Paso a paso: cómo ondular correctamente el pelo

Sin duda, las ondas son uno de los peinados más versátiles y se adaptan a una amplia gama de estilos y ocasiones. Puedes recurrir a ellas para consolidar un look casual o puede ser ese complemento relajado para un momento más elegante, como un matrimonio o una fiesta, por ejemplo. Son transversales y no pasan de moda: están presentes en peinados de celebridades, en alfombras rojas, o puedes verlas en tu misma vecina que salió a tomarse un café.

Ahora bien, ¿cuáles son las claves para hacerse un buen ondulado?

A la hora de crear ondas en el cabello, hay dos enfoques principales: puedes construirlas usando calor —con onduladoras o planchas— o usando accesorios en frío, como rodillos. Ambos métodos tienen ventajas y desventajas, y la elección dependerá de tus preferencias personales, las necesidades de tu pelo y el contexto, es decir, en qué instancias vas a lucir el peinado.

Victoria Celedón es peinadora profesional y se dedica a peinados para eventos, novias y madrinas, y ella se inclina por el calor. “En términos de acabado y duración, siempre voy a preferirlo”, dice. Para sus peinados, la onduladora es su herramienta básica para llegar a resultados espectaculares, donde la onda cae y conserva una forma delicada. “La plancha tiene otro fin, más de alisar, pero también puedes hacer ondas. Si alguien tiene una plancha y quiere hacerse ondas, va a servir, pero para mí es clave la onduladora”, asegura.

“Si se hacen con calor siempre van durar más. Depende también de la temperatura y de cuánto tiempo está expuesto el pelo al calor o del tiempo en que se dejen reposar”, analiza Yamila Rosas, estilista y socia en la peluquería Divino Tesoro.

“Mientras más calor, más tiempo va a durar, pero también más daño se hace en el cabello”, comenta. Por lo tanto, si deseas que sea un look diario, ella sugiere recurrir a los accesorios sin calor, como las cintas, ruleros y modeladores de goma. Si quieres un peinado de una noche, que necesitas que resista durante todo el evento, lo recomendado por ambas especialistas es recurrir al calor. “Sin que sea demasiado alta la temperatura”, añade Rosas.

Sí. Tal como lees: no basta con agarrar un ondulador y comenzar a enrollar. Debes preparar el pelo para que este se encuentre en las mejores condiciones para ser ondulado. Celedón explica que los productos que usemos dependen del tipo de pelo, “pero si queremos fijación y duración, se necesita prepararlo”. En términos generales, en esta etapa del proceso necesitamos tener claridad de los siguientes puntos:

• Cuál es tu tipo de cabello: porque depende de si tu pelo es liso, graso, seco, grueso o delgado cómo se formarán y fijarán las ondas.
• Estilo de ondas: puedes buscar un look con ondas más definidas o quizá unas más relajadas. De eso depende hacerlas en frío o en calor.
• Estado de tu cabello: la idea es que esté sano, bien hidratado, desenredado y considerar el largo para hacer las ondas.

“Si vas a hacer las ondas en frío, es ideal usar un mousse antes”, recomienda Rosas. También tener el pelo húmedo —no mojado— para así ayudar a que el mousse se adhiera. Otro punto relevante es desenredar el pelo para así no atrofiar la curvatura de la onda o fomentar enredos.

• Siempre cabello seco: “cualquier cosa de calor se aplica con el pelo completamente seco, porque si no lo vamos a quemar”, advierte Celedón.
• Uso de productos: existen diferentes productos, como texturizadores o fijadores en mousse. Con sus clientas, Celedón aplica la menor cantidad de producto posible, para que el pelo no quede tan pesado, aunque esto también depende del tipo de pelo. “Para el día día, es muy importante utilizar un protector de calor, para que no lo dañe tanto”, aconseja la peinadora. “Hay diferentes tipos de protectores: algunos se usan con el pelo húmedo y luego esperar a que se seque, otros que puedes aplicar directamente en el pelo, cepillar un poco y listo”.
• Pelo cepillado: otro punto importante es tener siempre el pelo peinado y desenredado, “para evitar que se pueda enredar al minuto de ondular”.

Paso 1: Preparar el pelo

Como te explicamos en el punto anterior, esto es según la técnica. En este paso debes aplicar el protector térmico, en caso que las hagas con calor.

Paso 2: Seccionar:

El objetivo es dividir tu pelo estratégicamente para poder hacer las ondas de a poco. “No hay que mezclar todo el pelo, así queda más ordenado y las ondas agarran una mejor forma”, señala Celedón. Su técnica: dividir por mitades, izquierda y derecha, y cada uno de estos lados se separa en unas tres o cuatro capas. Suelen ser entre tres y cuatro. “Esto es para que los pelos no se mezclen y queden bien definidos. Ojalá queden lo más derecho que se pueda porque mejor es el resultado”, aconseja.

Paso 3: Elige un mechón

Con tu cabello seccionado, es momento de agarrar un mechón para ondular. “La idea es que no sean tan gruesos, porque si no te va a quedar un rulón gigante. Ojalá unos dos dedos”, comenta Celedón.

Paso 4: Enrolla en el ondulador

Tienes tu mechón definido y es momento de enrollar en el ondulador. Una técnica que comparte Celedón es pasar la tenaza suavemente, para alisar un poco el mechón y aplastar esos pelitos que se levantan. “La paso muy rápido y luego empiezo a ondular. La dirección la vamos dando según lo que queramos”, dice.

Respecto a las puntas, cada uno define cómo quiere dejarlas. “Hay gente a la que le gusta que queden onduladas, y otras piden dejarla más afuera para que quede lisa. Eso es decisión de cada uno”, puntualiza la peinadora.

Paso 5: Repite hasta terminar

Aquí el vals es elegir un mechón y hacer el movimiento de ondulación. La idea es replicar los pasos 3 y 4 hasta terminar todas las secciones del cabello.

Paso 6: Desarmar la onda

Aquí depende de gustos. Este paso puede integrarse en caso de que estés buscando un look natural. “Cuando yo termino de ondular, lo que hago es desarmar un poco la onda”, comenta Celedón. Esto solo debe hacerse una vez que el pelo esté en una temperatura fría. “No hacerlo con calor, porque sino no alcanza a tomar la forma”, explica.

Paso 7: Sellado

Para definir tu peinado de ondas, puedes incluir la aplicación de algún producto fijador. De esta manera te aseguras de que la onda persista y no se desarme. “[Cuando termines] le puedes echar alguna crema o sérum especial para marcar ondas; así también hidratas y el pelo queda mucho más natural, más armado, y los rulos no quedan separados estilo poodle”, sugiere Celedón.

“Puede que esté fallando la preparación del pelo”, analiza la peinadora. Sin embargo, otra razón tiene que ver con tu tipo de cabello, sobre todo si eres una persona de pelo liso. “El calor no lo hace todo: hay pelos que son muy lisos, y aunque ondules se puede desarmar en el minuto uno. Por eso es muy importante la preparación y el tipo de pelo que tienes”, comenta. Ondular a una persona con un liso extremo es difícil, ya que “es cambiarle completamente la forma al pelo, es transformarlo, entonces necesitamos más ayuda”.

Solución: apóyate de la fijación. Existen diferentes tipos de productos, como lacas, con diferentes grados de fijación. Para pelos lisos extremos, lo mejor —recomienda Celedón— es recurrir a lacas con fijación extra fuerte. Para cabellos ondulados y maleables, pueden usarse una media.

“Lo que generalmente recomiendo cuando peino, es que lavarse el pelo la noche o el mismo día, pero siempre seco antes de comenzar a trabajar el pelo con calor”, cuenta Celedón. De esta forma, nos aseguramos que el pelo pueda verse brilloso. El mito de que los peinados funcionan mejor con el pelo sucio, según la peinadora, es falso.

Existen muchísimos y, según explica Rosas, en casi todas las marcas de productos para el cabello hay líneas para preservar las ondas. A grandes rasgos, distingue como principales los siguientes formatos:

• Fijadores: usualmente en espray, ayudan a fijar las ondas en el pelo.
• Mousse: nos ayuda con el volumen y para lograr una fijación una vez que se seca el producto sobre el pelo. Por este detalle, muchas veces se usa para peinados en frío.
• Cremas de peinado: nos ayudan a conseguir un efecto de fijación sutil. Es un producto compatible con aquellas personas que ya tienen ondas y necesitan una pequeña ayuda para definir.
• Gel: se usa entre quienes ya tienen ondas y necesitan ayuda para definirlas y fijarlas.

Dependiendo de tu tipo de pelo, debes elegir la combinación que más te acomode, además de siempre incluir el protector de temperatura en caso de que ocupes plancha u onduladora.

Para quienes tienen el pelo liso, sabrán que hacer ondas puede ser todo un desafío. “En el pelo ondulado siempre va a durar más el rulo”, comenta la fundadora de Divino Tesoro. En cambio, cuando el pelo es liso, el desafío es forzar una estructura capilar distinta a la original. “En un pelo muy lacio, finito y sedoso, va a durar poco la onda, hagas lo que hagas”, agrega.

“Si tienes una laca media y tienes el pelo liso, quizás tienes que darle doble refuerzo”, aconseja Celedón. “Puedes echar una capa primero, ondular, y después otra capa, hasta que encuentres la fijación deseada”. Otra estrategia: rociar fijador en cada rulo, de esta forma te aseguras una fijación certera. Para esto, eso sí, debes procurar siempre no rociar en exceso.