Los AirPods, lanzados en su primera versión a finales de 2016, son los audífonos inalámbricos TWS —true wireless stereo— fabricados por Apple, que no usan cable ni entre ellos ni para conectarse a un dispositivo. Además de poder escuchar tus canciones favoritas, permiten recibir llamadas telefónicas —cuentan con micrófono— y controlar la reproducción con un simple toque, entre otras virtudes. Su gran calidad de sonido los ha convertido en uno de los favoritos de los consumidores: si en 2019 llegaron a más de 60 millones de unidades vendidas, en 2021 duplicaron esa cifra, comercializando alrededor de 120 millones de audífonos.

Uno de sus compradores es Francisco M., un santiaguino que, como tantos otros, tiene el hábito de ponerse audífonos para hacer más llevaderos sus viajes por la ciudad. “Hace poco más de un año necesitaba unos auriculares in-ear, ya que me muevo en transporte público y son más cómodos”, cuenta. Él trabaja en una conocida cadena especializada en tecnología, por lo que cotizó y se informó antes de adquirirlos. ¿Su experiencia con los AirPods? “Puras cosas buenas”, dice. “Como tengo iPhone, el ecosistema de Apple funciona muy bien, además de que la cancelación de ruido realmente aísla el sonido externo y la carga inalámbrica nunca ha dado problemas”.

“La tecnología que está incluida en los AirPods es bien innovadora”, afirma Mario Saavedra, especialista en productos Apple, más conocido como @MacGenio. Si bien los audífonos de la marca californiana no fueron los primeros de su tipo —desde 2014 ya existían en el mercado europeo y japonés auriculares completamente inalámbricos—, sí resultaron ser los pioneros en entregar una conectividad rápida y estable, en incorporar micrófonos para responder llamadas y otorgar, con el estuche de carga, una autonomía de hasta 24 horas.

Por eso, desde que se lanzaron al mercado, “un montón de marcas han copiado desde la forma hasta ciertas funcionalidades de los AirPods”. La efectividad y comodidad del producto, sumado a la decisión de Apple de quitar, desde entonces, la entrada de audio cableado a sus teléfonos, disparó las ventas hasta volverse el accesorio más rentable de la marca. Si bien la competencia se ha puesto al día, y hoy existen muchas opciones de gran calidad, el dilema para muchas personas sigue siendo el mismo: ¿vale la pena invertir en un par de AirPods?

A continuación analizaremos los AirPods Pro (2ª generación) y veremos qué tanta diferencia le saca al resto.

Características básicas

1. Driver

El tamaño del diafragma, driver o transductor es uno de los principales indicadores de la calidad de audio que ofrecerán los audífonos, tal como explicábamos en un artículo anterior. El driver es el componente que produce el sonido en el dispositivo, por lo que el tamaño sí importa: se entiende que entre más diámetro este tenga, más potencia y calidad de sonido podrá generar. Cuando los audífonos son over-ear —aquellos que cubren las orejas completamente—, el tamaño del driver fluctúa entre los 40 mm y los 100 mm.

En el caso de los AirPods Pro, que son audífonos in-ear —o intraurales, el formato más pequeño que existe— estos tienen 11 mm. Según el sitio especializado en tecnología Versus, los 11 mm de los AirPods Pro están por sobre la media de 9,26 mm, el promedio de los aurculares TWS de la competencia. Por lo tanto, adquiriendo el modelo más reciente de Apple obtendrás uno de los drivers más contundentes del mercado.

Audífonos inalámbricos Apple AirPods Pro (1ª generación)


2. Rango de frecuencia

Se dice que nuestra audición puede percibir sonidos que oscilan en un rango de frecuencia que va de los 2 mil a los 5 mil hertz (Hz). Aunque los sonidos que tengan una frecuencia más baja o más alta nos resultan imperceptibles, de todas formas los sentimos con el resto del cuerpo, especialmente mediante vibraciones. Por eso, si se quiere una gran experiencia y calidad de audio, no se recomienda optar por audífonos que no ofrezcan una capacidad de respuesta entre los 20 y los 20 mil Hz. En el caso puntual de los AirPods Pro, estos justamente ofrecen sonido en ese rango: entre 20 y 20 mil Hz.

3. Conectividad

Con los audífonos inalámbricos nos entregamos completamente al Bluetooth, la tecnología inalámbrica por excelencia. Según explica Marcos Salazar Suazo, docente de carreras de Sonido en Duoc UC, lo ideal hoy en día es que cuenten con la versión 5.3, la más reciente en el mercado masivo, que asegura “un correcto funcionamiento a la distancia y mayor traspaso de información, evitando además posibles interferencias con otros dispositivos”. Si tanto los audífonos como el dispositivo central —computador, teléfono móvil o tablet— cuentan con Bluetooth 5.3, se garantiza un buen y rápido sistema de transmisión de audio con pocas pérdidas en la transmisión de la señal. Los AirPods Pro tienen Bluetooth 5,3, así que ese ítem está aprobado.

4. Sonido

Para que el sonido de un audífono sea clasificado como “rico” debe ir de la mano con una compatibilidad de códecs de alta resolución. En el caso de los audífonos Apple, en su sitio explican que trabajan con el códec AAC de Apple, que “garantiza una calidad de audio superior”. En la práctica se traduce a que el bitrate máximo es de 256 Kbps de calidad, mientras que la competencia trabaja con códecs como el LDAC que puede llegar a alcanzar hasta los 990 Kbps de bitrate.

Por lo tanto, si quieres escuchar audio en alta definición y sin pérdidas de calidad, no podrás hacerlo en los AirPods Pro, algo que sí es posible, por ejemplo, con los Sony WF-1000XM4 —que cuestan un poco menos— o los Huawei FreeBuds Pro 2, también más económicos.

Ahora bien, si usarás los audífonos para reproducir audios desde plataformas de streaming como Spotify o YouTube, que no ofrecen audio en alta resolución, este punto no influirá para nada. Y en ese rango, los AirPods Pro se comportan bastante bien.

5. Cancelación de ruido

Esta función se ha vuelto muy importante para muchos consumidores, e incluso determina su decisión de compra. Porque poder aislarse del ruido externo y solo escuchar el sonido que sale de los audífonos, algo que parecía magia hace unos pocos años, hoy ya es un estándar en la industria.

¿Cómo funciona la cancelación de ruido activa? En este artículo lo explicamos en detalle, pero como lo resume Mac Genio, se trata de “pequeños micrófonos que detectan la frecuencia del sonido exterior y que luego unos también pequeños parlantes lo anulan, emitiendo la misma frecuencia”. Entre más y mejores micrófonos para esto tengan los audífonos, y más sofisticado sea su software, “mejor será la cancelación de ruido”.

Los AirPods Pro, por supuesto, tienen cancelación activa del ruido, lo que se traduce en menor fatiga en los oídos, ya que no hay que subir el volumen para superar el ruido de fondo. Técnicamente, el chip H2 que traen usa algoritmos computacionales para lograr una cancelación de ruido más inteligente y adaptativa.

“Yo me subo al metro y no siento la bulla, ni de los trenes ni de la gente ni de nada”, dice Mac Genio, es un usuario ferviente de los AirPods Pro. Según Apple, el chip H2 procesa el sonido 48.000 veces por segundo, con lo que es capaz de detectar los sonidos fuertes y atenuarlos de inmediato. De acuerdo al sitio español Xataka, especializado en tecnología, la cancelación de ruido de los últimos AirPods Pro es de las mejores del mercado.

6. Batería

Otro punto importante y que no puede pasar desapercibido es la batería. Si su autonomía no es suficiente, la experiencia puede ser un calvario. La idea es olvidarse lo más posible de cargarlos, que sea solo algo que haya que realizar de vez en cuando y no todos los días.

En el caso de los AirPods Pro, sus tiempos son similares entre todas las generaciones: unas 6 horas de audio con una sola carga. Pero si sumamos la batería que entrega el estuche —donde sí o sí debemos guardarlos cuando no los usamos—, la autonomía se eleva a las 30 horas, lo que no está nada de mal.

7. Audio espacial

Este es uno de los puntos que han vuelto todavía más fans a varios consumidores de AirPods. Se trata de una función que se puede activar desde el teléfono —hay que contar con iOS 14 o superior— y que permite que el audio no llegue solo por izquierda o derecha, como siempre ha pasado, sino que desde distintos puntos según cómo te vayas moviendo. Usando giroscopios y acelerómetros, los audífonos reconocen la posición de tu cabeza y así configuran la dirección en la que entregan el audio.

Mario Saavedra lo usa y lo explica así: cuando giras la cabeza, la música no gira contigo sino que mantiene su dirección, como si estuvieras en un concierto. Y si vuelves a mirar hacia adelante, se redirige a la forma tradicional. “Es algo bien inmersivo. A veces siento como si estuvieran cantando al lado mío, porque se dan vuelta los instrumentos o se va cargando la música de un lado al otro. Es algo bien choro y que no tienen los demás audífonos”, puntualiza.

¿Vale la pena comprarlos?

Después de este análisis, la respuesta que podemos entregar es que sí, pero solo les podrás sacar completo partido si ya estás dentro del ecosistema de Apple. Es decir, si cuentas con un iPhone —superior al 7—, un iPad o un computador Mac. De otra manera, mejor elige algunas de las opciones que hemos reseñado, más económicas y compatibles con todos los sistemas operativos por igual.

“Yo creo que te vas a gastar plata de más si compras unos AirPods Pro para un teléfono Android”, señala Saavedra. “No tendrás la experiencia completa ni serán muy diferentes a otros buenos audífonos de la competencia”. Según él, es como comprarse una entrada en primera fila pero terminar sentándose en un pasillo.

Esto ocurre porque los AirPods, sean de la generación que sean, hablan de forma nativa con todos los dispositivos Apple. Se enlazan automáticamente, sin necesidad de parearlos, y puedes incluso usarlos en más de un dispositivo de la marca al mismo tiempo. Por lo tanto, jamás tendrás esos odiosos problemas de conectividad, ni esperar a que se encienda una luz de otro color, y podrás configurarlos y personalizarlos con mucha facilidad.

“Todo anda perfecto. No necesitas saber cómo funcionan porque simplemente funcionan”, dice el especialista. De hecho, él aún tiene sus AirPods de primera generación, que a pesar de los años y el uso, siguen tan buenos como antes. “Si tú los miras, vas a pensar que son nuevos. Tienen tres años de uso diario y no tienen ningún problema”, asegura.

Audífonos inalámbricos Apple AirPods Pro (2ª generación)


Otros consejos

Ojo con la gomita

Para usuarios o futuros consumidores de AirPods, la goma que se le pone a la cabeza del auricular y que entra en el oído es de suma importancia. “El audífono tiene que estar bien ajustado, para que tenga la mejor calidad de conducción de ruido y no se caiga pero tampoco duela”, dice Saavedra. De lo contrario se pierde el efecto de hermetismo, por lo que en la práctica, no se va a escuchar tan bien. Cada AirPod viene con cuatro tamaños de gomitas, por lo que solo debes darte el tiempo de probar y analizar cuál es la que sientes mejor en relación al sonido.

“Pero mucho cuidado cuando las uses, porque es fácil que se caigan”, advierte. Como son muy chicas, conoce a muchas personas que las han perdido al caérseles en ascensores, rendijas de desagües en la calle o simplemente al rebotar y desaparecer en algún rincón de la casa.

Compatibilidad con Roku

Los Apple TV son dispositivos que convierten cualquier televisor convencional con entrada HDMI en un smart TV. Son un gran aparato, de excelente diseño y calidad, aunque mucho más caro que todo el resto de su competencia.

Por ejemplo, uno de tercera generación, que tiene resolución 4K y 64GB de memoria, bordea los 220 mil pesos. Una alternativa más accesible, pero que funciona igual de bien, es Roku. La gracia, además, es que a través de su app uno puede enlazar los AirPods a la TV. “Tengo la app en mi iPhone, que a la vez se conecta con los AirPods, entonces yo ahora escucho calladito mis películas y series. Simplemente espectacular”, opina. Para saber los detalles, acá hay unas instrucciones (aunque en inglés).

Cuidados básicos

Tengas los audífonos inalámbricos que tengas, estos pueden fallar si no los manipulas bien. “Por mal uso, fatiga de material o humedad”, dice Salazar, docente Duoc UC. La recomendación, “para garantizar su buen funcionamiento, es darle un buen cuidado y limpieza”.

Un ejemplo: los AirPods Pro son resistentes al agua y al sudor (IPX4), sin embargo, esto no significa que puedas ducharte con ellos o lanzarte a una piscina a nadar, al menos con estos aún no. Sí puedes ir al gimnasio y hacer tus rutinas sin el miedo de que se echen a perder, aunque debes sacarlos una vez que estén muy sudorosos.

Compra solo en recintos autorizados

Lamentablemente hay varios comercios que se han pasado de listos en vender productos Apple, y en realidad no lo son. Para asegurarte, debes fijarte que el producto se encuentre sellado y con las protecciones adecuadas. Si los sellos están vulnerados, tienes todo el derecho a reclamar.

Pruébalos en tienda

No hay mejor experiencia que la que vives tú mismo, y si estás indeciso entre la calidad del sonido y el precio, lo mejor que puedes hacer para salir de dudas es ir a probarlos a una tienda. Mejor aún si tienes algún amigo o conocido que sea dueño de unos AirPods. De esta forma podrás asegurarte que es la calidad de sonido que buscas.


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 11 de mayo de 2023. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.