Seguridad: lo que debes hacer para evitar robos en tu casa mientas sales de vacaciones

Después de días o semanas de angustia por cerrar el año, dejar la pega hecha, reservar el alojamiento, revisar el auto, planificar el viaje, comprar lo que falta, organizar los paseos y asegurarse de que todo esté en orden para las anheladas vacaciones, y justo cuando abandonas la ciudad listo para desconectarte por un tiempo, aparece un factor de ansiedad que quizá no te abandone hasta que estés de vuelta: qué pasará con la casa cuando esté sola.

No hay cifras muy precisas al respecto, en especial porque después del estallido social y la pandemia muchas tendencias cambiaron, pero la sensación de que los robos en las viviendas aumentan durante el verano tiene cierto asidero.

“En los periodos estivales o de vacaciones —ya sea fines de semana largo, Fiestas Patrias o de invierno—, vemos un aumento de entre un 10 y un 15% de estos incidentes”, dice Patricio Bustos, experto en monitoreo de alarmas y gerente por varios años de una importante empresa de seguridad.

Una tendencia que también es identificable en la comuna de Providencia, al menos hasta antes del 2019: aunque disminuyen año a año, según Francisco Díaz-Valdés, director de Seguridad de esta municipalidad, los robos suelen tener cierta alza durante los primeros trimestres. “Los ladrones saben que las casas están más vulnerables”, explica Bustos.

Pero estos números y casos son lo último que uno quiere saber manejando por la carretera con cientos de kilómetros por delante, o sentado esperando a que despegue el avión, o como sea que uno se vaya de vacaciones. ¿Es posible descansar sabiendo que el querido hogar se queda solo y vacío, sin nadie que lo defienda?

Reconozcámoslo: los chats comunitarios de WhatsApp suelen ser agotadores. Abundan las noticias que nadie pidió, las quejas exageradas, los memes aburridos y los stickers de dudoso gusto. Casi todos los mantenemos silenciados, pocos les prestamos atención, pero para estas circunstancias conviene mantenerse activo en el grupo y en buena onda con los demás vecinos.

Al menos eso es lo primero que sugieren los expertos en seguridad, ya que mantener informada y comunicada a la cuadra puede reducir bastante los riesgos de que la casa sea víctima de un robo. “La clave es la comunidad que puedas armar en torno a tu hogar”, dice Bustos.

“Siempre ayuda tener contacto con los vecinos”, agrega Díaz-Valdés. “Los WhatsApp de la comunidad son muy útiles para informarse y estar alerta rápidamente ante cualquier sospecha”. En algunos de estos grupos barriales de Providencia, cuenta, hay personal de seguridad de la comuna, por lo que ante cualquier aviso de robo o violación de domicilio se enteran de inmediato.

Ya sea a través de estos chats o mediante métodos más antiguos y ya no tan usados —como saludarse y presentarse en persona—, siempre será bueno tener una relación de confianza con los vecinos, especialmente con los que viven directamente al lado.

“A ellos hay que avisarles que uno saldrá de vacaciones, que sepan que la casa estará sola y que puedan echarle un ojo diariamente”, sugiere Bustos. Mejor aún si se les comparte una llave para que saquen la correspondencia, el diario si es que se está suscrito, y cualquier indicio que pueda demostrar que no hay nadie en ella.

El objetivo es que la casa no parezca tan deshabitada, que haya ciertas señales de vida en ella. Si no es un vecino, se le puede pedir a un amigo o familiar que vaya de vez en cuando, ojalá de noche, para que prenda las luces, entre lo que haya quedado afuera y le dé algo de movimiento al hogar.

“Hemos visto que los ladrones están cada vez más tenaces y temerarios, pero en general siguen tratando de no correr el riesgo de encontrarse con alguien en las casas”, dice Bustos.

Así como conviene que la comunidad y nuestro entorno sepa que estaremos de vacaciones, mejor es no compartir demasiado de nuestro viaje en redes sociales. Hay suficiente evidencia de que los delincuentes se enteran o confirman la ausencia de los moradores por las fotos que publican en Facebook o Instagram.

Por muy evidente que parezca, tener buenas cerraduras en las puertas de acceso, así como que las ventanas queden bien cerradas, es un importante disuasivo contra un robo. Se dice que los delincuentes siempre se las ingeniarán para entrar donde se lo propongan, pero entre menos puntos de acceso tengan, menos atractiva les parecerá.

“Ideal si se cuenta con un sistema de alarmas”, dice Díaz-Valdés. Lo mismo, obviamente, sugiere Bustos, quien trabaja en una empresa que entrega ese servicio. El formato que podría entregar más tranquilidad es aquel de monitoreo permanente, en el cual una persona está viendo 24/7 lo que ocurre fuera de nuestra casa a través de las cámaras de seguridad.

Pero como no todo el mundo puede costear un servicio como ese, lo recomendable en cambio sería reforzar puertas —añadir una cerradura extra, si es que solo se cuenta con una, nunca estará de más—, comprobar que los pestillos de las ventanas funcionen, y si se tienen persianas o algún otro elemento de protección, mejor aún.

La anterior cerradura Scanavini, por ejemplo, tiene un cerrojo de dos pitones y la llave da una triple vuelta. Es fácil de instalar y sirve para puertas de entrada o rejas de acceso.

“Instalar cerraduras múltiples, especialmente en los departamentos, ayudará tanto a dificultar un robo como a aumentar nuestra tranquilidad cuando no estamos”, explica el jefe de seguridad de Providencia.

Él también sugiere dejar las puertas interiores de la vivienda cerradas con llave, si es que las tienen, para así agregar otra barrera más.

¿Qué pasa si mis vecinos no son de confianza y tampoco contamos con alguien que pueda ir a la casa con tanta frecuencia? Ahí no queda más que hacer como Mi pobre angelito y simular que hay mucha vida en la casa, aún cuando los únicos seres vivos en ella sean las plantas.

Mientras el personaje de Macaulay Culkin tuvo que recurrir a maniquíes, muñecos y figuras de cartón, nosotros podemos apelar a menos ingenio pero más tecnología con las luces inteligentes.

Estas ampolletas, que por fuera lucen como cualquier otra, son capaces de conectarse a internet y pueden ser controladas a distancia mediante una aplicación móvil. Da lo mismo dónde estemos, si contamos con conexión a la red podemos encenderlas, apagarlas o incluso cambiarles el color de su luz.

No son muy baratas pero su tecnología LED les da larga vida útil. Hay unas más “inteligentes” que otras, pero si el objetivo es simplemente prenderlas de lejos, cualquiera que se conecte a internet va a cumplir su cometido. El requisito es que la casa cuente con buena conexión wifi mientras no haya nadie.

Pero si la conectividad es un problema están los viejos y queridos timers, enchufes que vienen con un reloj incluido y a los cuales uno puede programar para que el aparato al que están conectados —en este caso lámparas de mesa o de pie— se enciendan a la hora que uno determine.

“Si se van a usar este tipo de luces, conviene dejar las cortinas un poco abiertas, para que se vea que están prendidas”, apunta Patricio Bustos. Mucha gente piensa que entre más bloqueada quede la vista exterior de la casa, más segura se encontrará, pero Francisco Díaz-Valdés dice que es lo contrario.

“Una mayor visibilidad del exterior hace que sea más difícil entrar a una casa”, explica, puesto que el ladrón queda más expuesto a ser observado desde afuera. Pero con muros continuos o rejas tapadas, “si una persona ingresa nadie los ve”.

Pero si desde la calle es posible mirar al interior, entonces será fundamental no dejar a la vista cosas de valor, como bicicletas, herramientas, motos y otros elementos que llamen la atención. “Todo hay que dejarlo lo más guardado o escondido posible”.

*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 16 de septiembre de 2024. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.