BofA: inversionistas se lanzan a la renta variable y la renta fija en medio de un “escenario ideal”

Los inversionistas pusieron fondos en activos de renta variable y de renta fija y retiraron dinero del oro en la semana hasta el miércoles, según BofA Global Research, animados por una serie de datos positivos y cambios de políticas.

“No se puede tener un escenario más ‘Ricitos de oro’ que este”, dijo el informe sobre las cifras del jueves, que mostraron que los precios al consumidor en Estados Unidos cayeron un 0,1% intermensual y que las solicitudes de subsidio por desempleo fueron de 205.000, una referencia a que algo “es ideal”, como en el cuento de hadas.

Los datos del IPC ofrecen la esperanza de que la inflación se encuentre ahora en una tendencia a la baja sostenida, lo que debería permitir a la Reserva Federal reducir aún más el ritmo de sus subidas de tasas de interés el mes que viene.

BofA también señaló el impacto de la reapertura de las fronteras chinas tras el levantamiento de las restricciones por el Covid-19, la baja de los precios de la energía en la UE y los alentadores datos fiscales y del mercado laboral de Estados Unidos como factores que explican estos movimientos.

Según el informe, se produjeron flujos semanales hacia fondos que invierten en bonos (US$ 17.500 millones), efectivo (US$ 8.300 millones) y acciones (US$ 7.200 millones), y hacia fondos que invierten en oro (US$ 400 millones).

BofA también señaló que se había producido la mayor entrada en bonos con grado de inversión desde el 21 de julio (US$ 10.400 millones), y la mayor entrada en deuda de mercados emergentes y acciones de mercados emergentes desde el 22 de abril (US$ 3.600 millones).

Según los analistas, se trata de una “clásico giro de enero”, en el que los “perdedores de 2022 (criptomonedas, bonos del Tesoro de Estados Unidos, China, crédito y acciones) aplastan a los ganadores de 2022 (efectivo y materias primas)”.

El índice de referencia europeo STOXX cotiza en máximos de nueve meses, el índice Hang Seng de Hong Kong está en máximos de seis meses, e incluso el bitcoin alcanzó su máximo en dos meses tras los datos de inflación de Estados Unidos.