La carrera de los autos eléctricos se calienta a medida que las compañías de Detroit hacen su jugada
GM, Ford, y Chrysler propiedad de Stellantis, buscan cerrar la brecha con las startups.
La carrera de los autos eléctricos se está apretando, con Ford Motor Co. y General Motors Co. destacando sus nuevas camionetas eléctricas, y las compañías automotrices preparándose para lanzar un aluvión de nuevos modelos a batería este año y el siguiente.
Los ejecutivos automotrices han pasado los últimos años hablando de sus ambiciones, asignando miles de millones de dólares en nuevas inversiones para agregar más eléctricos a sus inventarios globales. Pero hasta ahora, la transición ha tenido lugar, principalmente, detrás de escena, con ingenieros y diseñadores preparando la próxima generación de vehículos.
Durante este año, los compradores de autos comenzarán a ver esos esfuerzos con más frecuencia en los lotes de los concesionarios. Los fabricantes de automóviles planean lanzar docenas de nuevos modelos eléctricos durante los próximos dos años en una variedad de diferentes estilos y precios, según analistas de Bank of America.
La llegada de estos vehículos eléctricos hace que la presión que tienen las empresas de automóviles pase de desarrollarlos a convencer a los consumidores de que los compren.
“Se acerca un mundo nuevo”, afirmó Carlos Tavares, director ejecutivo del fabricante mundial de autos Stellantis NV en la feria de electrónica CES el miércoles. “Ahora, la máquina está encendida y estamos avanzando rápidamente”.
El martes, Ford dijo que casi duplicaría la producción de su próxima camioneta eléctrica, la F-150 Lightning, luego de recibir un número de pedidos mayor de lo esperado. La camioneta saldrá a la venta en cantidades limitadas esta primavera.
La medida hizo que las acciones de Ford se dispararan, empujando su valor de mercado a US$ 97.600 millones al cierre del viernes, superando a GM y a Rivian Automotive Inc., una startup joven y atractiva que lanzó recientemente una camioneta totalmente eléctrica y se hizo pública en noviembre.
GM presentó el miércoles su camioneta eléctrica rival, una versión a batería de su popular Chevy Silverado, y la directora ejecutiva Mary Barra enumeró unos 10 vehículos eléctricos que estarán a la venta dentro de dos años, en comparación con solo los dos que hay en la actualidad.
Stellantis, propietaria de Jeep, Ram y otras marcas de autos, dijo la semana pasada que la marca Chrysler, de casi 100 años de antigüedad, será exclusivamente eléctrica para el 2028. La compañía automotriz también reveló que tenía un acuerdo para vender vans eléctricas a Amazon.com Inc., lo que lo convierte en un competidor de Rivian, que también tiene un acuerdo para vender vans al retailer electrónico.
Las acciones de Rivian cayeron un 11% con las noticias del miércoles y luego cayeron brevemente por debajo de su precio de oferta pública inicial, de US$ 78 por acción, por primera vez desde que salió a bolsa. Cerró el viernes a US$ 86,28 la acción.
Una vocera de Rivian dijo que el acuerdo de Stellantis era una buena noticia para la industria en su conjunto y que la propia asociación de Rivian con Amazon estaba intacta, prosperando y creciendo.
El cambio a los eléctricos está intensificando la batalla entre los fabricantes de automóviles tradicionales y los actores más nuevos, que se están adentrando en el negocio, de más de un siglo de antigüedad, de los autos.
Las compañías tradicionales de autos, como GM, Volkswagen AG y Toyota Motor Corp. tienen bolsillos más profundos, cadenas de suministro bien establecidas y el conocimiento de fabricación de automóviles para ayudar a remodelar sus líneas de producción.
Sin embargo, hasta hace poco, los inversionistas han inclinado sus apuestas, en gran medida, hacia Tesla y otras nuevas empresas que se centran únicamente en la fabricación de vehículos eléctricos. Estas empresas han recaudado miles de millones de dólares en financiación en los últimos años y no tienen las limitaciones de capital de tener que transformar un negocio construido principalmente en torno al motor en base a gasolina. Tesla, con un valor de más de US$ 1 billón al cierre del viernes, es ahora el fabricante de autos más valioso del mundo.
A pesar de todo el ruido, las compañías de automóviles —tanto nuevas como antiguas— todavía tienen un camino por recorrer para convencer a los consumidores de que se deshagan de la gasolina.
Las ventas de vehículos eléctricos están en alza, aumentando un 88% en el índice interanual del 2021, pero aún representan alrededor del 3,2% del mercado total de autos de Estados Unidos, según la firma de investigación Motor Intelligence.
Tesla tiene una sólida ventaja sobre las empresas automovilísticas rivales. Sus entregas globales aumentaron un 87% el año pasado, alcanzando alrededor de 986.000.
Solo en los Estados Unidos, Tesla vendió alrededor de 352.500 vehículos en 2021, o aproximadamente el 72% de todos los vehículos eléctricos de batería comprados, estima Motor Intelligence. Tesla no desglosa las ventas por región.
Por el contrario, Ford vendió alrededor de 27.000 vehículos eléctricos en 2021 y GM vendió alrededor de 25.000 el año pasado. Para ambas empresas, eso representó menos del 2% de sus ventas totales en EE.UU.
Para muchos concesionarios de autos, un vehículo eléctrico sigue siendo una venta difícil, en parte, porque no hay una amplia disponibilidad de estaciones de carga y los modelos con motor de gasolina son más asequibles a la hora de comprar, a pesar de los créditos fiscales destinados a hacer que los vehículos eléctricos sean más atractivos para los consumidores.
“Tenemos muchas conversaciones sobre vehículos eléctricos”, afirmó Ryan Gremore, presidente de O’Brien Auto Team de Illinois, Estados Unidos. “Pero no se ha traducido en consumidores que entren y digan ‘tengo que tener uno’”.
Tal sentimiento ha hecho poco para reducir las ambiciones de la industria automotriz, y los ejecutivos dicen que necesitan agregar más vehículos de cero emisiones a sus salas de exhibición para cumplir con las más estrictas regulaciones de contaminación del aire a nivel mundial.
Y con más opciones por venir, el cálculo está cambiando para los compradores. Una encuesta realizada, en agosto, por la consultora AlixPartners LLP encontró que el 19% de los encuestados de Estados Unidos dicen que es muy probable que su próxima compra de auto sea de uno eléctrico, en comparación con el 5% en 2019.
“Actualmente, la pregunta sobre los vehículos eléctricos es mucho menos sobre la demanda que sobre la oferta”, afirmó Dan Levy, analista de Credit Suisse.
Brad Sowers, un concesionario de autos en Missouri, dijo que el ritmo de las noticias sobre vehículos eléctricos está despertando más interés entre sus clientes. Sowers dijo que recibió 30 pedidos por la nueva Silverado eléctrica una hora después de su presentación. La nueva camioneta no saldrá a la venta hasta principios de 2023.
Weston Wellington, un ejecutivo de finanzas con un rancho y una granja de caballos, dijo que está listo para cambiar a un motor eléctrico para su próxima camioneta, afirmando que el rendimiento es superior al de las camionetas con motor de combustión interna. Dijo que se había inclinado por la nueva camioneta eléctrica R1T de Rivian, pero la nueva Silverado eléctrica a batería lo intriga.
“No estoy seguro de cuál”, afirmó Wellington. “Solo espero que haya mucho para elegir”.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.