La columna de Gonzalo Said: “El renacer de la confianza en las empresas”

Sanjatan
La columna de Gonzalo Said: “El renacer de la confianza en las empresas”

"Calificar a los empresarios de pesimistas ideológicos va justo en el sentido contrario a lo que el país necesita".



Chile ha vivido en los últimos años un escenario desafiante. La crisis derivada del estallido social en 2019 marcó un punto de inflexión en la percepción de la ciudadanía hacia las instituciones, particularmente hacia las empresas privadas. Este periodo de aguda desconfianza ha comenzado a revertirse desde 2022, evidenciando una paulatina recuperación de la confianza en las empresas. Este fenómeno no solo es alentador, sino que también reafirma el papel esencial del sector privado en el desarrollo sostenible del país.

De acuerdo con los datos el barómetro de la confianza en las empresas -índice que consolida la percepción de la ciudadanía en redes sociales con el resultado de una encuesta de opinión pública- elaborado por la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), el promedio de confianza en las instituciones ha aumentado 13 puntos entre 2021 y 2024, alcanzando un 54% -similar al valor alcanzado en 2019-, destacando un crecimiento del 23% en la confianza hacia las grandes empresas. Sin embargo, persiste una diferencia significativa entre la percepción de “mi empresa” (59% de confianza) y “las empresas” en general (35%). Esta brecha sugiere que, si bien existe una mayor cercanía con las empresas específicas donde las personas interactúan directamente, queda un camino por recorrer en la construcción de una percepción positiva global hacia el sector privado.

El aumento en la confianza se explica, en parte, por los esfuerzos concretos que las empresas han desplegado para responder a las expectativas de la ciudadanía. Por ejemplo, el 91% de las empresas encuestadas cuenta con ejecutivos responsables del relacionamiento comunitario, y el 54% de los directorios aborda la sostenibilidad como un tema estratégico de manera semestral. Asimismo, el 73% de las compañías capacita a más del 40% de sus trabajadores, mientras que un 72% ha integrado objetivos de carbono neutralidad, evidenciando un compromiso con la gestión responsable y el desarrollo inclusivo.

La ciudadanía valora atributos como la estabilidad y las oportunidades de crecimiento profesional, elementos que, gestionados adecuadamente, pueden consolidar un círculo virtuoso de confianza y productividad. Paralelamente, la relación empresa-consumidor, identificada como clave en el análisis de redes sociales, sigue siendo un pilar fundamental para sostener esta tendencia al alza.

Esta recuperación de confianza no solo es un signo positivo para las empresas, sino que también refuerza su rol como motor de desarrollo en Chile. Las empresas privadas generan empleo, innovación y riqueza, y tienen la capacidad de actuar como agentes de cambio en la construcción de una sociedad más equitativa y sostenible. La mejora en la percepción pública debe ser vista como una invitación a redoblar esfuerzos, consolidar buenas prácticas y demostrar que la ética y la responsabilidad corporativa son pilares esenciales para su crecimiento.

Chile necesita seguir fortaleciendo la amistad cívica y fortalecer la valoración hacia el sector privado que es un motor para el desarrollo. Calificar a los empresarios de pesimistas ideológicos va justo en el sentido contrario a lo que el país necesita. La confianza se construye entre todos.

*El autor de la columna es vicepresidente de Sofofa

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.