Samsung Z Fold3 5G: el plegable que abre una nueva era

⭐⭐⭐⭐⭐

Samsung Z Fold3

La marca coreana acaba de presentar su actualizada línea de teléfonos plegables: su uso y diseño puede que no sea para todos los gustos, pero la funcionalidad y la pantalla que ofrece este modelo es sorprendente.




Hace algunos años —no tantos—, el mercado de los celulares era sumamente variado. Especialmente en términos de diseño: era la época de los teclados físicos y los fabricantes podían llegar muy lejos a la hora de innovar en formatos para todos los gustos y lograr diferenciarse de la competencia. Había de todo: celulares almeja, sliders (deslizables), phablets, con teclados más grandes, más chicos, modulares para el trabajo, para público gamer o amantes de la música (pre Spotify). Los fabricantes hicieron de todo y para todo tipo de audiencias.

Hasta el 2007, cuando llegó el iPhone y a partir de entonces el diseño, la forma y la función de los teléfonos móviles se homogeneizó y se hizo relativamente igual para la inmensa mayoría, con el incólume formato slate (sin o casi sin botones) o candy bar, que es el que ofrece la mayor parte de los fabricantes del mercado, y que incluso lo damos por descontado.

Más allá de las características técnicas, prácticamente todos los teléfonos celulares tienen más o menos el mismo diseño y la misma forma, pero afortunadamente eso está comenzando a cambiar y nuevas apariciones están refrescando el menú, como lo es la nueva generación de celulares plegables.

El formato, recordemos, ya existía. Hubo varios modelos, pero quizás el más popular por esos días fue el Motorola RAZR y su inconfundible diseño de almeja. Todos, en algún momento, lo queríamos tener: su revolucionaria bisagra hacía la magia para comprimir un teléfono que, en esencia, era mitad pantalla, mitad teclado. Hoy, más de una década después, están de vuelta. Pero con algunos interesantes cambios.

Los modelos plegables de esta nueva generación presentan una vital diferencia en relación a sus viejas contrapartes: acá es todo el teléfono el que logra doblarse, pantalla incluida. Motorola sacó el 2019 una nueva versión de su RAZR, pero definitivamente ha sido Samsung la que más ha empujado este revival de las pantallas plegables.

Ya en su tercera generación, la línea Z, con sus modelos Fold3 y Flip3 (este último lo revisaremos en una próxima edición), la familia de plegables del gigante surcoreano presenta grandes avances en términos de durabilidad —detalles que no pasaron inadvertidos en las primeras generaciones—, además de mejoras en varios aspectos de diseño y quizás la novedad más relevante: su resistencia al agua.

Especificaciones

  • Dimensiones: 158.2 x 67.1 x 16 mm (plegado) / 158.2 x 128.1 x 6.4 mm (abierto).
  • Pantallas: 6.2″ (plegado) HD+ Dynamic AMOLED 2X (24.5:9) Infinity-O Display, 120 Hz / 7.6″ (abierto) AMOLED Infinity Flex Display 2208 x 1768 (374 ppi), HDR10+ y tasa de refresco de 120 Hz.
  • Cámaras: Cámara de 10 MP para selfies (plegado) / Cámara de 4 MP (abierto) / Tres lentes de 12 MP (angular / gran angular / telefoto) con optimización de tomas.
  • Resolución: 4K UHD. Video hasta 60 cuadros por segundo (3840 x 2160).
  • Procesador: Snapdragon 888 5G de 64-bits y ocho núcleos.
  • Memoria: 12 GB RAM, hasta 512 GB de almacenamiento.
  • Batería: 4400 mAh.
  • Carga: Rápida (25W) Inalámbrica (10W).
  • Peso: 271 gramos.
  • Conectividad: 5G / LTE / Wi-Fi / Bluetooth
Samsung Z Fold3

Un plegado adictivo

Ya su caja llama la atención: en vez de ser el clásico tubo cúbico, el Samsung Z Fold3 5G viene en un elegante empaque rectangular, con un corte tradicional, como si fuera de chocolates. El celular yace extendido, pero inmediatamente uno se percata de la posibilidad de cerrarlo y ver cómo el vidrio se pliega perfectamente. El ejercicio es natural y es probablemente lo primero que el usuario haga. Y varias veces, como fue mi caso, porque de verdad la experiencia es fascinante y novedosa. Estamos hablando, nada menos, de vidrio táctil que se puede plegar varias veces, a gusto del usuario.

Comparado con el Fold anterior, el movimiento de la bisagra interna está muy mejorado en fluidez y sencillez, aunque sigue siendo un proceso que es mejor hacer con las dos manos. De hecho, es posible que a ciertos usuarios les “cueste” un poco la apertura natural del aparato, pero en diseño el sistema funciona muy bien y lo anterior no es nada que obstaculice la experiencia.

Cerrado, el Fold3 es un lindo celular, a pesar de su diseño poco tradicional. Se ve bien —viene en tres colores suaves— y tiene un elegante look de vidrio y marco de aluminio oscuro. Es algo más flaco en extensión y, como es tradición en la gama alta de la compañía, tiene la posibilidad de una siempre encendida pantalla “Always On”, que puede ser personalizada con distintos relojes, notificaciones y motivos. En términos de volumen es distinto a los demás teléfonos. Sí, es más pesado que un celular promedio —aunque 10 gramos más delgado que el Fold2—, pero se entiende por qué y personalmente no fue un problema; gracias a su tamaño plegado, de hecho, entra mucho más cómodo en los bolsillos.

Samsung Z Fold3

Al mirarlo en detalle, es como estar frente a un celular dos-en-uno. Cerrado, por el costado izquierdo, tenemos la bisagra, como lomo de libro, que tiene la inscripción de la marca al medio. Arriba y abajo, los parlantes estéreo, uno en cada lado, micrófonos y el cargador USB-C. Mientras, al costado derecho, nos encontramos primero con el botón alargado para el volumen y, a continuación, casi al medio, el botón de encendido y de reconocimiento biométrico. En la mano se siente distinto por obvias razones, pero no incómodo. Lo que sí, la falta de un protector ad hoc para el aparato puede ser un posible peligro para quien tenga dedos jabonosos, porque el teléfono puede llegar a ser algo escurridizo.

Todavía cerrado, el Fold es capaz de realizar todo lo que un buen celular hace hoy en día, con excelentes especificaciones internas, un procesador tope de línea, mucha memoria, un diseño mejorado y una gran y luminosa pantalla, aunque todo se aprecia algo más comprimido en términos de amplitud. En ese sentido, revisar contenido como el de redes sociales y sitios similares es un sorprendente agrado. Tener que escribir con el teclado virtual del celular cerrado ya es otra cosa: no es que sea incómodo, pero requiere una cierta habilidad, especialmente para lo que contamos con dedos gordos.

Pantalla de lujo

Cuando llega el momento de abrirlo, nos encontramos con el Fold en toda su máxima expresión. No por nada su fondo de pantalla es una flor abierta. La pantalla no sólo se expande en más de 7.5″ (como una mini tablet), sino que, como una mariposa, es como si abriera las alas, desplegando toda su poderío y potencial de uso. Su pantalla flexible es capaz de acomodarse en el ángulo que el usuario requiera, ya sea como apoyo para ver contenido audiovisual o para una sesión de teleconferencia. Aunque se ve y se siente la bisagra en el medio, no es ni intrusiva ni tampoco distractora, gracias a una tasa de refresco de 120 Hz que hace fluir el contenido como mantequilla derretida.

En términos más básicos, si uno está en YouTube —por ejemplo—, los controles se ubicarán en la parte inferior de la pantalla (de apoyo), mientras que en la superior se podrá ver el contenido. Incluso, puede usarse con un lápiz stylus, como el S Pen de la marca (que podría haber estado incluido). Y recordemos que

Por otro lado, acaso la mayor significancia que tiene un teléfono de estas características es su asombrosa capacidad para realizar multitalsking. Compartir la pantalla con dos o hasta tres apps de manera simultánea es sumamente cómodo y se da de manera natural. Lograr una disposición óptima de tamaños toma un pequeño aprendizaje de personalización, pero una vez que eso se domina las posibilidades son inacabables.

Samsung Z Fold3

Uno de los usos más prácticos que le di al teléfono fue el de utilizarlo como libro. Su tamaño y forma se asemejan mucho a tener un pequeño tomo abierto, por lo que la lectura de contenidos, especialmente de forma horizontal, fue sumamente agradable. Para qué decir la experiencia de jugar videojuegos en una pantalla así de generosa y con una memoria RAM de 12 GB.

Buenas cámaras pero batería algo corta

Los tres sets de cámaras, en todas sus prestaciones, funcionan muy bien en todos los aspectos necesarios: estabilidad, selfies claras y de rápido autofoco, buen zoom y mejoramiento de imágenes. Los lentes permanecen camuflados junto a la barra de tareas, a no ser que las aplicaciones estén seteadas a pantalla completa. Ahí aparecen en la imagen, aunque no molestan.

La pregunta sobre la resistencia de la bisagra es inevitable, dadas las experiencias pasadas, en las que muchos usuarios reportaron fallas en la pantalla y el sistema de plegado. Y se nota que Samsung ha hecho la tarea. No sólo la marca garantiza una durabilidad mayor, sino que además es resistente al agua fresca (no así al polvo), con certificación IPX8 y capacidad de sumergirse hasta más de un metro por 30 minutos. Es un celular sólido, pero recordemos que no tiene protector.

Lo anterior nos lleva a la batería que, curiosamente, es algo más pequeña en cuanto a rendimiento que su versión anterior (4400 mAh vs. 4500 mAh). Para un celular de estas características, la autonomía es clave, y si bien la que contiene el Fold3 está OK, alcanza justo para las necesidades del día y podría haber sido más generosa. El Fold3 es un smartphone definitivamente premium, por algo su precio de venta, y por lo tanto se le puede exigir más en ese ámbito.

Samsung Z Fold3

Veredicto Práctico

Con esta generación, Samsung demuestra que los teléfonos plegables han llegado para quedarse. Y muy bienvenidos sean. Todavía les falta un poco para que sean aparatos de uso popular y masivo, pero en su tercera generación la marca coreana se está acercando a ello con una pega sumamente atractiva, tanto en términos de diseño como en productividad y rendimiento.

Más allá de la novedad de poder plegar la pantalla, lo que más entrega el Z Fold3 5G es la posibilidad de reinventar la forma en que nos relacionamos con nuestros teléfonos, trabajamos con ellos y consumimos contenidos. En ese sentido, es probablemente el teléfono celular más atractivo del mercado actual.

Puede que no sea un smartphone para todos los gustos, pero es innegable que su revolucionario diseño resulta sorprendente para cualquier ciudadano de a pie. Además, de seguro serán una guía para muchos otros fabricantes. A pesar de que esta nueva generación de plegables es más barata que sus predecesoras, el precio de estos aparatos sigue siendo muy elevado.

Nota: ⭐⭐⭐⭐⭐


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 21 de septiembre de 2021. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.