El explosivo crecimiento de Xiaomi en Chile (y el mundo) no deja de llamar la atención. Si bien la marca gozaba de una especie de estatus de culto entre ciertos consumidores, una vez que Xiaomi se asentó oficialmente en nuestro país —más o menos hace un año— ha tenido un despliegue sorprendente con su amplia gama de productos. Sin ir más lejos, y a partir de datos de la compañía, Xiaomi está hoy en el segundo lugar en ventas de celulares en Chile. Eso no es algo menor.

Xiaomi ha sido una marca muy matea a la hora de entrar en el codiciado segmento de los celulares de gama media con prestaciones premium. Ese parece ser el punto ideal en donde la gran mayoría de las marcas —especialmente las chinas— enfocan sus esfuerzos, integrando la mayor cantidad de poder, rendimiento y características en un modelo, recortando esquinas y ofreciéndolos luego a atractivos precios, muy por debajo de los valores que puede tener hoy un celular de gama alta de Apple o Samsung.

En ese sentido, su último modelo y nuevo flagship de la compañía, el Xiaomi 11T Pro 5G, es sorprendente. No sólo por sus especificaciones técnicas sino que también por la versatilidad de sus funciones, que lo transforman en uno de los mejores teléfonos de gama alta disponible en el deseado segmento anteriormente descrito. No es un smartphone perfecto, aclaremos, pero ofrece mucho para su valor. Revisémoslo.

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Especificaciones

  • Tamaño: 164.1 x 76.9 x 8.8 mm
  • Peso: 204 gr
  • Pantalla: 6.57″ AMOLED 1080 x 2400, Dolby Vision 120 Hz, HDR 10+
  • Procesador: Qualcomm Snapdragon 888 5G de ocho núcleos
  • Memoria: 256GB de almacenamiento / 8GB de RAM
  • Batería: 5.000 mAh, con cargador de 120 W.
  • Cámara: 108 MP, f/1.8, 26mm (gran angular) / 8 MP, f/2.2, 120˚ (ultra gran angular) / 5 MP, f/2.4, 50mm (telemacro) / Selfie 16 MP, f/2.5, (gran angular)
  • Sistema operativo: Android 11 (con interfaz nativa MIUI 12.5)

Una vez que es sacado de su caja, el 11T no se distingue de otros smartphones de esta categoría. Es decir, durante las primeras impresiones no destaca tanto en cuanto a su diseño, que es correcto: agradable en la mano y al tacto, relativamente liviano (poco más de 200 gramos) y elegantemente clásico. Viene en tres colores y su confección es plástica, de policarbonato, ensamblada con un marco de aluminio. Es atractivo, pero se parece mucho a otros teléfonos de similar categoría.

Atrás, en la parte superior izquierda, tenemos las cámaras con sus tres lentes y más abajo el nombre de la marca, con un bonito fondo cepillado. Lógicamente, al momento de poner la inevitable cobertura protectora plástica, el celular baja un poco en la esencia y elegancia original de su diseño.

En el costado izquierdo no hay botones, pero en el lado derecho tenemos el tradicional despliegue con el control de volumen y, al centro, el botón de encendido, que además cuenta con un lector biométrico de muy rápido reconocimiento y acceso al sistema. Abajo está la entrada para la tarjeta SIM, al centro el conector USB-C y uno de los dos parlantes Harman-Kardon, que otorgan un sonido decente y potente, pero nada para volverse loco si se pretende usar sin emparejamiento a un sistema de sonido. Finalmente, arriba nos encontramos con el otro parlante y un micrófono. No, no hay entrada para audífonos.

La pantalla es muy rica. Es AMOLED, tiene protección Gorilla Glass Victus y un tamaño de casi 6.6″, muy grande, lo que la incómoda para quienes cuentan con manos pequeñas. Pero es un display generoso, full HD, de imágenes brillantes y muy buen contraste, con una excelente tasa de refresco de 120Hz. Ya sea en videojuegos, videos o simplemente haciendo scroll en alguna red social, la experiencia resulta totalmente fluida y suave, sin ningún tipo de contratiempo o demora de respuesta.

Gracias a su procesador Qualcomm Snapdragon 888 —que es el tope de línea para dispositivos móviles— sus 8GB de RAM —que pueden ampliarse a 12— y sus ocho núcleos garantizan que la respuesta a la hora de hacer arrancar el teléfono, ejecutar aplicaciones o cambiar de pantallas sea absolutamente rápida. Todo tipo de acción es veloz y no hay ninguna clase de demora entre saltar de una aplicación a otra.

Posee 256GB para almacenamiento, sin posibilidades de extensión, pero para los tiempos actuales es una cantidad de espacio más que suficiente, ya que para todo los demás está la nube. De hecho, al comprar el aparato se incluye una suscripción a Google One por un año, además de garantía extendida.

La carga más rápida del oeste

Esto nos lleva a hablar de su batería. Como buen celular de esta gama, el 11T ostenta una batería de litio de 5.000 mAh, una gran capacidad que va de la mano con un excelente rendimiento. Con la tasa de refresco en 120 Hz, que consume más energía, su autonomía llega a las 18 horas, la que sube a 25 si la tasa está en 60 Hz. Pero quizás lo más llamativo es su imposible (y maravilloso) cargador de 120 watts —cifra que es casi el doble que el promedio—, lo que permite una carga ultra rápida, incomparable a ningún otro teléfono que hayamos probado recientemente.

De hecho, según dice el fabricante —y como pudimos comprobarlo—, el cargador de 120 w permite que el teléfono llegue de cero al 100% de su batería en menos de 20 minutos. Sorprendente. Y definitivamente un nuevo estándar en lo que se refiere a cargas rápidas.

Cámaras aceptables con un gran software

El set de cámaras es lo que más destaca Xioami en este modelo. Cuenta con una potente triple cámara, con un gran angular de 108MP, un telemacro de 2x y un objetivo ultra gran angular de 120°, además de la cámara frontal para selfies de 16MP. Junto a ello, el software fotográfico incluye una docena de múltiples opciones para fotos y videos, desde cámara lenta hasta modos nocturnos, videos duales, clonación de imágenes y efectos varios.

El 11T Pro también cuenta con capacidades de filmación computacional, lo que se traduce en modos de grabación de cine que utilizan inteligencia artificial. En un solo clic, por ejemplo, y sin necesidad de apps complementarias, se pueden borrar cuadros, congelar fotogramas, hacer Audio Zoom (que le da una ganancia especial al sonido ambiente o a una fuente específica de audio), además de grabación hasta en 8K y HDR 10+. Los resultados al filmar en esta altísima calidad y con tal variedad de efectos son muy buenos, a pesar de que el set fotográfico no es tope de línea.

La usabilidad es muy cómoda y fluida. Gracias a su pantalla y especificaciones, el rendimiento es muy bueno y las posibilidades de personalización del aparato son amplias y sencillas de acceder. Un gran mérito del ecosistema que ofrece Xiaomi (muy parecido a otros, como los de Samsung, Apple o Huawei), que dispone de almacenamiento remoto, vinculación de aparatos domésticos (audífonos o smartwatches) e incluso búsqueda de teléfono perdido. A la interfaz aún le falta algo de pulido, ya que el teléfono incluye varias aplicaciones que seguramente no van a servir de mucho (las llamadas bloatware) y de seguro que terminarán siendo desinstaladas.

Veredicto Práctico

El Xiaomi T11 sorprende dentro de su categoría, un mercado saturado por este tipo de modelos que tratan de incluir lo que más se pueda, pero tratando de tener precios amigables. Es difícil que otras marcas puedan superar hoy lo que incluye Xiaomi en este smartphone. Aunque no se trate de un teléfono perfecto, claramente dentro de sus ligas este es un teléfono ganador.

Con su carga rápida, su pantalla y su procesador, el 11T resulta muy exitoso en su categoría, pero eso no quita que en términos de personalidad aún le faltan detalles que lo hagan resaltar como un modelo realmente único, especialmente en cuanto al diseño. Aún así, éste debe ser el teléfono que más le entrega al usuario a partir de su valor, que está muy por debajo de lo que uno se podría imaginar.

Nota: ⭐⭐⭐⭐★


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 9 de noviembre de 2021. Los valores y disponibilidad pueden cambiar.