma— para generarle más valor”, puntualiza.

-Fijar una estrategia de búsqueda de trabajo

Buscar trabajo toma tiempo y constancia. Tal como en tu vida laboral, debes hacer el hábito de establecer un horario definido para hacer las búsquedas. “Hay que generar una estrategia”, enfatiza Atalaya, y tratarlo como si fuera un empleo en sí mismo, por lo que “si yo comienzo a las 6 de la mañana, por ejemplo, debería estar hasta las 4 de la tarde, por supuesto con un descanso y hora de almuerzo”.