Cómo limpiar tus sucias sillas plásticas (y que vuelvan a ser blancas)

Simples, neutrales y económicas, las sillas de plástico blancas son un clásico en el mobiliario de exteriores, debido a su versatilidad y su estética sencilla, que combina con casi todo. Sin embargo, el tiempo no pasa en vano sobre ellas: alguna vez radiantes como una novia, después de unos años las pobres quedan más bien grises y opacas tras tantos asados, veranos, fiestas y cumpleaños. El sol, la humedad, el polvo y los traseros de tanta gente dejan su huella, la que casi siempre se manifiesta en un color triste y apagado. Pero recuperar y conservar ese blanco reluciente es posible. Aquí explicamos cómo.

Esto depende de las condiciones a las que las expongas. Si notas manchas de tierra, comida, caca de pájaros, pasto o mucho polvo y telas de araña, es importante limpiarlas tan pronto como sea posible. Si las sillas se utilizan regularmente, una limpieza semanal es lo recomendable. Ahora bien, si están almacenadas y solo las sacas para ocasiones especiales, asegúrate de protegerlas del polvo y darles una limpieza rápida antes de exhibirlas nuevamente. De todas formas, siempre será bueno darles un lavado intenso al menos una vez al año, antes de que comience la temporada más calurosa de terraza, piscina o patio.

De acuerdo a nuestra experiencia y la que pudimos recabar en otros sitios especializados en limpieza y tareas domésticas, los productos indispensables para dejar tus sillas impecables son:

• Esponja
• Paño absorbente
• Toallas de papel
• Detergente lavalozas
• Vinagre blanco
• Detergente de ropa
• Blanqueador (cloro)
• Escobilla
• Peróxido de hidrógeno (agua oxigenada) de 40 volúmenes

Si te cuesta calcular las proporciones, puedes ayudarte de medidores, como un set de tazas y cucharas o un jarro medidor. De esta forma, te aseguras de cumplir las proporciones al pie de la letra y lograr esas deseadas fórmulas de limpieza con más eficiencia.

Para algunas soluciones de limpieza se requiere un pulverizador, que ayuda a que el líquido se esparza de mejor manera por las distintas superficies. Nuestra recomendación es reutilizar el de algún producto que se haya terminado —como un limpiavidrios o un antograsa—, pero sino puedes comprar uno: son baratos y, si los cuidas bien, te durarán mucho tiempo.

El sitio The Spruce, especializado en estos temas, recomienda usar una solución eficaz y casera para retirar los restos de hongos que, por la humedad, puedan aferrarse a la superficie de las sillas. “Mezcla una parte de agua con tres partes de vinagre blanco destilado en una botella con atomizador. Aplica en las zonas enmohecidas y espera unos 10 minutos antes de realizar la limpieza general”, sugieren.

Este es un truco que causa furor en TikTok, y que sirve no solo con sillas plásticas amarillentas sino que con cualquier superficie plástica que tenga este problema, como el refrigerador u otro electrodoméstico.

Para conseguirlo necesitas dos cosas: peróxido de hidrógeno 40 volúmenes y film plástico. ¿Qué es el peróxido de hidrógeno? Es el nombre científico del agua oxigenada, que tiene altas capacidades como limpiador y desinfectante. El truco aquí es sencillo: debes verter un poco de agua oxigenada sobre la superficie amarillenta y luego cubrir en su totalidad con film plástico. Deja actuar por 24 horas, luego retira el plástico y limpia con un trapo ligeramente humedecido. El resultado te impactará.

Otra forma de recobrar el blanco original de las sillas es usando un blanqueador. El sitio Love to know, que también entrega soluciones para el hogar, sugiere usar 1/4 de taza de blanqueador con cloro en un balde grande, diluido en un litro de agua caliente. Con la ayuda de una escobilla, y siempre usando guantes, refriega la superficie de la silla y frota con fuerza.

Una vez que hayas refregado por todas partes, deja actuar por algunos minutos y luego enjuaga con ayuda de una manguera, para que la presión del agua ayude a sacar la suciedad. Si no tienes patio, puedes hacer la limpieza dentro de una ducha. Luego debes secar al sol y ¡listo! Quedarán como nuevas. Un detalle: el blanqueador puede hacerle mal a tu jardín, por lo que el óptimo es hacer la limpieza sobre pavimento o cerámica.

Si no tienes blanqueador, otro producto que también te puede ayudar para sacar distintas manchas, incluso la caca de pájaro, es el detergente de ropa. Mejor aún si es líquido. En un balde con dos o tres litros de agua tibia, mezcla una cucharada de detergente o una cápsula. Con guantes, revuelve y aplica usando una esponja sobre toda la superficie. Deja actuar por al menos 15 minutos, luego enjuaga y sécalas al sol o ayudándote de toallas de papel.

Este es otro dato que figura en sitios como House Digest o Love to know: se trata del Magic Eraser, un productos muy popular en Estados Unidos, que también se vende en Chile, y que puede sacarte rápidamente de este apuro. Esta barra, una verdadera goma de borrar gigante, es capaz de eliminar todo tipo de marcas, suciedad y otras manchas de una variedad de superficies diferentes. Lo mejor es que es muy versátil, ya que además de superficies plásticas, puedes limpiar paredes o lavabos. Solo debes sumergirla en agua y luego frotar sobre las manchas una y otra vez, hasta que se borren. En el siguiente video la misma marca muestra cómo se erradican las manchas del plástico de las sillas.

El vinagre blanco no solo sirve para eliminar los hongos, sino también para quitar las manchas. Solo debes verter un cuarto de taza de vinagre en un balde con unos tres litros de agua caliente. Luego, y siempre con guantes, usa una esponja o escobilla para refregar con líquido toda la superficie. Dejar actuar durante unos diez minutos y posteriormente enjuagar con la manguera.

*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 29 de septiembre de 2023. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.