Mientras los inversionistas buscan después respecto a los impactos del coronavirus, la renta fija sigue siendo uno de los instrumentos más atractivos en el arranque del año.

Y es que las condiciones del mercado alientan a la compañías locales a concretar colocaciones, lo cual permite refinanciar deuda y aliviar el panorama previo al plebiscito para definir una nueva Constitución.

La reactivación de las colocaciones no solo se concentra en el exterior, sino también en el mercado local.

"Las emisiones locales se han hecho porque como los spreads se han ajustado a la baja, ciertas empresas lo validan y deciden salir a emitir. La incertidumbre esm uy alta incluso en el corto plazo como para decidir no colocar bonos. El escenario de bajas tasas incentiva la emisión de bonos", dice el operador senior de inversiones en Tanner, Jorge Maureira.

Operaciones locales

El viernes pasado, Infraestructura Alpha informó a la Comisión para el Mercado Financiero, sobre la emisión de un bono con vencimiento en 2031, por un total de 1.485.000 UF, con una tasa de cololación de 4%.

La compañía además informó que los fondos captados serán destinado al refinanciamiento de los pasivos de la sociedad.

Dos días antes, Red Megacentro concretó la emisión de un bono a 2044 por 2.000.000 de UF, cuya operación obtuvo una tasa de 3,25%.

Lo mismo ocurrió la semana pasada con Infraestructura El Volcán, pues informó sobre la emisión de un bono con plazo a 10 años y por un total de 2.000.000 de UF. La colocación se concretó con una tasas de 1,88%.

Dicho repunte en la actividad de emisiones está en línea con la caída de la tasas de mercado. El rendimiento de los bonos de Banco Central en UF con plazo a dos años se ubica en  -0,81%, lo que supone una caída de 41 puntos bases en menos de dos meses.

Mercado internacional

De aquellas compañías que han optado por el mercado externo, destaca CMPC, al concretar la colocación de un bono con plazo a 10 años, por US$500 millones. Dicha emisión, del 7 de enero, obtuvo una tasa de colocación de 3,87% y un spread de 2% respecto al Tesoro norteamericano.

Las emisiones en el mercado internacional reinaron en el arranque de año. El 22 de enero, SQM informó a la CMF sobre la existosa colocación de un bono no garantizado con plazo a 2050 y  por un total de US$400 millones, cuya tasa de emisión se fijó en 4,22%.

En la misma línea, Andina B emitió deuda por US$300 millones con plazo en 2050 y a una tasa de 3,9%.

El ritmo de emisiones antre el apetito por activos refugio, no solo es una tendencia local, sino también internacional.

Según Bank of América, llevó a que los fondos de bonos registraran récords, pues la deuda con grado de inversión anotó ingreso de flujos por anotó su segunda entrada más grande la semana pasada, al totalizar flujos por US$13.400 millones. En tanto, los fondos de bonos de alto rendimiento registraron un máximo de 21 semanas, pues apuntaron ingresos por US$3.400 millones, en el mismo periodo.