Con una caída de 83,05% en lo que va del año, la acción de Latam Airlines refleja perfectamente lo que está ocurriendo con la industria de la aviación a nivel global. La compañía recientemente logró un acuerdo para reestructurar sus pasivos, pero aún se mantiene la volatilidad en sus papeles.
Al escenario se sumó el anuncio de Costa Verde, sociedad mediante la cual el grupo Cueto mantiene el 21,46% de la compañía, de desprenderse del 0,66% de la propiedad para completar el financiamiento DIP.
Si bien en la aerolínea se mantienen los porcentajes de los mayores accionistas (Delta con 20% y Qatar con 10%), entre junio y septiembre se produjeron una serie de cambios entre los demás inversionistas.
Según datos de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), en septiembre el número de accionistas de la empresa cerró en 3.704, muy por sobre los 3.147 que se registraban en junio.
Pero, al mismo tiempo, la participación de los ADR en la propiedad disminuyó. Si en el segundo trimestre JP Morgan, banco depositario de instrumentos, tenía 9,81% de la empresa, al cierre de septiembre la cifra cayó a 8,21%.
Banchile por cuenta de terceros subió de 6,72% a 8,42%, y las intermediaria de Santander subió de 3,63% a 5,08%, la BCI de 2,63% a 2,85%, y la corredora de Consorcio de 1,7% a 1,91%.
A la vez, AFP Modelo, que a junio figuraba como accionista con menos del 1%, ya no aparece en septiembre, pero se mantienen Capital, Provida y Uno, todas con menos del 1%.
