Net Zero – La gran oportunidad para Chile

Gobierno advierte deterioro en déficit hídrico y que 2021 podría cerrar igual que 2019, el año más seco de la historia

"Las bases del mercado de capitales a partir de los cuales se estiman y determinan los retornos y riesgos de largo plazo están reflejando efectivamente los impactos del cambio climático, constituyéndose, estos últimos, en un catalizador clave en los precios de los activos".



El planeta llegó a un punto de no retorno. Esa es la conclusión del reporte del IPCC de la ONU, un panel de más de 234 científicos de 66 países, que finalmente oficializaron que la actividad humana ha calentado al planeta a una tasa sin precedentes. Cada una de las últimas cuatro décadas ha sido sucesivamente más calurosa que las anteriores. Inclusive, la temperatura global de la superficie fue 1,09°C mayor en el periodo entre 2011-2020 comparado con los años entre 1850 y 1900.

Con esta noticia, cualquier compromiso que los países hayan adquirido para frenar el cambio climático y limitar el calentamiento global, debe pasar de un mero ejercicio teórico a una serie de acciones concretas. Y rápido.

De acuerdo a conclusiones en Davos 2021, así como estimaciones de expertos de diversa índole, la oportunidad de inversión para lograr la transición a una economía verde o net zero es de unos US$50 mil billones (US$50 trillion en inglés). Solo en carbono neutral, según cifras de BlackRock, el costo anual de inversión necesario para alcanzarlo será entre US$3 y US$7 mil billones anuales.

Transitar hacia una economía medioambientalmente estable o net zero implica necesariamente alinear climáticamente nuestra economía mundial, coordinando industrias, empresas, gobiernos e inversiones hacia el cero neto; y sabiendo compensar con menor emisión por parte de algunos rubros, a aquellos sectores que no pueden aportar con reducciones significativas.

Sin duda, los riesgos climáticos conllevan a un riesgo de inversión relevante, lo que afecta los flujos de capital. Es así, como se hace evidente que aquellas compañías y países que estén mejor preparados para esta transición de la economía se beneficiarán de una preferencia por parte del capital, que buscará, de manera continua, mejores retornos de largo plazo, ajustados por riesgo. Lo anterior se traducirá en efectos positivos en la mejora y aumento del empleo, infraestructura y atracción de inversión extranjera en aquellos receptores del capital.

En esta línea, en su tradicional carta a los CEOs, Larry Fink afirmó a inicios de año que los modelos de negocio de todas las compañías serán profundamente afectados por la transición a una economía net zero. Las empresas con una estrategia de largo plazo y con un plan claro prevalecerán al inspirar confianza en sus stakeholders, mientras que las que no se preparen con tiempo sufrirán efectos negativos en sus negocios y valoraciones.

Las bases del mercado de capitales a partir de los cuales se estiman y determinan los retornos y riesgos de largo plazo están reflejando efectivamente los impactos del cambio climático, constituyéndose, estos últimos, en un catalizador clave en los precios de los activos.

Chile ha dado pasos importantes para promover inversiones en energías renovables y nuestro posicionamiento en minería es también una ventaja importantísima al momento de extraer y desarrollar productos que formarán la base de la transformación energética global. Cobre verde, baterías de litio e hidrógeno verde son algunos de los que más suenan, pero habrá más y la posibilidad de desarrollo que acompaña avanzar en esta dirección es significativa.

Lo cierto es que nunca había estado tan claro dónde estará a futuro el foco de oportunidad de inversión para los próximos 25 años. Es así como los inversionistas deberán reacomodar o rebalancear sus portfolios con esta lógica; las compañías, recalibrar sus estrategias de mediano y largo plazo; y los países deberán poner los incentivos adecuados para verse beneficiados de la ola de inversión más grande la historia. Muchos inversionistas ya han empezado, toca actuar para no dejar pasar esta oportunidad.

** El autor es Country Manager BlackRock Chile