El alza del dólar y fantasma de la recesión golpean severamente al petróleo y el barril cae a niveles previos a la guerra en Ucrania

Los precios internacionales del petróleo registran caídas severas y se ubican en los niveles previos a la invasión de Rusia en Ucrania, en medio de los temores por el efecto que tendrá la trayectoria alcista de las tasas en EEUU y el incremento del dólar que se ubica en máximos históricos.

En Nueva York, el precio del crudo WTI (que sirve de referencia para Chile) registra una contracción de 5,3% en relación a la sesión previa y se transa en US$ 91,2 por barril, el nivel más bajo desde el 18 de febrero pasado.

En el mercado spot de Londres, el crudo Brent del Mar del Norte se ubica en su nivel más bajo desde esa misma fecha. Se cotiza en US$ 95,07, lo que supone una baja de 4,53% en relación a la víspera.

Los precios del crudo han caído de manera sistemática en las últimas semanas, al alero de los temores por una eventual recesión económica mundial, los cuales se acentuaron ayer con la cifra del IPC de EEUU que superó las proyecciones de los expertos.

El dato alentó las expectativas de un mayor endurecimiento monetario por parte de la Reserva Federal para combatir la inflación que se encuentra en máximos de cuatro décadas.

Esta situación anuló completamente la inquietud que había generado la estrechez en el suministro de crudo provocada por el conflicto bélico y que llevó al barril a superar la barrera de los US$ 120 a comienzos de marzo.

“El crudo está en caída libre, ya que los datos de demanda son más débiles y los factores de riesgo macro abruman por completo el mercado físico fundamentalmente ajustado”, dijo Rebecca Babin, operadora sénior de energía de CIBC Private Wealth Management.

“Los riesgos en las próximas semanas parecen inclinados a la baja, lo que mantiene incluso a los alcistas más convencidos en modo de espera”, agregó la experta citada por Bloomberg.

El dollar index, que mide a la divisa estadounidense frente a una canasta de seis monedas líquidas, se encuentra en niveles jamás antes vistos. Ayer, de hecho, su valor superó al del euro por primera vez en 20 años.

Hay que recordar que un dólar más elevado hace más cara la compra de petróleo y otras materias primas.

“El daño colateral del creciente temor a la inflación es la fortaleza del dólar, que también es bajista para los precios del petróleo. Curiosamente, los mercados físicos siguen siendo fuertes, pero el cambio de confianza de los inversores financieros es actualmente la fuerza motriz dominante”, afirmó Tamas Varga, analista de PVM Oil Associates, a la agencia Reuters.

La semana pasada, Citi estimó que el barril podría desplomarse a US$65 hacia fines de este año e incluso caer a US$45 para fines de 2023 si ocurre una recesión que detenga la demanda.

Esa perspectiva se basa en la ausencia de cualquier intervención por parte de los productores de la OPEP+ y una disminución en las inversiones petroleras, dijeron en un reporte los analistas Francesco Martoccia y Ed Morse.

“Para el petróleo, la evidencia histórica sugiere que la demanda de petróleo se torna negativa solo en las peores recesiones mundiales”, dijeron los analistas de Citi en la nota del 5 de julio. “Pero los precios del petróleo caen en todas las recesiones hasta aproximadamente su costo marginal”, agregaron los expertos, citados por Bloomberg.

En la vereda opuesta está JP Morgan. El banco estadounidense dijo que el petróleo podría llegar a un nivel “estratosférico” de US$380 por barril si las sanciones de Estados Unidos y Europa incitan a Rusia a infligir recortes en la producción de crudo como represalia.

Hay que recordar que el petróleo es en extremo sensible para la economía chilena toda vez que importa más del 90% de lo que consume. Los altos precios que había logrado el barril sumado a los niveles históricos del dólar frente al peso chileno disprararon el precio de los combustibles a niveles jamás antes vistos.

Esta coyuntura obligó al gobierno de Sebastián Piñera a modificar los parámetros del Mecanismo de Estabilización de Precio de los Combustibles (Mepco) mientras que la administración Boric duplicó el monto de esa herramienta hasta los US$ 3.000 millones.