Hay vacaciones donde nuestras mascotas tienen un rol protagónico y causan sensación cuando las llevamos con nosotros a pasear. Mientras que a otras no podemos llevarlas, ya sea por itinerario, lejanía o por los costos que tiene el viaje. Dejarlas en casa nos puede hacer sentir una mezcla de emociones: alivio por un lado, porque dejar al animal también significa un descanso de ciertas obligaciones y rutinas, pero también pena, ya que no poder estar con tu mascota durante unas semanas no es fácil.
Además, no es llegar y cerrar la puerta: irte sin tu animal conlleva una serie de logísticas y preocupaciones no menores para asegurarte de que quede bien cuidado y resguardado.
¿Cómo mantenerlos felices cuando tu no estás? Depende de varias cosas. Principalmente, del tipo de mascota que tengas. Un gato, por ejemplo, es capaz de ser autosuficiente durante un par de días, mientras que un perro necesita una atención más constante.
“Un punto crucial es evaluar qué es lo mejor para mi mascota: si dejarla en un hotel o ver si le acomoda más otra dinámica según sus necesidades”, comparte Josefa Ramírez, médica veterinaria, etóloga clínica, especialista en vínculos humano-animal y creadora de contenido.
Instrucciones básicas
Ya sea si se queda en un hotel para mascotas o con una persona cuidadora, para Giovanna Repetti, médico veterinaria en SuperZoo.cl, son siete las instrucciones básicas que cada tutor debe comunicar a quien quede a cargo de nuestro animal. “Estas deben conversarse y entregarse por escrito, para que no existan confusiones”, afirma.
- Una lista de contactos en caso de urgencia médica: aquí debes agregar, además de tus números de celular, el del lugar en el que te estés alojando (si es que hay), el de un familiar o amigo cercano que esté en la ciudad y el del centro veterinario de cabecera donde llevas a tu mascota.
- Instrucciones sobre la alimentación: específicamente el horario y la cantidad, además de sus platos. “Debes asegurarte de que el alimento alcance para todos los días en que no estarás”, destaca.
- Actividad física o recreativa: para que el animal no se estrese demasiado, especialmente si es un perro, conviene que mantenga sus horarios habituales de paseo, o bien que tenga los mismos tiempos de juego, ojalá con sus juguetes favoritos. Y si tiene entrenamiento, ver la manera de continuar con éste.
- Límites y reglas: este ítem tiene que quedar bien claro, para que luego a tu regreso no veas un retroceso en sus conductas. Por ejemplo, que la mascota no se suba a los muebles o que no haga sus necesidades dentro de la casa.
- Higiene y desechos: especificar cada cuánto tiempo necesita un baño, cepillado de dientes y/o peinado. Y respecto a los desechos, en el caso de los perros, dejar bien claro los horarios en los que hay que sacarlo para que descargue sus tripas. En cuanto a los gatos, entregarle su caja y la arena que habitualmente usa, y pedirle a quien lo cuide de que ésta se limpie diariamente.
- Tratamientos médicos: Si tu mascota está tomando alguna medicina, debes dejar por escrito la dosis a administrar y su horario. “Detallar cómo administrarse y comprar la cantidad necesaria que se ocupará en tu ausencia para que el medicamento dure lo suficiente mientras cuidan a tu mascota”, añade.
- Sus cositas: las pertenencias también son importantes para los animales, ya que les ayudan a tener seguridad y a sentirse en casa. Estar cerca de cosas como su collar, placa de identificación, correa, platos de comida y agua, juguetes, cama o casa, cojines o mantas, cepillos, champú y sus snacks favoritos, en caso de que los consuma, harán que el cambio de hábito sea menos terrible.
“Lo más importante aquí es mantener sus rutinas dentro de lo posible: que su alimentación no varíe ni tampoco su actividad física, ya que en el caso de los perros estas instancias les permiten socializar con sus pares”, complementa Josefa Ramírez.
Qué puede hacerlos sentir cómodo
Para que tus vacaciones puedan ser tranquilas y despreocupadas, debes sí o sí dejar a tu mascota con alguien de confianza. Ya sea un familiar, un amigo o un hotel, en cualquier caso hay que tener la seguridad de que estará en buenas manos.
“Sea quien sea, el cuidador debe ser alguien de confianza, que siga todas tus indicaciones”, comenta Repetti. “El objetivo es hacer todo lo posible para no cambiar demasiado la rutina de tu mascota. Si esto se logra, ella se sentirá más cómoda y tendrá un mejor comportamiento en tu ausencia”.
Lo ideal es que la mascota conozca al cuidador y ojalá también el lugar en el que va a quedarse”, apunta la veterinaria. Una recomendación para las mascotas que van a ser cuidadas en hogares que no son los suyos, es poder llevarla allí de forma paulatina antes de partir de viaje. “Ayuda a que no sea un cambio demasiado brusco y pueda adaptarse de mejor manera”, agrega.
“Lo ideal es intentar respetar al máximo la personalidad y los hábitos del animal”, destaca Ramírez. Es decir, si un perro está acostumbrado a salir tres veces al día, que esa rutina se respete. “También hay que adecuarse a sus necesidades en base a sus personalidades. Por ejemplo, respetar si es sociable o no, y no exponerlo ni aislarlo en demasía”, apunta.
Así como existen personas que aman ir a bailar y otras que no lo soportan, hay perros a los que les encanta ir al canil a compartir con otros canes, mientras que a otros les aterra. Eso debe tenerlo claro quien cuide a la mascota. Y aunque no lo parezca, algo similar sucede con los gatos. Por eso, “lo ideal es dejarlo con alguien conocido, en el que uno tenga confianza y que los animales también lo reconozcan desde antes, para que así puedan sentirse cómodos”, afirma Ramírez.
En resumidas cuentas, la ecuación es la siguiente: confianza = comodidad. Ahora, si no existe nadie conocido que pueda hacerse cargo de nuestra mascota, una persona cuidadora recomendada puede ser una buena alternativa. Lo mejor, aconseja la veterinaria, “es intentar presentarlos desde antes, sin apremios y tratar de hacer todo de forma amable, siempre intentando respetar la personalidad del animal”.
Una prenda u objeto con tu olor es otro detalle que puedes empacarle a tu mascota en su estadía fuera de casa. Es un extra que puedes hacer “en el caso de que te preocupe que tu mascota te extrañe mucho”, sugiere Repetti.
Cómo encontrar un buen hotel de mascotas
Hace algunos años, supe de la historia de una familia que se fue un mes de vacaciones al extranjero, por lo que sus perros debieron quedarse en Chile. Los grandes se mantuvieron en casa, porque estaban acostumbrados a vivir en su patio, no así su perro más chico, que requería de más atenciones. A él lo dejaron en un hotel canino que prometía cuidados y áreas para correr. Cuando la familia volvió y fueron a buscar a su perrito, se lo devolvieron en una caja de zapatos.
Historias como esta hacen que el estómago se revuelva. Para no caer en este tipo de desgracias, es de extrema necesidad hacer un buen filtro al momento de buscar y elegir un hotel. En su experiencia personal, Josefa Ramírez prefiere no optar por hoteles para perros, porque su animalito tiene una edad más avanzada y está más cómodos en casa. Sin embargo, para quienes no tienen más alternativa que dejarlos en estos recintos, comparte ocho puntos importantes que se deberían tomar en cuenta cuando estás en proceso de elección.
- Cuántos animales admiten: “siempre serán preferibles los grupos pequeños, porque con muchos perros se puede perder el control y ahí la calidad y la atención difícilmente será la que uno espera”, dice.
- Dónde duermen: preguntar si estarán en caniles individuales o pasarán la noche sueltos por el recinto.
- Cuánto tiempo pasan al aire libre: “algunas veterinarias tienen servicio de hotel, pero muchas veces no es la mejor opción, porque los animales pasan casi todo el tiempo encerrados en caniles. Por eso hay que saber cuánto tiempo tendrán al aire libre o en espacios abiertos. Ojalá sea la mayor parte del día”, específica.
- Médico veterinario cerca: asegurarse de que entre los profesionales que estarán a cargo haya algún veterinario que pueda socorrer ante emergencias o si el recinto tiene apoyo profesional en caso de urgencias.
- Chequear qué protocolos exigen a la hora de ingresar: es decir, saber si se requieren vacunas al día, desparasitaciones y otro tipo de procedimientos médicos. Si es así, te asegurarás de que tu mascota no se contagie de algunas enfermedades.
- Cuántas personas hay por cada animal: “es ideal que siempre haya varias personas a cargo del grupo de animales, para que así se tenga más supervisión”, opina. Un ideal sería el de un cuidador por cada cinco animales.
- Si te enviarán fotos y noticias: este es un ítem importante, ya que más que las imágenes en sí, que manden fotos o videos de tu mascota ayuda a la confianza y la transparencia, además de transmitir una preocupación por parte de quienes la están cuidando.
- Protocolos de emergencia: Es muy relevante “saber las medidas de seguridad o de reacción que tiene el hotel en casos de emergencia, ya sean de salud o bien un terremoto o incendio. Eso garantiza más seguridad para nuestros animales y nos da confianza a los dueños”, puntualiza.
El ideal, comenta Giovanna Repetti, de SuperZoo, es conocer previamente las instalaciones de forma presencial. “También debes fijarte en las habitaciones, el personal, la higiene y los cierres de la residencia, para evitar que tu mascota se vaya a escapar”, advierte.
A su parecer, otro filtro importante es verificar que sea un establecimiento evaluado favorablemente por los usuarios. Es decir, “buscar y leer los comentarios que existan en las redes sociales, y conversar con aquellos que ya han utilizado los servicios”. Hacer una pequeña investigación en internet ayudará a despejar estas dudas y a estar más tranquilos con la decisión.
¿Es necesaria una caja transportadora?
Si nuestra mascota se quedará fuera de la casa, hay que ver cómo la trasladaremos al lugar donde será cuidada. En el caso de los gatos, Ramírez explica que es fundamental contar con una caja para transportarlos. Aunque no les guste ingresar a ella, “esta lo ayudará a protegerse de los estímulos ambientales al momento del traslado”.
Al ser animales más sensibles, los gatos “se tienden a asustar con más facilidad, por lo tanto transportarlos en una caja especial hace que disminuya el nivel de estrés”. Para fomentar su uso, puedes premiarlo cada vez que entre, y así fomentar su comodidad.
En el caso de los perros, Josefa dice que dependerá mucho de su personalidad. “Si es más asustadizo, llevarlo en una caja sirve para disminuir los estímulos, igual como con los gatitos”. Si se trata de perros más grandes, la caja se hace menos necesaria —además de que se necesitará una de mayor tamaño—, pero si ya sabe usarla, puede ser un buen atributo para tomar en cuenta en el traslado.
“Si al perro le gusta su caja de transporte o se siente cómodo en ella, es importante que la use y viaje con él, porque será una base segura, un lugar donde el perro está confiado, seguro y cómodo”, dice. En caso contrario, “si al perro no le gusta su caja de transporte o le tiene miedo, entonces es mejor evitarla”, destaca.
Jaula transporte para perros Max PET
Al regreso
En internet está lleno de videos de perritos emocionados al reencontrarse después de un tiempo con sus humanos. Las reacciones de los perros son eufóricas, felicidad máxima entre llantos, saltos y ladridos. ¿Será que nuestras mascotas se comportarán igual cuando nos vean volver de nuestras vacaciones? Depende todo de la personalidad.
“Después de un período sin verte, es esperable que tu mascota se muestre eufórica en un comienzo. Aunque uno también se encuentra en ese estado, y busca regalonear lo máximo posible, también es necesario considerar que hay que reordenar la conducta y los hábitos de tu mascota en los días venideros”, opina Repetti.
También hay veces en que nuestro animal puede que mantenga una distancia posterior a la alegría, “o que se sientan medio incómodos por los cambios de rutina, lo que es normal”, añade Ramírez. Por lo mismo, es importante respetar la personalidad del perro o del gato. “Si no se quiere acercar, déjalo tranquilo. Si se acerca, puedes darles premios para retomar la confianza”, apunta. Sugiere tratar de no retarlo en los primeros días si es que hace algo indebido, para así poder afianzar el vínculo. “A veces hay que darles su tiempo. Con los perros a veces cuesta que se adapten a las rutinas nuevas, por lo que hay que tener paciencia”, dice.
Con tu regreso, también se deben retomar gradualmente las rutinas, como los horarios de alimento y sus cantidades adecuadas, además de los juegos o los paseos.
*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 16 de febrero de 2023. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.