Felipe Larraín por manejo de Marcel: “No basta con mencionar el crecimiento, hay que tener políticas que lo estimulen y la reforma tributaria no lo hace”

En el marco de un nuevo aniversario del estallido social, Felipe Larraín –quien para el 18-O de 2019 era ministro de Hacienda y dejó el cargo tras el cambio de gabinete realizado por el expresidente Sebastián Piñera en medio de la crisis–, se refirió a las transformaciones que ha experimentado Chile desde entonces, enfatizando en la responsabilidad que tiene el actual jefe de la cartera que ocupó en mejorar la situación país.

El economista, director del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales UC (CLAPES UC), señaló en entrevista con Radio Infinita que, según la encuesta Cadem, las personas al comparar la realidad de hoy con la de hace tres años atrás indicaron en todos los ítems que Chile está peor.

El también director independiente de Cencosud planteó los resultados con preocupación, enfatizando que las áreas que fueron peor evaluadas fueron delincuencia, violencia y situación económica con un 93%, 90% y 75%, respectivamente.

En esta línea, el ex titular de Hacienda dijo que “no hay progreso en los últimos tres años, y es a algo a lo que nos tenemos que abocar a reducir. Hay una responsabilidad muy grande del gobierno en seguridad, en controlar la inflación y en generar condiciones para el crecimiento”.

Por lo mismo, Larraín indicó que el desarrollo tiene que ser el foco del actual jefe de Hacienda, Mario Marcel. “El tema del crecimiento es absolutamente central para tener empleos de calidad en estos momentos en los que están cayendo los salarios reales en nuestra economía entre 2% y 3% a efectos de una inflación que se salió de control”, planteó.

En ese sentido, el economista criticó que para el Gobierno adecuar el escenario para el desarrollo y la inversión “está siendo el último vagón del tren”. “No basta con mencionar el crecimiento, hay que tener políticas que lo estimulen y la reforma tributaria no lo hace”, afirmó.

Luego de haber liderado el Ministerio de Hacienda durante el primer y segundo mandato de Sebastián Piñera, Larraín sostuvo que el proyecto de reforma tributaria en el que actualmente se trabaja está teniendo objetivos muy ambiciosos, y que en cambio, debiese orientarse a una “recaudación razonable y que permita que este país se desarrolle y tenga más crecimiento, más inversión”.

Así, el economista señaló que también Marcel va a tener “el desafío de vivir con su presupuesto”. Si bien el Presupuesto 2023 fue calificado como “responsable” por Larraín, dado “que contempla un incremento de gasto de 4,2% y una preocupación para reducir los déficit que hemos tenido y que han implicado aumentos en la deuda pública”, no descartó que existan presiones de gasto que compliquen la sostenibilidad fiscal.

“En unas circunstancias económicas más adversas, van a haber presiones para generar nuevos retiros”, planteó el ex ministro.

Así también, Felipe Larraín hizo hincapié en el desafío de fiscalizar la asignación de recursos para los programas gubernamentales a raíz del informe de la Dirección de Presupuestos (Dipres), destacando que hay gastos “como viáticos, viajes, compras de bienes y servicios en reparticiones públicas” en los que se podría ahorrar.

“Nosotros cuando entramos al gobierno hicimos un decreto de austeridad […] Todas estas cosas son señales que se pueden mandar. En mi recuerdo, nosotros tuvimos un ahorro de recursos cercano a los US$1.500 millones con este tipo de cosas”, planteó el economista.

Por último, Larraín indicó que la clave para que Hacienda afronte el actual escenario será la convergencia entre sectores. “No hay que pensar que el sector público es el lugar desde donde salen todos los recursos. El sector público es un quinto del total del gasto del país, y eso significa que hay un 80% que se realiza fuera, y allí hay que apuntar a que se pueda recuperar esa confianza para que podamos invertir y empujar la economía para que hayan empleos de calidad y mejoren los salarios”, dijo.