Una mayor apertura de parte de los controladores de empresas medianas a explorar ventas o fusiones podría ser uno de los efectos de la crisis social.

La incertidumbre económica ha llevado a los inversionistas a adoptar escenario más cauto, tomando en cuenta que el Banco Central proyecta un crecimiento del PIB de apenas entre 0,5% y 1,5%.

Alfredo Ugarte, senior manager de finanzas corporativas de PwC, área que justamente tiene puesto el foco en empresas con facturaciones que entre US$10 y US$ 150 millones, señala que, si bien "en los últimos meses no hemos notado interés en acelerar decisiones venta", si "hemos notado más apertura a tener conversaciones bilaterales con potenciales compradores que se acercan proactivamente". 

El ajuste de la economía ha provocado un cambio en las expectativas, lo que se ve reflejado en la caída de 15,61% que arrojó el IPSA en 2019.  Pero este escenario, sumado a un cambio en el precio de los activos chilenos, no necesariamente sería favorable para analizar fusiones o ventas de empresas.

En esa línea, Ugarte detalla que la situación del país no afecta a todos los negocios por igual, "la situación país ha afectado principalmente a sectores ligados a la demanda interna de productos y servicios más sensible a los ciclos económicos", sin embargo, el ejecutivo señala que esto no necesariamente se va a traducir ventas en dichos sectores, "en sectores como el retail, los dueños de empresas saben que no es el mejor momento para salir a buscar compradores. Las empresas que tienen una posición financiera que les permite esperar o apostar a un mejor contexto, probablemente lo harán. Más que ventas de empresas, es probable que veamos fusiones o alianzas entre empresas buscando generar sinergias para enfrentar de mejor forma el escenario actual". 

Según el ejecutivo, el retail justamente es un sector donde ven interés por vender y hacer transacciones, así como en el eléctrico: "por un lado, tienes empresas que se dedican a desarrollar proyectos eléctricos para venderlos en distintas etapas de desarrollo. También existen centrales eléctricas en una situación financiera delicada, donde los acreedores están impulsando ventas o reestructuraciones de deuda. En todo caso estamos hablando de situaciones puntuales".
Respecto de la mirada de los extranjeros, Ugarte señala que "en los distintos procesos que estamos manejando, vemos interés de extranjeros por invertir en Chile. En especial en activos relacionados a infraestructura (energía, puertos, autopistas, etc…) o negocios relacionados al sector exportador o en otros sectores menos sensibles a los ciclos económicos. En el sector salud también estamos viendo interés de extranjeros por invertir".