Mucho se ha dicho sobre el sector de ingeniería & construcción post estallido social. De hecho, de las compañías que han mostrado una caída brusca en el precio de sus acciones, destacan las relacionadas a esta industria. ¿Qué es lo que está internalizando el mercado? Pues básicamente una caída muy importante en la inversión tanto de corto como mediano plazo y un nivel muy bajo de ejecución de proyectos. En las siguientes líneas intentaremos separar mito de realidad y determinar qué es lo que realmente está ocurriendo y que deberíamos esperar.

De acuerdo con la Corporación de Bienes de Capital, la cartera a ejecutar en Chile para los próximos cinco años alcanza USD 68bn, concentrado principalmente en proyectos privados (74%), mientras que en términos de industrias los mayores aportantes son el sector minero (36%) y de obras públicas (26%). La pregunta es si post estallido social esta cartera sufrió una cancelación masiva. La respuesta es no. La misma corporación concluyó que esta cartera disminuyó sólo un 7% (USD -4.8bn), mientras que esperaban retrasos de aproximadamente 7 meses en la ejecución de los proyectos, pero que de todas formas sí se realizaran.

Por supuesto no son noticias positivas. No obstante, la industria se encuentra muy contratada con niveles de proyectos a ejecutar en máximos históricos, en buena medida por los millonarios contratos de la minera Teck (Quebrada Blanca II) y la forestal Arauco (MAPA). En base a esto, estamos esperando para la mayoría de las compañías un aumento relevante en la actividad para este año, en contra de las potenciales caídas estimadas debido a un crecimiento económico más bajo. Adicionalmente, teniendo en consideración crisis pasadas, las compañías se han vuelto muchos más ágiles a los cambios, mejorando fuertemente en eficiencias y enfocándose en los negocios verdaderamente rentables. Por esto, están muy bien preparadas para una baja real (que no esperamos) en la actividad.

En la historia de Chile, la minería ha sido el sector más importante en términos de inversión país, siendo su principal impulsor el precio del cobre por sobre el partido político del gobierno de turno o los diferentes problemas sociales internos. Es por esto, considerando los niveles actuales del commodity y el factor que los principales competidores de Chile en temas de inversión relacionado a cobre son Perú y el Congo, los cuales poseen una menor certeza jurídica, vemos que la fuerte inversión en la industria se mantendrá en un mediano plazo. En base a esto, creemos que, a pesar de niveles de confianza sobre el sector en mínimos históricos, las compañías de ingeniería y construcción sí serán capaces de mantener un nivel estable de actividad en los próximos periodos a pesar de la incertidumbre actual. Ahora bien, sólo necesitamos un pequeño cambio de expectativas para que algo de este panorama se empiece a incorporar en los precios.