En enero, bitcoin cumplió 15 años. Por ahora, el hito se ve endulzado con buenas noticias, sobre todo para quienes invierten en la criptomoneda más famosa y popular del mercado: esta semana su valor cotizó sobre los 52 mil dólares, consolidando una tendencia al alza que le acerca al récord histórico alcanzado en noviembre de 2021, cuando por pocos días llegó a los 68 mil dólares.
“Bitcoin ha mostrado un notable crecimiento desde principios de 2023: escaló de aproximadamente 16,6 mil dólares hasta sobre los 50 mil este año, lo que destaca su fortaleza y potencial para formar nuevas tendencias alcistas”, afirma Gonzalo Muñoz, analista de mercados XTB Latam.
A la valorización al alza se suma la reciente aprobación por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, en su sigla en inglés) de los primeros ETF (o Exchange-Traded Funds) de bitcoin. Un verdadero hito para la criptomoneda, considerando que la entidad reguladora se negó durante diez años a dar su autorización, y que ampliará los caminos para invertir en divisas digitales en forma de activos que cotizan en la bolsa.
De acuerdo a Muñoz, este es un paso que reafirma el valor de bitcoin como activo financiero, sin embargo, también introduce mayor volatilidad a una divisa que históricamente se ha mostrado volátil. Ese es uno de los tantos desafíos que tiene por delante la criptomoneda, además de lograr una aceptación más extendida en nuevos mercados, mayor seguridad ante la ciberdelincuencia, flancos que afectan su reputación y nivel de riesgo.
Con todo esto, ¿es un buen momento para comprar bitcoins?
Un sistema de pago descentralizado
“La creación de bitcoin fue motivada por el deseo de proporcionar un sistema de dinero electrónico descentralizado, seguro, privado y resistente a la censura”, sostiene Claudio Escobar, MBE y académico de la Facultad de Economía y Negocios de la U. Alberto Hurtado. A 15 años de su publicación, ¿se han cumplido estas promesas iniciales?
De acuerdo a Escobar, sí. Y en gran parte eso se debe al blockchain, el sistema que subyace a las operaciones de bitcoin. En palabras del académico, se trata de “un mecanismo de consenso distribuido, que registra todas las transacciones en una cadena de bloques (blockchain), asegurando que cada transacción sea única y verificable por todos los participantes de la red”.
Los especialistas explican que blockchain no sólo ofrece seguridad y transparencia, sino que también protege contra la censura y la manipulación por parte de entidades centralizadas. “La naturaleza deflacionaria de bitcoin, con un suministro máximo predeterminado, lo ha posicionado como una reserva de valor, comparado a menudo con el oro digital”, explica Escobar.
Asimismo, ha permitido que personas no bancarizadas alrededor del mundo puedan acceder a servicios financieros, y facilitar transacciones internacionales de manera eficiente.
Por todo esto, Escobar estima que bitcoin ha experimentado una evolución “notable”, que no sólo la ha mantenido como criptomoneda líder en el mercado, sino que también motivó el florecimiento de todo un ecosistema de innovación en el ámbito de las finanzas descentralizadas, que incluye amplia variedad de monedas digitales como Ether, DeepOnion, Ripple, entre otras.
“Este ecosistema en rápida evolución cuenta con decenas de millones de usuarios mensuales y está dando origen a nueva infraestructura, servicios financieros y entretenimiento”, comenta Christopher Storaker, CEO de Arch.finance, una fintech para ahorrar en criptomonedas. “Todo esto ha hecho de bitcoin un activo muy atractivo para inversionistas y especuladores”, agrega.
Desafíos pendientes
En muchas ocasiones, las fortalezas representan también las mayores debilidades. Es el caso de bitcoin, cuyo carácter descentralizado y promesa de anonimato han dado pie a su uso en actividades ilícitas, afectando su percepción ante la opinión pública.
Por otro lado, se encuentran los desafíos regulatorios. Gonzalo Muñoz sostiene que su aceptación aún es limitada en sectores como el bancario, gubernamental, retail, inmobiliario, servicios públicos y seguros. Esto se debe, principalmente, “a preocupaciones sobre volatilidad, regulación y seguridad, siendo restringido principalmente por la cautela ante los riesgos financieros y regulatorios”.
Justamente la volatilidad es uno de los mayores desafíos que la moneda digital tiene por delante. Muñoz explica que bitcoin es “muy sensible ante noticias que puedan ser capaces de cambiar su naturaleza o su estructura”.
Es lo que posiblemente se verá a medida que nos acerquemos a abril, cuando se produzca el “halving”, un evento programado que, de acuerdo al analista, “reduce a la mitad la recompensa por bloque que reciben los mineros de bitcoin”.
El halving ocurre cada cuatro años y es la manera en la que bitcoin se autorregula para evitar tener un efecto inflacionario por la incorporación de nuevas monedas digitales en su sistema.
Claudio Escobar dice que esta volatilidad “puede desalentar su uso como moneda de cambio para transacciones cotidianas y plantear riesgos significativos para los inversores”.
Su uso cotidiano, sin embargo, continúa siendo complejo y, por tanto, sigue siendo un desafío para la criptomoneda. Aunque la introducción de la denominada red “Lightning Network” apunta a mejorar la viabilidad de los micropagos y transacciones diarias.
¿Qué considerar antes de invertir en bitcoin?
A pesar de su volatilidad y los desafíos regulatorios, “bitcoin ofrece oportunidades únicas de diversificación y potencial de crecimiento a largo plazo”, dice Escobar. Sin embargo, “es crucial abordar la inversión con cautela, educación y una estrategia de inversión bien considerada, teniendo en cuenta los riesgos y la dinámica cambiante del mercado de criptomonedas”.
“La estrategia lo es todo. Nada es al azar”, complementa Muñoz, que lo grafica de la siguiente manera: “Hasta ahora el bitcoin ha aprovechado el impulso y superó los 52 mil dólares, y es tan probable que el precio alcance máximos históricos como niveles cercanos al soporte técnico (38 mil dólares). Por eso se debe analizar bien el mejor momento de entrada al mercado correspondiente con el patrimonio a invertir”.
Por eso es tan útil aprender a leer indicadores e interpretar el contexto técnico en el que se encuentran los activos. En el caso de bitcoin, dice Muñoz, “se podría sugerir entrar al mercado en las correcciones dentro de los rangos planificados, y aprovechar los impulsos que pueda tener el activo para tener beneficios”.
Christopher Storacker aconseja seguir a medios especializados como Coindesk y Criptonoticias, para mantenerse al día. “Y para información especializada, The Defiant”.
Informarse respecto a prácticas seguras de manejo y almacenamiento de criptomonedas también es fundamental, como la autenticación de dos factores y el almacenamiento en frío —es decir, offline, por lo que no se pueden hackear: para esto último se han vuelto muy populares las cold wallets o billeteras frías.
Escobar aconseja, además, “estar al tanto de las regulaciones locales y las obligaciones fiscales relacionadas con la inversión en criptomonedas”.
¿En qué contextos y mercados es bitcoin una alternativa conveniente?
De acuerdo a los entrevistados, algunos escenarios tienen que ver con:
- Remesas internacionales: “Bitcoin ofrece ventajas únicas por su eficiencia y bajo costo en comparación con los canales tradicionales”, comenta Escobar.
- Entornos de alta inestabilidad económica o inflación: “Muchas personas utilizan las criptomonedas como un activo refugio frente a la volatilidad de su moneda y una creciente inflación, como pasa últimamente en Argentina”, asegura Nicolás Jaramillo, cofundador de Arch.Finance.
- Comercio electrónico y los mercados digitales, ya que estos también se benefician de las transacciones seguras y globales que bitcoin facilita.
Escobar estima que quienes buscan invertir a largo plazo y tienen tolerancia al riesgo, así como quienes quieren diversificar su cartera de inversiones fuera de las alternativas tradicionales, pueden encontrar en bitcoin una vía atractiva para llevarlo a cabo.
Será importante estar al tanto de la concreción del reglamento de la Ley Fintech, publicada el año pasado en el país, y que significará una mayor regulación del mercado de las criptomonedas.
“Para los consumidores, esta ley promete mejorar la seguridad y la transparencia de los servicios financieros digitales, incluidos aquellos relacionados con criptomonedas, lo que podría aumentar la confianza y facilitar la adopción de bitcoin como una herramienta de inversión y transacción”, cierra el académico.