Remuneraciones crecieron menos que la inflación por segundo mes consecutivo en noviembre

El fuerte aumento de la inflación, que llegó en noviembre a 6,7% interanual, su registro más alto desde diciembre de 2008 (7,1%) y con perspectivas de seguir aumentando, se sigue sintiendo con mucha fuerza en el país, golpeando el poder de compra de los trabajadores chilenos, ya que las alzas salariales no le pueden seguir el ritmo.

De acuerdo a los datos salariales entregados hoy por el INE, el Índice de Remuneraciones nominal tuvo en noviembre un alza en 12 meses de 5,8%, dos décimas menos que el mes inmediatamente anterior. Este resultado no alcanzó a compensar el alza del IPC en el período, por lo que el Índice de Remuneraciones Reales (el que ya tiene descontada la inflación del período) registró una caída de 0,9%.

Esta es la segunda baja consecutiva en ese índice, luego del retroceso de 0,1% de octubre. La anterior caída interanual de las remuneraciones reales se produjo en mayo de 2020, pero en esa ocasión estuvo más influenciada por el acotado incremento de las remuneraciones nominales (2,6%), lo que contrasta con el 5,8% de registrado en noviembre que, de hecho, está por sobre el promedio de la serie iniciada en 2017, de 4,8%.

Con todo, mes contra mes, el Índice Real de Remuneraciones Reales anotó un alza de 0,2%, luego de tres caídas consecutivas, lo que se explica por un alza mensual del IPC de 0,5% versus el incremento de 0,7% del Índice de Remuneraciones nominales. En términos desestacionalizados mes contra mes, eso sí, igual hubo una caída, de 0,1%.

En lo que va registrado del 2021, las remuneraciones reales anotan una caída de 0,9%, la mayor en ese período de la actual serie empalmada, que parte en 2010.

Así,, tal como el mes anterior, la inflación logró “comerse” toda el alza promedio de remuneraciones, aunque algunos sectores han logrado escapar y siguen mostrando incrementos por encima del aumento del nivel de precios.

En particular, los rubros con los mayores crecimientos nominales en 12 meses son los de Actividades Artísticas y Recreativas, con un alza de 8,7% (2 puntos más que el 6,7% de inflación); seguido por el sector de Alojamiento y Servicios de Comida, que registró un aumento interanual de 8,6% (+1,9% real), luego de ser una de las actividades más golpeadas por la pandemia; y la Construcción, con un alza de 8,4% (+1,7% real).

Por el otro extremo, las alzas más acotadas se registraron en la Administración Pública, con solo 1,7% nominal, lo que se traduce en un caída en su capacidad de compra de 5% en 12 meses, seguido por los salarios de los trabajadores del sector de Enseñanza, con un aumento de 3,6% (baja de 3,1% tras descontar inflación).

El empleo asalariado anotó en noviembre un aumento de 5,3%, siguiendo su tendencia a la desaceleración respecto a los meses previos y lejos del 10,4% registrado en julio, aunque aún beneficiándose de las bajas bases de comparación.

Con este dato, la masa salarial de los trabajadores asalariados (que es la suma de la evolución del empleo y de las remuneraciones en términos reales) subió 4,4% en doce meses, su menor número desde abril pasado. La masa salarial se refiere al total de pagos que se realizan vía salarios a todos los trabajadores del país y es un elemento central de la evolución del mercado laboral.

Con todo, en términos de nivel (considerando el inicio de la serie en 2011 como base 100), la masa salarial llegó a su posición más alta desde marzo de 2020, justo previo a la pandemia, pero con camino por delante, ya que aún quedan por recuperar cerca de 500 mil empleos, en relación a los que habían antes de la pandemia.