La compra de los sillones debe ser una de las adquisiciones más difíciles del hogar: no sólo porque son una de los muebles más costosos del living, sino también porque cumple el rol de ser la columna vertebral de esta parte de la casa. Cuando me fui a vivir solo, creo que fue una de las compras que más tardé en hacer, y mientras no tenía dónde sentar a las visitas, recibí el regalo de un compañero de trabajo de ese entonces, que se desprendió de un viejo mueble.
Me advirtió que el sillón venía sucio y desgastado por el paso del tiempo. Y cuando llegó a la casa, entre la emoción de por fin tener el living medio armado, no me fijé mucho en las imperfecciones. Sin embargo, con el paso de las semanas, la vanidad se apoderó de mí y sentí que tenía que enchularlo.
Al mismo tiempo, Juan José Rojas (28, arquitecto) vivía el mismo proceso, pero él invirtió en un sillón de tres cuerpos y para celebrar que su departamento de soltero estaba listo, invitó gente y armó una fiesta. El resultado, además de una caña para el olvido, fueron diversas manchas en el lomo de su mueble: una de vino, otras de grasa del picoteo de quienes se limpiaron las manos sobre la tela, y algunas de pedazos de queso. Su frustración al otro día fue enorme y, como todo millennial, recurrió a YouTube en busca de respuestas.
Después de utilizar una fórmula de bicarbonato y limón, el resultado fue más triste: una mancha que se expandió de manera rebelde y opaca, viéndose mucho peor que al comienzo. Afortunadamente, encontró en Instagram un emprendimiento que se llama Master Clean, servicio que ofrece lavado de tapices. Su sillón, después de dos intervenciones, volvió a retomar su tono original.
Omar Gaínza es venezolano y trajo sus conocimientos en limpieza de tapicería desde su país. Aquí lo puso en práctica fundando Master Clean, donde deja el lavado en seco en el pasado. “A través de una limpieza húmeda, con desengrasante para telas y champú para tapices, los muebles se demoran en secarse 5 horas aproximadamente. A diferencia del lavado en seco, el de inyección y extracción remueve la parte superior e interior del tapiz, terminando así con malos olores, ácaros y manchas que penetraron el mueble”, describe.
Después de ver estos resultados, además de los que muestran en sus redes sociales, contraté el mismo servicio y mi experiencia fue similar. El sillón, que yo pensé que era gris oscuro, resultó ser beige. Y más lindo de lo que creía.
Por otro lado, Pedro Lerdo de Tejada es cofundador de El Tapicero, otro emprendimiento nacional que desde hace ocho años se dedica a fabricar, restaurar, retapizar y también a limpiar muebles. Su trabajo lo hacen con particulares y empresas, y una de sus premisas es la de no desechar los muebles, sino renovarlos.
Las manchas más comunes, según su experiencia, son las que provocan las mascota o los niños. Los primeros suelen dejar rastro de pelo, barro de patas y sedimentos que se quedan en la tela, mientras que los segundos producen estelas de yogur, caramelos y lápices de colores. Pero no todo es culpa de infantes y animales: tal como le pasó a Juan, una mancha muy típica es la del típico picoteo que se hace en el living, la copa de vino dada vuelta o el trozo de queso crema con soya esparcido por la tela.
El error más común de la gente, dice, es frotar fuerte la mancha y hacerlo con materiales inadecuados. “Esas manchas que son pequeñas en un principio después terminan agrandadas. En la iniciativa, la gente generalmente limpia con el lavaloza, que no está hecho para tapices, y lo hacen tan persistentemente que terminan destiñendo el mueble”, dice Pedro.
O en su defecto lo hacen con mucho líquido, el que termina siendo absorbido por la espuma del sofá y con eso, más tarde, bajo el efecto de la temperatura, emerge otra mancha grande, a la que incluso pueden salirle hongos de humedad. ¿Es reversible? Afortunadamente sí. Al menos hasta que no pase donde está la espuma.
En El Tapicero también trabajan con máquinas industriales de última generación, que inyectan líquido y al mismo tiempo lo absorben. Pero aseguran eso sí que el porcentaje de humedad que queda en el mueble es bastante bajo. “Son máquinas especializadas, con detergentes sin olor, incoloros y que no generan espuma, enfocándose solo en la mancha”, dice el especialista.
Pedro hace una comparación bien lógica para aplicar en casa. “Cuando a uno se le mancha una camisa en el pecho, si uno frota sólo esa área, obviamente queda más limpio que el resto de la prenda y se nota”, dice. La idea es que la limpieza siempre sea uniforme y completa. Por eso, y acá hay un dato clave, mejor prevenir que lamentar.
Impermeabilizantes Granger’s Clothing Repel + Performance Wash Twin
Los impermeabilizantes y repelentes de tela son unos buenos aliados cuando uno sabe que recibirá visitas. La idea ahí es poner el material sobre la tela del mueble antes de que llegue la gente. “Hay que disfrutar el sillón, no convertirse en su esclavo”, dice Lerdo de Tejada. Usando este tipo de tecnologías, uno evita que las manchas sean absorbidas por la tela y por lo mismo, son más fáciles de limpiar.
En El Tapicero trabajan con la marca alemana Scotchgard 3M que, aunque se encuentra en el retail, es de alta gama y para procesos industriales. Sin embargo venden aerosoles para usos hogareños que funcionan perfecto para limpiar pequeñas manchas en telas y alfombras, sin dañar el material.
Limpiador de telas y alfombras Scotchgard 3M
Consejos: no exponer nunca un mueble a los rayos UV. “Un mueble de interior que expone una parte de su tapicería al sol, cambia notablemente con los meses y eso es irreversible”. O sea, el consejo es evitar que le llegue directamente la luz solar, especialmente en verano.
Y sobre experimentar con bicarbonato y tutoriales de YouTube, el tapicero es tajante: “está lleno de mitos, pero afortunadamente el mercado nos ofrece tecnologías avanzadas. Hoy no hay que deshacerse de un mueble, sino que mantenerlo y renovarlo”
Los precios de limpieza de tapices de El Tapicero pueden variar entre 30 mil a 55 mil pesos, dependiendo de las características del mueble y sus medidas. El equipo va hasta la casa del cliente y el proceso dura hasta una hora. Son cordiales, preocupados con los protocolos covid y el resultado uno lo puede ver en su Instagram: excelente servicio.
*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 28 de julio de 2021. Los valores y disponibilidad pueden cambiar.