Qué es el tejido granny square y cómo iniciarse en él

Patrones psicodélicos, coloridos, diferentes o llenos de personalidad: son algunas de las definiciones que mejor describen a los granny squares, concepto inglés que en español traducimos como “cuadrados de abuela”. “Se le llama así porque tradicionalmente se asocia el crochet con las clásicas mantas de abuela”, analiza Javiera Hernandez, fundadora de La Tejería, club y escuela de tejido. Para ella, cada cuadrado es como si fuese un píxel, y a través de él se pueden concebir millones de ideas, no solo de mantas o cobertores, sino que de prendas de ropa, como chalecos, shorts, vestidos e incluso bikinis.

El granny square siempre ha estado entre nosotros. Su primera aparición fue en el libro The Art of Crocheting, publicado en 1891. Desde entonces, han surgido diferentes versiones de uso, como aquellos de apariciencia discreta, casi señorial de colores crudos, hasta aquellos que parecen una explosión de arcoiris, siendo uno de sus periodos más populares durante los setentas. Sin embargo, en estos últimos años tomó mayor protagonismo: redes sociales y otras plataformas han incentivado a que esta técnica vuelva a convertirse en tendencia.

Así es como el granny square ha ido conquistando hogares e incluso diferentes estrellas del entretenimiento, como Harry Styles. Hace unos años, apareció con un chaleco hecho de cuadrados de colores. Su look, por supuesto, se viralizó y las fanáticas comenzaron a grabar tutoriales para conseguir el mismo patrón. El saltador Tom Daley, medallista olímpico inglés, también es conocido por ser un gran tejedor, y en su canal de YouTube publicó una clase en la que explica los básicos del granny square.

En el caso de Javiera, ella conoció esta técnica hace casi ocho años. En ese entonces, se había ido a vivir con una amiga y estaban decididas a decorar el departamento con sus propias manos. “Me puse a mirar en Pinterest y encontré las mantas de granny square, muy coloridas. Me enamoré, me encantaron”, cuenta.

Cuando le mostró las fotos que había guardado en Pinterest a su mamá, ella le dijo que estaban hechas a crochet. “Me sorprendió, porque mi mamá teje a crochet, pero siempre la había visto hacer cosas con hilo de color crudo, como cenefas para cortinas o centros de mesa. Por eso, siempre pensé que el crochet era solo eso”, comenta.

Fue así como le pidió que le enseñara; al poco tiempo se dio cuenta de que esto era lo suyo. “Mi cabeza estalló. Lo amé”, asegura. Parte de ese romance tiene que ver con que los cuadrados de abuela permiten avanzar muy rápido, por eso mismo “se pueden hacer formas distintas y es muy fácil mezclar colores. Yo soy ansiosa, me gusta ver cuando la obra va tomando forma… Y todo eso lo tiene el granny square”, señala.

Como ya explicamos, los granny square son cuadrados que están tejidos a crochet. Por lo mismo, la pregunta más obvia es: ¿necesitamos saber crochet antes de intentar tejer un cuadrado? La recomendación Hernández es que sí. “Creo que si conoces las bases de cómo manejar el crochet, cómo funciona, qué hacer con la otra mano que sostiene el hilo, cómo sostenerlo, cómo moverlo... Es lo esencial para que después todo te resulte más fácil”, dice Hernández.

“El crochet es bastante fácil y amable”, dice. Para construir estos cuadrados, son tres puntos básicos del crochet los que se ponen en práctica: punto raso, punto alto, y arco de cadeneta, además de la cadeneta, que es el punto de partida.

En una entrada del blog de La Tejería, identifican a los puntos básicos del crochet con las siguientes diferenciaciones:

• Cadeneta (cd): es la base. Debes tomar la lazada y arrastrarla por la argolla que hay en el crochet.
• Punto Raso (pr): inserta el crochet en el tejido, toma una lazada y arrastra ese hilo de vuelta por el tejido donde ingresaste, como por debajo de la argolla que se encontraba en el crochet.
• Punto Alto (pa): toma una lazada de hilo, inserta el crochet en el tejido, toma una nueva lazada, y luego sal del tejido donde habías ingresado. Te quedarán tres argollas en el crochet. Toma una nueva lazada y desliza ese hilo por las dos primeras argollas que hay en el crochet. Luego toma una nueva lazada y desliza ese hilo por las últimas dos argollas quedaron en el crochet.
• Arco de cadeneta (arco cd): es el espacio grande que queda en la vuelta anterior por las cadenetas que se tejieron entre puntos.

El proceso más detallado de cómo hacer los cuadrados, puedes visualizarlo en el siguiente tutorial.

Cuando partimos, y como en la mayoría de las disciplinas y hobbies, el equipamiento de los primeros meses puede ser más amateur que profesional, sobre todo considerando que es algo que estás probando. “Puedes tejer con cualquier palillo o cualquier hilado, pero siempre el crochet debe ir acorde al grosor de tu hilado”, dice la creadora de La Tejería.

Su recomendación es optar por un grosor de 5 milímetros, de forma que el tejido sea fácil de visualizar. “Eso hace más amable entender los movimientos del crochet, mirar las construcción de los puntos y mover todo”. El grosor del hilado y el número del palillo siempre vienen especificados en sus etiquetas. Ella sugiere un hilado de algodón 100% o una lana acrílica gruesa.

Respecto al tipo de crochet, Hernández dice que hay muchísimos: madera, bambú, metal, aluminio o ergonómicos. Los que ella recomienda para principiantes es cualquiera de la marca Tully, la que está presente en la mayoría de los establecimiento de ventas de lanas. “Lo principal es que consigan una lana o hilo barato al igual que el crochet, porque si lo dominan, sí o sí después van a querer tener herramientas de calidad”, dice.

No necesariamente tienes que coser. “Hay muchas maneras de hacerlo. Por ejemplo, ir uniendo con puntos, donde cada cuadrado queda muy pegado, o ir armando un diseño a medida que se unen, con calados, con formas”, comparte Hernández. Este último método es su favorito, porque además de avanzar rápido, “pareciera como si el tejido es todo de una trama, y funciona tanto para mantas como para ropa”. También se puede usar la misma herramienta para ir uniendo o simplemente enlazar a través de una aguja e hilo.

Aprender granny square es posible tanto por cuenta propia como a través de cursos. Puedes encontrar de estos en plataformas u optar, por ejemplo, por los de La Tejería. En su taller presencial, además de aprender a armar el crochet desde cero, con todas bases y buenas terminaciones, también conocerás a otras personas con las mismas inquietudes.

Aparte, en el curso se tejen dos cuadrados completos, cambiando de color. Luego aprendes a unirlos con el mismo crochet. “Con eso puedes seguir tejiendo en casa el resto, ya sea con puntos básicos o con granny square, y haces muchos más cuadros para hacer una pieza final”, detalla.

*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 14 de abril de 2023. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.