La nueva escalada en la guerra comercial entre China y Estados Unidos que comenzó el 1 de agosto, cuando Donald Trump anunció la aplicación de aranceles adicionales contra el gigante asiático, y que se intensificó el viernes pasado con la réplica de este último, ha remecido por completo a los mercados financieros globales y locales.

Uno de los instrumentos financieros más afectados a nivel local ha sido el cruce entre el dólar y el peso chileno. En lo que va del mes el tipo de cambio se ha elevado $21,2 hasta $718,5 donde ha exhibido la volatilidad mensual más alta desde febrero pasado. Incluso, el 5 de agosto alcanzó los $720,8, su máximo nivel desde enero de 2016.

A su vez, la profundización de las tensiones comerciales entre las potencias fue el principal factor que impulsó a los bancos de inversión internacionales a cambiar sus proyecciones sobre el tipo de cambio para lo que queda de 2019.

A fines de julio una muestra de Bloomberg que recogía estimaciones de 10 bancos de inversión globales apuntaban, en promedio, a que el dólar llegaría a $689 al tercer trimestre y a $690 a fin de año. En cambio, al 23 de agosto las proyecciones se elevaron, pues el promedio pronosticaba un tipo de cambio en $701 para septiembre y en $706 para el cierre de 2019.

Entre las entidades financieras de las que se recogieron las proyecciones en dicha muestra se encuentran JP Morgan, Wells Fargo y Standard Chartered.

Visión local

Una tendencia similar ocurrió en Chile, donde varios actores elevaron sus proyecciones para el dólar en lo que queda de año.

En EuroAmerica cambiaron su pronóstico para el tercer trimestre desde $700 a $715 y desde $710 a $720 para fin de año, en Santander hicieron lo propio, pasando de un rango de $680-690 a $700-715 para el cierre de 2019, mientras que el cálculo de Bci Estudios cambió desde $660 a $685 para diciembre.

Martina Ogaz, economista de EuroAmerica, indica que "las decepcionantes cifras económicas a nivel global registradas en lo último en Europa y China, sumando a la guerra comercial que ha afectado a precios de commodities, tanto crudo como cobre, nos han llevado a corregir nuestra estimación de tipo de cambio para este año, lo que además se suma a las débiles cifras locales que anticiparían nuevos recortes de la tasa de política monetaria por parte del Banco Central de Chile".

Por su parte, Bci Estudios consigna en un informe que "los riesgos de desaceleración global conllevan un tipo de cambio algo más alto de lo anticipado anteriormente", donde el factor guerra comercial ha tenido un rol crucial. En Santander también atribuyen el cambio de visión al aumento de las tensiones comerciales entre las potencias.

En tanto, Manuel Astaburuaga, director de Trading LatAm, Mercados de Capitales de Credicorp Capital, señala que el dólar "debería seguir acomodándose sobre los $700 y con riesgo de continuar a probar niveles máximos del año ($724) e incluso máximos históricos ($750)".

Entre los factores que respaldan su hipótesis, detalla, están que el valor del peso chileno relativo a la región es bajo, por lo que es la mejor moneda para fondear posiciones de valor relativo en Latinoamérica, que hay un sesgo a la baja en términos de inversión y crecimiento y que el cobre probará soportes técnicos clave.