Ya que estamos en momentos de encierro, es momento de probar las maravillas de internet que supuestamente nos ayudan a solucionarlos la vida. Sí, estamos hablando precisamente de ese submundo de trucos de la web que debiesen funcionar en la realidad real.

En este primer volumen exploraremos esa dimensión llamada cocina, testeando 10 trucos que en la internet aseguran que funcionan. Así nos fue.


1. Para no llorar: congelar la cebolla 30 minutos

En un artículo de BuzzFeed, que estaba dedicado 100 por ciento sobre la cebolla y el llanto, probaron distintas técnicas y métodos para no sollozar con la cebolla. Uno de los más efectivos tenía que ver con congelarla por 30 minutos antes de usarla.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Funcionó, pero es raro. La cebolla está más dura, por lo que puede ser un poco complejo si no tienes el cuchillo adecuado. Lo mejor que puedes hacer es sacarle la primera capa, porque puede estar un bastante congelada, sobre todo si tu refrigerador es potente. Les puedo asegurar que ninguna lágrima fue derramada por esa cebolla.


2. Congela tus gomitas para intensificar sabores

Personalmente, pensé que esto se trataba de un truco inservible. En otro artículo de Buzzfeed prometían que sí congelabas los ositos de gomitas por dos horas, se intensificaba su sabor.

Sin ninguna fe, metí a una familia de osos al congelador, y otra la mantuve a temperatura ambiente. El testeador acá fue mi pareja, ya que es fanático de las gomitas desde el primer momento que las probó en su infancia.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Efectivamente, los sabores de los ositos sí se intensifican. Al parecer, al congelarse —solo un poco— la parte dulce se concentra y por lo mismo los sabores son más intensos. Fanáticos de las gomitas: háganlo, no pierden nada. La única advertencia es que los ositos tienen que estar congelados no más de dos horas. Si se pasan, quedan duros como palo. La misma técnica se puede aplicar a las uvas.


3. El agujero de la tabla de picar tiene un propósito

La gran mayoría de las tablas de picar tiene una funcionalidad a través de su orificio. No todas las lo tienen, pero son pocos los que lo aprovechan en las que sí lo poseen. Yo pensaba que era un hoyo para tomar la tabla con la mano. Gran error. Es para que la verdura no salte cuando picas y se distribuya de forma ordenada al recipiente al cual quieres depositarla.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Funciona y muy bien. Un pequeño agujero con un gran poder.


4. ¿Hemos cerrado la caja de cereales mal toda nuestra vida?

Es triste, pero cierto. Al conocer el método de Becky Holden McGhee, nos dimos cuenta de que toda nuestra vida hemos cerrado mal las cajas de cereal, avena y productos de ese estilo.

No te sientas mal. Fue un gran descubrimiento hasta para ella misma. Solo me ha costado 40 años, pero ya sé la forma correcta de cerrar una caja de cereales”, dice en su publicación de Facebook, en la cual incluye el video/tutorial con el que puedes aprender a cerrarlas.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Este método fue testeado y es efectivo. Lo probé con una caja de cereales y con otra de avena. Sirvió para ambos. Es importante sellarlas bien porque pueden entrar bichos que pueden descomponer tu comida más rápido.


5. Calentar tu comida en forma de dona

Un usuario de reddit comentó esta extraña teoría: si calientas tu comida en forma circular, dejando un orificio al medio —tal y como una dona—, esta se calentaría de mejor manera.

Veredicto:⭐⭐

Probablemente, esto no funciona con todos los microondas. Al testearlo no logré notar una gran diferencia. Puedes hacer la prueba en casa y fracasar tú mismo.


6. Córtale la parte posterior a los limones una vez que los exprimas

Para todos los que tengan exprimidores individuales este truco puede cambiarles la vida. La idea —y sobre todo con el alza del limón— es poder aprovechar su jugo al máximo. En este artículo de Buzfeed nos percatamos de que no es llegar y exprimir limón en estos útiles aparatos. La forma más inteligente es cortar la parte posterior de la fruta. Luego se introduce el exprimidor y se exprime.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Realmente funciona y se puede aprovechar mucho más al limón. Es un buen método para no derrochar limón y hacerlo rendir al máximo.


7. Usar la lata de bebida apropiadamente

Durante la Segunda Guerra Mundial, las latas se hicieron populares ya que se podía acceder a un sin fin de alimentos sin que estos se estropearan. Antiguamente, se usaba el abre-latas para poder destaparlas, pero hace un tiempo muchas de estas conservas incluyen un anillo con el que las puedes abrir con facilidad.

Pero queremos hablarle de un anillo en particular: el de las latas de bebida. Este tiene una particularidad especial: es para que puedas usar bombilla y que esta no se caiga o salte a los lados.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Quien inventó esto fue un olvidado genio y nosotros unos amermelados por no darnos cuenta antes.


8. Usa cinta adhesiva para sacar cucharas rasas

Este truco lo vimos en TikTok, donde hay todo un universo de trucos —o hacks— para lo que se te ocurra. En este caso, el objetvio es poner cinta adhesiva en la lata, frasco, tarro o recipiente en el que guardes el café, azúcar, harina, leche o el polvo que sea, y usar esto para sacar medidas razas y exactas.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

Nada que decir: con este simple truco puedes hacer preparaciones con las medidas justas. Incluso, puede llegar a ser muy placentero ver cómo una cucharada o taza rebalsada se transforma en una con la medida al ras.


9. Haz cubos con los restos de salsa

Para cuando te sobre salsa o caldo de alguna preparación, internet propone una solución sencilla: congelar los excesos en cubitos.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐⭐

La recomendación es usar algunos de silicona —y no tanto los plásticos para el hielo— ya que es más fácil desmontar y así poder almacenarlo en un tupper o bolsa. También hay que tener en consideración que los cubos no pueden estar eternamente congelados: la idea es usarlos cuando los necesites.


10. Haz que tus limones tengan más jugo calentándolos 20 segundos en el microondas

No hay nada más desagradable que exprimir un limón y que este te desilusione con la poca cantidad de jugo en su interior. En un artículo de Lifehacker aseguran que si uno mete un limón al microondas por 15-20 segundos, el calor estimulará a que de él salga más jugo.

Veredicto: ⭐⭐⭐⭐

Sí funciona. Es un buen método para aprovechar el jugo del limón al máximo, más aún considerando su precio actual, que casi llega a los dos mil pesos el kilo en los supermercados.